BABY┇ THE VAMPIRE DIARIES┇1 TEMPORADA

CAPITULO 3

Cuando Stefan llegó, Damon lo recibió primero con un breve espectáculo con el cuervo que solía usar para asustar a las personas.

—¿Por qué estás aquí? —le preguntó Stefan extrañado.

—extrañaba a mi hermanito.

—odias los pueblos chicos. —le saco en cara— Son aburridos, no hay nada que hacer.

Damon puso los ojos en blanco caminando.

—me he mantenido ocupado.

—esa chica sobrevivió. —le comentó con sorna— Fue algo tope de tu parte.

El pelinegro sonrió.

—eso podría ser un problema... Para ti.

—¿Por qué estás aquí?

—podría preguntarte lo mismo. Sin embargo —Damon empezó a caminar de nuevo por la habitación — estoy muy seguro de que tu respuesta cave dentro de una palabra. Elena.

El pelinegro sonrió ante su silencio.

—es idéntica a Katherine. —hizo como que tembló del susto al imaginarlo— Solo esperemos que no sea igual de loca —Stefan caminó hacia él.— ¿te funciona Stefan? estar con ella. En su mundo ¿te hace sentir con vida?

—Elena no es Katherine.

—ojala, porque ya sabemos cómo terminó eso... Ahora, cuéntame, ¿hace cuánto que no pruebas algo mejor que una ardilla?

—Damon, no va funcionar

Damon le golpeo el brazo.— ¿Qué te pasa? ¿no se te antoja?

—basta

Damon volvió a empujarlo

—vamos juntos. Vi una chica allí. O mejor... déjate de tonterías. ¡vamos por Elena!

—¡basta! —Stefan lo empujó.

—IMAGINA CÓMO SERÍA SU SANGRE. ¡Yo lo hago!

—¡DIJE QUE BASTA! —gritó el castaño empujándolo por la ventana.

Ambos cayeron al suelo, pero cuando Stefan se incorporo estaba solo.

—me impresionaste. —sonrió Damon parado entre los arbustos— Te doy un 6 por falta de estilo. Pero me impresionaste. Estuviste muy bien con la cara de RAR RAR loco.

—solo es diversión, ¿verdad Damon? —se levanto del suelo irritado— Pero donde vayas la gente muere.

—obvio.

—aquí no —Stefan negó con la cabeza serio, acercándose a él.— no lo permito

—eso me sonó a invitación.

—Damon dime. Después de tantos años, ¿no podemos dejarlo en el olvido?

—te prometimos una eternidad de miseria. —le recordó cambiando su semblante a uno serio mientras la puerta de la casa se abría— Solo cumplo lo dicho.

—prometimos.... ¿ella?

Stefan amplió sus ojos mientras su hermano sonreía de lado y miraba algo detrás de él.

—¿pueden callarse de una vez?

Rápidamente el castaño se giró de lado para observar a la dueña de la voz junto a su hermano.

—nuestro sobrino se va levantar idiotas.

—Violet...

—Stefan. —fingiendo una sonrisa, la oji-gris se cruzo de brazos— ¿Sorprendido?