Secrets [Rinzu] 🔞

capitulo dos 🌸

Antes de que sonara la alarma, Haruchiyo se encontraba con los ojos abiertos. Dio un par de vueltas en la cama y luego se levantó. El cielo todavía estaba oscuro, caminó hacia la cocina, encendió la cafetera y con desgano, comenzó a desempacar las últimas cajas que habían quedado. Unos minutos después, la alarma sonó, indicándole que el café estaba listo.

Llevaba algunos meses dando clases en el nuevo instituto, y aunque el ambiente con sus compañeros de trabajo era cálido, no podía evitar sentirse incómodo cada vez que tenía que dar clases en el salón 3-3.

Se sirvió una taza de café negro y tomó el móvil. Entre los mensajes de la noche anterior encontró un mensaje de Mikey. Tras varios meses de ausencia, volvió a aparecer. Supuso de inmediato que había vuelto a pelearse con su pareja. Siempre que volvía, era por el mismo motivo, deseaba ese lado salvaje de Haruchiyo. Pero Haruchiyo ya estaba harto del comportamiento infantil de Mikey. Ignoró el mensaje y se dio una ducha antes de salir para el instituto.

Al llegar se encontró con el regente en la sala de profesores.
-Profesor Akashi -mencionó el hombre al verlo-. Qué alegría encontrarlo tan temprano.

-Buenos días sr. Watanabe, ¿a qué se debe la alegría? -respondió, dejando sus cosas sobre una silla.

-La profesora Tachibana no podrá asistir hoy. Y tengo entendido que ella tiene la hora previa a la suya en el salón 3-3 -Haru asintió-. Es por ello que le quería preguntar si podría cubrir su turno.

-¿Me está pidiendo que haga un turno doble?

-Si no es un inconveniente para usted, claro.

Lo pensó un momento, daba la casualidad que tenía esa hora libre, el único inconveniente era tener que soportar durante dos horas cómo Rindou coqueteaba con su otro alumno, frente a él, sin ningún tipo de reparo, como si deseara provocarle celos. Pero ese no era un motivo que pudiera usar como excusa para rechazar la petición de su superior. Así que aceptó y se dirigió al salón.

Se sintió aliviado al llegar y ver que ese día Rindou no había asistido, y al notar que Baji tampoco lo había hecho, dio por sentado que estarían juntos. Pero no se sintió perturbado, este hecho simplificó su trabajo. Solo tuvo que ser amable con sus alumnas que como ya estaba acostumbrado, solían acosarlo.

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-¿Vas a incendiarlo? -preguntó Kakucho, con un brillo en los ojos, entusiasmado.

-Cuando anochezca -respondió Keisuke, mientras golpeaba con un bate los cristales de un auto abandonado.

Se encontraban bajo un puente que hacía años había dejado de ser transitado, lo cual les permitió tomar aquel lugar como propio. Solían juntarse allí para cometer actos vandálicos por puro placer.

-¿Qué pasa con Rin, por qué no está contigo? -preguntó Izana, sentado en el lado opuesto del túnel, mientras jugaba un juego en el móvil-. Casi no ha venido estos días.

Keisuke frunció el ceño. Últimamente su amigo ponía excusas para no salir.
-No lo sé. Dijo que no se sentía bien, pero sé que miente.

-¿Crees que se cansó de llevarle la contra a Ran? -preguntó Koko-. Tal vez, después de todo, se cansó de actuar como rebelde.

-Eso, o se está viendo con alguien más -acotó Hanma, provocando que Keisuke lo mirara con rabia-. Lo siento, pero es una posibilidad -dijo alzando ambas manos, al ver su reacción.

-No suena tan descabellado. Al final de cuentas, nunca le pediste ser oficiales ¿o si? -preguntó nuevamente Kokonoi.

Keisuke temía que aquellas palabras fueran ciertas. Nunca había considerado hacerlo porque Rindou le había dejado en claro que no tenía interés de un romance en serio. Por lo tanto, siempre se sintió seguro, pero ahora con la nueva actitud de su amigo, podría verse reemplazado. Hecho que casi podía asegurar, sobre todo después del encuentro sexual que habían tenido recientemente, donde Rindou se concentró plenamente en la tercera persona junto a ellos, ignorándolo casi por completo.
Tiró el bate al piso y giró en dirección a la salida.