[Siete]

487 50 9
                                    

Unas horas después

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Unas horas después.

La doctora encargada de la cirugía de su mejor amigo salió a la sala de espera, ganándose inmediatamente la mirada de la familia Rogers Stark.

—Señorita, gracias por esperar tanto tiempo, es de mi agrado informarle que la operación fue todo un éxito, sin embargo, su amigo deberá quedarse en reposo unos días.

—Lo entiendo, doctora. ¿Es posible que pueda verlo?

—Me temo que no, el efecto del sedante aún no ha terminado y por ende continúa durmiendo. Le recomiendo que vaya a descansar, podrá verlo en la mañana.

Se permitió dejar los nervios atrás al tener la certeza de que su amigo estaba con vida, por lo cual le brindó una amable sonrisa a la doctora.

—Muy bien, vendré mañana temprano.

—Pase una buena noche, señorita.

La pelinegra se giró hacia sus padres, quienes la achucharon con amor, dirigiéndose a la salida del hospital.

—Me encargaré de pagar la cuenta del hospital, es un alivio que el mocoso esté con vida.

—Gracias, papá Tony. Y sí, es un alivio que esté a salvo, espero que ese imbécil del casero se pudra en la cárcel.

—¿Estás segura de que ese muchacho no te gusta, hija? —preguntó Steve con una ceja arqueada.

—No, no me gusta, papá, simplemente le tengo un gran cariño, hemos sido amigos desde hace mucho tiempo, es como un hermano. —se revolvió el cabello— Además, ya sabes que no soy una mujer de ataduras ni relaciones desde lo del idiota de Pietro Maximoff.

—Creo que aún no se le ha quitado la marca del golpe que le dio tu padre con el escudo. —bromeó Tony.

La familia rio al unísono, mientras los padres se subían al auto que estaba aparcado tras la camioneta de su hija, quien se abrochó el cinturón y encendió el vehículo para dirigirse a su hogar, escuchando Too Much Love Will Kill You de la banda Queen, e irremediablemente con su anterior conversación, no pudo evitar pensar en su ex novio, el hermano de Wanda Maximoff.

Habían empezado a salir el verano pasado después de que ambos se confesaran que se gustaban, se había ganado la aprobación de sus padres y Wanda era una estupenda cuñada, sin embargo, Pietro era un mujeriego de tiempo completo, no podía evitar ver a otra mujer en ningún momento, incluso estando con ella, no fue mucho lo que tardó en terminarle por irse con una rusia de caderas pronunciadas.

Lamentablemente, ella se había enamorado del niño veloz, así que sufrió muchísimo cuando éste la dejó por otra mujer, sin embargo, todo su dolor se esfumó una noche de tragos, en la que terminó teniendo una estupenda sesión de sexo con el dios del engaño, olvidándose completamente del Maximoff —del cual, debía admitir que era pésimo en la cama— y concentrándose en las nuevas sensaciones que Loki le generaba.

Después de esa noche, ambos acordaron que no habría ningún tipo de atadura, relación, celos o reclamos, simplemente se trataría de sexo casual, sin involucrar al corazón en el proceso, por ende nunca hubo ningún tipo de problema, ya que nisiquiera mantenían una conversación más allá de un saludo o de un insulto, ya que fuera del sexo ninguno de los dos se soportaba.

Por eso hoy fue tan extraño cuando se sentó junto a ella en la sala para hacer conversación.

Desde el día de la cena con John, el pelinegro había estado actuando extraño, porque jamás la había dejado sin terminar, nunca le había hecho conversación y nunca le había molestado verla con algún otro hombre, ya que lo suyo era sexo y nada más.

Sabía que el dios era astuto, así que obviamente se habría dado cuenta de los sentimientos de su mejor amigo hacia ella, lo cual no era ningún secreto, ya que éste mismo se los había confesado una vez en una fiesta del campus en medio de unos tragos, pero al día siguiente ella prefirió ignorar ese hecho, porque como mencionó anteriormente, no lo veía de manera romántica.

¿Era posible que Loki estuviera celoso por ello?

Sonaba ridículo, totalmente ridículo.

Estábamos hablando de alguien que vive su vida de forma caótica, sin importarle relacionarse con alguien más allá de un encuentro sexual.

Así que tal vez esa opción de los celos quedaba descartada.

Pero si no era eso, ¿entonces qué le ocurría?

Y esas mismas preguntas que ella se había generado en su cabeza, también las tenía el pelinegro, quien después de que la ojimiel se marchara para ayudar a su mejor amigo, se cuestionó durante todo el día si tal vez, sólo tal vez, estaba comenzando a involucrar su corazón en medio de esta aventura.

Porque si estaba haciéndolo, eso podría terminar muy mal.

Secret [loki y tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora