trece

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Brisa Domínguez

4 meses después.

"¿sabes? te tengo una sorpresita" comentó Angie mientras me abrazaba y apoyaba su cabeza en mi hombro.

"¿si? ¿cual, amor?" pregunté.

"quiero llevarte a comer a algún lado lindo"

"¿para que? no hace falta Angie, con que me cocines algo acá yo estoy re bien"

"No, pero quiero que vayamos"

"Bueno, pero a un lugar normal Angie, ¿si?"

"Si, ya tengo todo preparado" comentó con emoción.

"¿Porque estás tan contenta?"

"¿Porque no estar contenta si estoy con vos?"

"Te amo, pero de verdad, hoy estás más emocionada de lo normal"

"Ya vas a ver" dijo mientras reía.

(...)

"Es un re lindo lugar Angie, ¿cuánto gastaste acá? te quiero matar" comenté mientras miraba el lago alrededor.

"No importa, Brisa. ¿Para algo trabajo, o no?"

Rodee los ojos y me quedé observando cómo Angie movía los pies nerviosa, observaba el nerviosismo en su cara. ¿que estaba escondiendo?

"Angie, ¿pasa algo? estás muy rara"

"Nada, tengo hambre" rió torpemente.

Decidí quedarme observando la luz de la luna chocar en el río, después de un rato, un chico nos trajo la comida.

"Que lo disfruten"

"Gracias" respondí.

Angie empezó a comer las milanesas con puré que había pedido, yo comía pasta.
Pasó un rato y cuando terminé de comer, vi un papel pegado abajo de la copa.

"¿Que es esto, Angie?" pregunté, a esta altura ya estaba por llorar.

"Brisa, desde el día que te conocí cambiaste algo dentro de mi. Desde que empezaste a pasar las noches conmigo contándome esas cosas locas que aliviaban mis noches de maquineo interno supe que ibas a significar muchísimo para mi.
no se como expresarme porque en este momento lo único que me gustaría es poder dejar de hablar y perderme en tu carita toda linda y en esos ojitos brillosos que aunque no te gusten, para mi son los más lindos"

reí.

"me gusta todo lo que sos y un poco más, Brisa. Cada vez que estaba mal y sentía que no podía seguir, de alguna manera, aparecías vos"

Algunas lagrimas comenzaban a caer de mis ojos, pero en mi cara abundaba una sonrisa de punta a punta.

"me encantaría llevarme congelada la imagen de tu sonrisa en este momento" sonrío. "no quiero extenderme más porque hasta ahora lo hice demasiado, Brisa Domínguez, ¿queres ser mi novia?"

"Claro que quiero Angie" dije mientras me levantaba para hundirla en un abrazo.

Angie me abrazó y hundió su cabeza en mi pecho, por primera vez en toda mi vida sentí que le hacía bien a alguien y eso me hizo más feliz, porque podía causarle bienestar a quien causaba mi felicidad.

Nos quedamos un rato más admirando lo linda que estaba la luna esa noche, como su luz nos iluminaba.
Angie acarició mi mano y me sonrio.

"¿Viste? Yo te dije que un día las rejas ya no nos iban a separar más. Ahora estamos acá, siendo iluminadas por la luz de la luna, al aire libre, siendo Angie y Brisa. Siendo las dos personas más felices de la noche"

Mi sonrisa se borró cuando vi entrar un grupo de policías al lugar, ¿que hacían acá?

"Brisa, perdón. Tenemos una orden de arresto contra Angie" dijo Joaquín, a quien no había visto.

"¿Orden de arresto porqué? la puta madre, no hice nada" respondió Angie.

"Tenemos que llevarte detenida, te denunciaron"

"¿Denuncia porque? Soy la abogada, no se la pueden llevar así porque así" respondí.

"Perdón, pero la tenemos que llevar"

"Yo con ustedes no me voy" respondió Angie. "Brisa, vámonos" dijo mientras agarraba sus cosas.

Angie me agarró la mano mientras caminábamos, las entrelazó y me apretó fuerte.

"No des un paso más o disparo, Velasco"

Paré, pero Angie forzó su agarre y siguió caminando.

"No hice nada Brisa, no quiero que me lleven injustamente, camina"

Seguí sus pasos, pero tres fuertes ruidos impidieron que siga caminando, sentí como Angie dejó de caminar y como su agarre se deshacía cada vez más.

"¿Ann... Angie?"

No sabía cómo reaccionar.
No sabía que estaba pasando, no entendía porque Angie ahora estaba tendida en el piso.

"¿Angie? Angie, mi amor, reacciona. ¿¡Llamen a una ambulancia, ¿que mierda miran?!" grité.

"Brisa... Veni" susurró Joaquín.

"Soltame, no me toques, no la puedo dejar. No la quiero dejar"

Sentí como Angie tomaba mi mano y sonreí, mi Angie estaba bien.

"Brichu... Brisa" dijo entre susurros.

"Sh, no hables, está en camino una ambulancia"

"Brisa... te amo"

"Yo también te amo, te amo muchísimo Angie"

"Brisa... voy a estar ahí aunque no pueda hablarte"

Sentí como mi respiración se iba acelerando, mis lagrimas volvieron a salir y mi corazón estaba por explotar.

"No me digas eso"

"Brisa, te voy a acompañar a todas partes... ahora nada malo va a poder pasarme. Te am..."

Sentí como Angie soltó mi mano, vi como Angie dejaba de respirar, vi como todo mi mundo se destruía en segundos.

Angie, no pude decirte que aquello que tanto planeamos estaba pasando, perdón Angie, estoy segura de que habrías sido la mejor mamá.

rejas | brangie (terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora