Prejuicios

IV

Por la noche Clark había llegado a la granja de los Danvers para reunirse con su familia, había llegado acompañado de una mujer griega la cual presentó como Diana quien quería viajar para conocer la familia de su mejor amigo. Diana era igual a las recién llegadas y eso era que también había nacido con un miembro masculino pero a diferencia de ser tratada como impura era codiciada en las amazonas.

—Diana esta es mi madre Eliza Danvers y mi padre Jeremiah Danvers

—es un gusto conocerte

—es un gusto también conocerlos

—está de aquí es mi hermana Alexandra ella es la que sigue de mi

—bienvenida a Midvale y por favor dime Alex

—gracias Alex

—esta es Linda mi hermana más pequeña

—es un gusto

—igualmente Linda

—la pequeña de haya es Nia la hija de Kara, ella la adoptó... por cierto ¿donde está Kara?

—se quedó dormida después de llorar por la horrible propuesta que Mike Mattwes le hizo

—¿que le propuso?

—que se casará con ella y dejará a Nia en un orfanato

—mañana iré a golpearle el rostro nadie se mete con mis hermanas

Nia subió las escaleras para entrar al cuarto que compartía con su madre, quien estaba de espaldas a la puerta, rodeó la cama para darle un beso en su frente; siempre estará agradecida de que no la abandonara en un orfanato, da la vuelta y se mete en su cama.

*
Sam apareció esa mañana arrastrando con sigo a Lena, había hablado con su amiga sobre la hija adoptiva de Kara pero ella no le creía estaba segura de que le había mentido a su amiga para que no la llame impura. Ambas se sorprendieron al ver que un hombre joven había abierto la puerta sorprendiendo a los tres

—¿ustedes están cortejando a mis hermanas?

La voz de Clark era de esperanza de que su pequeña hermana Kara estuviera siendo cortejada a pesar de los perjuicios que se hablaban de ella

—solo mi amiga corteja a Alexandra yo fui traída a la fuerza

En los ojos de Clark se veía la desilusión pero aún así las dejó pasar, en la casa la pequeña Nia jugaba con Diana la amiga de Clark, de alguna forma eso no le agradó nada a Lena, Alex llegó a recibir a Sam y ambas fueron el centro de atención por lo que Lena aprovechó para escabullirse al segundo piso, había una puerta abierta en la cual entró encontrado a una Kara cepillando su rubia cabellera; Lena se aclaró la garganta llamando la atención de la joven, la mujer le tendió unos guantes blancos los que la ojiazul había visto en el mercado el día que sé conocieron

—no deberías estar aquí

—no creo que haya nada de malo que dos impuras estén juntas

Lena se acercó lo suficiente y tocó uno de los senos de Kara lo que la llevó a recibir una bofetada de la rubia que ya tenía los ojos llenos de lágrimas

—AHORA SI SOY IMPURA!

—pero si ya lo eras!

—Dios te creí diferente pero escuchas los perjuicios de mi persona

—¿y el padre de la niña?

—adopte a esa niña que perdió a sus padres, su hermana no la quería y menos ir a un orfanato donde crecería y jamás sería adoptada! YO LE DI UN HOGAR!

Alexandra fue quien interrumpió en el cuarto de Kara para ver a su hermana llorando, tomó a la azabache del cuello de su vestido para sacarla así de la casa a empujones, Sam no hizo nada debía apoyar a Kara como su cuñada, Lena simplemente se fue.