Capítulo 08 - Rencores del pasado

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Luan Davis, el capitán del equipo de baloncesto de mi escuela secundaria, si me preguntas a qué persona odio más, nombraría a este hombre.

Por mi enfermedad siempre estuve en un estado anémico, pero eso no quiere decir que no pudiera hacer actividades físicas; en el pasado, cuando tenía 20 años, estaba supervisado por un educador físico que era mi amigo y, con su ayuda, podía hacer ejercicio ligero. Siempre he tenido un antojo desde que era adolescente... Quería hacer deporte.

¿Sabes lo que se siente querer nadar, jugar baloncesto, correr, hacer ejercicio y no poder? Debido a mi enfermedad, no podía esforzarme demasiado porque si me esforzaba demasiado, me desmayaba. En algunos de los peores casos, si me esforzaba demasiado, pasaba una semana en cama en el hospital.

Pero, a pesar de eso, mi médico dijo que podía hacer ejercicio ligero, y para mí eso fue suficiente; Solo quería conseguir una pelota de baloncesto y jugar un poco, incluso si estaba solo.

Pero este hombre... Luan Davis, no me dejaría en paz. Cada vez que entrenaba, cada vez que me esforzaba en algo, venía hacia mí y decía:

"Esto es patético; ¿Por qué un perdedor como tú lucha por algo inútil? ¡Deberías quedarte en una cama de hospital!" Y, justo después, me golpeó y me tiró al suelo mientras decía que no debí haber nacido, que solo era una carga para mi madre.

El clasico bullying que puedes ver en cualquier pelicula americana, no me hizo mucho daño, solo me empujo y me dijo que era un inutil y tambien que mi madre no debia haberme dado a luz. Pero, todavía no me daría por vencido; No lo estaba haciendo por él, lo estaba haciendo por mí.

Sin embargo... Con el tiempo, comencé a odiarlo. Lo acepté hablando de mí, no me afecta tanto, pero ¿¡mi madre!? Eso es imperdonable. Sabía que lo que estaba haciendo era inútil y que mi condición no me permitía hacer ejercicio, pero él era la persona que me recordaba lo inútil que era.

Si algo bueno tiene esta situación es que nunca lloré ni mostré debilidad. Puedo ser físicamente débil, pero me negué a llorar delante de nadie, me negué a mostrar debilidad; hay una gran diferencia entre ser intimidado y aceptar el acoso. Nunca acepté lo que me pasó, pero lamentablemente no pude hacer nada.

Un día traté de informarle esto al director, pero el director simplemente lo ignoró, así que hice lo que cualquier persona en su sano juicio haría; Dejé de practicar y esperé la oportunidad de vengarme. Desafortunadamente, esa oportunidad nunca llegó; alguien estaba apoyando a Luan Davis y no sabía quién era, tampoco quería decirle a mis padres.

Después de todo, ese era mi problema, se trataba de mi orgullo, tenía que resolverlo yo mismo. Mirando a Luan, puedo ver la marca de vampiro con mi visión que llamo 'visión vampírica'.

Cuando vi esa marca, entendí todo; tenía apoyo, precisamente hablando, el apoyo era del maestro de este hombre. Un noble vampiro...

¿Por qué deduje esto? Luan era solo un niño que sufría de una enfermedad que debilitaba sus músculos, pero, por alguna razón, todos se olvidaron de eso y mejoró de repente. yo tambien lo habia olvidado...

Incorrecto, sería más inteligente decir que el apoyo de Luan no era otro que un Vampiro, y yo, como un humano común, no podía hacer nada contra esa fuerza, ¿pero ahora?

Ahora las cosas eran diferentes.

Veo la pelota de baloncesto rebotando y deteniéndose frente a mí.

"¡Oye, tú! ¡Tira la pelota aquí!" Alguien me gritó.

Miro la pelota y una sonrisa aparece en mi rostro, atrapo la pelota en mi mano y empiezo a botar la pelota en el suelo mientras camino lentamente hacia la cancha.

Mis Tres Esposas Son Hermosas Vampiros『 1 』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora