•Lo siento...•//EddTom// -pausada-

- Final -

[・・・]

El peli-café se encontraba caminando por la ciudad junto con su amigo peli-naranja, estaban hablando de que tendrían que seguir ordenando sus cosas para el nuevo apartamento apenas volvieran.

Habían pasado ya dos años desde que todo pasó, aun no podían creer que Tord los había traicionado de tal manera, de los más afectados fue Edd, quien se sentía culpable de todo lo qué pasó, y en una muy pequeña parte, quizás lo era.

– ¿Crees que el este bien? – Preguntó Matt, sentía que era necesario hablar ese tema para que la herida de Edd pueda sanar – Ya sabes...Tord.

– Me importa una mierda realmente – respondió Edd intentando evitar la mirada de Matt que sabía que era una de probable decepción – No quiero hablar del tema, no estoy listo aún.

– ¿Y Cuando lo estarás? Han pasado dos años.

Un silencio incómodo se hizo notar mientras ambos seguían caminando, los pasos del de sudadera verde se hicieron un poco más rápidos intentando evitar el tema que lo tenía tan agotado y dolido.

– Edd, por favor...Se que es difícil pero-

– ¡No, tú no sabes ni mierda! – el silencio incómodo se hizo notar otra vez, ambos se habían quedado quietos mientras que Edd intentaba calmarse un poco – Era mi mejor amigo Matt, desde los cinco años nos conocemos. Yo realmente confié en él y me lo quito todo de golpe por un capricho  – sintió sus ojos llenarse de lagrimas – Matt, el me quitó lo que más amaba en mi vida...Debí haber confiado en Tom y lo único que me queda de él es el recuerdo su rostro antes de irse de casa, me miraba con tanto odio y resentimiento...No sabes lo que daría por verlo sonreír. Se fue odiándome, Matt.

Matt simplemente suspiró y se acercó a Edd para abrazarlo e intentar consolarlo, la muerte de Tom afectó enormemente a ambos amigos.

– ...¿Recuerdas que nos dijo Tom antes de irse? Dijo que se arrepentía de no haber hecho más para ayudarnos, pero que jamás podría guardarnos rencor por lo que pasó. Créeme Edd, si él estuviera aquí con nosotros el no te odiaría, él te amaba mucho, a su manera, pero lo hacía.

– Quisiera que pudiera estar aquí...

– Lo sé.

Luego de un rato de ambos intentando hablar lo sucedido, siguieron su rumbo por la ciudad hasta llegar a su destino; el cementerio.
Ambos aún dolidos sin poder superar la muerte de su amigo por completo, sentían que ya era tiempo de dejarlo ir por el bienestar de su salud mental.

Compraron unas pequeñas flores y las dejaron de yacía Tom, se quedaron un largo rato ahí, aproximadamente unas cuatro horas, pero al ver que ya era muy tarde, decidieron volver a casa, no sin antes despedirse

– Matt, tardaré un poco ¿ok? Espérame allá, iré en un momento.

– Está bien, tomate tu tiempo.

El peli-café vio a su amigo irse y luego volvió a observar donde yacía su amado, a quien no podría volver a ver. lamentaba cada día lo qué pasó y volvió a derramar un par de lagrimas mientras se aferraba a sus brazos y a la idea de que cuanto lo extrañaría.

Dedicó una última mirada al cielo y dijo en voz baja "realmente lo siento mucho" y lo último que esperaba fue sentir un viento abrumador y cálido, mientras se escuchaba un pequeño susurro diciendo "Te perdono, nos volveremos a ver".

Casi como una señal, Edd rápidamente se dio vuelta, mirando a todas partes. Al no ver nada, creyó que fue parte de su imaginación, aun así sintió esperanza de que Tom lo perdonaría, y con melancolía empezó su rumbo a casa.

Extrañaría tanto a su amado, y no habría día en el que no se arrepintiera o pensara en él.
Se sentía un desastre sin él.

Y esa frase que llegó tan tarde; "Lo siento", ya no valía nada en ese momento.