DIRTY MEETING - BEOMHYUN (ADAP)

capitulo 2: De Aniversarios y bibliotecas ruidosas.

Tocó la piel de su amante, llevado por el intenso deseo que ardía como una fogata dentro de él. Sus manos se aventuraron a la cadera del contrario, bajándole los pantalones en el primer acto. Luego hurgó en la cinturilla de la costosa tela de su ropa interior y se los arrebató con un ágil movimiento, rasgándolo. Taehyun no se quejó, se limitó a sostenerse con fuerza y tenacidad del estante tras él.

Beomgyu deslizó sus ansiosas y expertas manos por toda la piel desnuda, desde los tobillos hasta la cintura, provocando que Taehyun gimiera y se le pusiera la piel de gallina. Sus zapatos y calcetines se fueron al montón junto con su pantalón y su ropa interior rasgada.

Le lamió la hombría. El menor de estremeció de pies a cabeza violentamente.

Su lengua se abrió paso hasta el palpitante glande, y lo acarició con aquella tersa y húmeda parte. Él pelirrojo ahogo un feroz grito y trató de echarse para atrás, pero no tenía escapatoria. No con esa inmensa estantería de roble detrás de él y con un Beomgyu escandalosamente decidido de rodillas delante de él. Los nudillos se le pusieron blancos cuando se aferraron más al único soporte que tenía, pues Beomgyu le había deslizado una mano por el muslo, después le levantó la pierna izquierda sobre el hombro y le abrió más ante su ardiente boca.

Golpeó su cabeza contra los libros cuando le enrolló aquella parte sensible con la lengua y luego comenzaba a meterlo lentamente en su boca. El calor se extendió por todo su cuerpo hasta el punto dónde aquella lengua hacia la magia que le estaba volviendo loco. Dobló sus piernas junto con su espalda y le obligó a que se acercara y metiera más de su polla. Beomgyu lo acepto con gusto.

Taehyun, sintiéndose muy atrevido, llevó sus manos hasta la cabellera castaña y enredo sus dedos en ella, evitando que el contrario se moviera mientras se balanceaba con vehemencia sobre él. Sus sedosas hebras castañas le acariciaban el interior de los muslos, provocándolo; aquello hizo que Taehyun se sintiera un poco más consiente de la situación en la que se encontraba.

Estaba en la biblioteca de la casa de sus padres, en su aniversario, en una reunión de suma importancia a la que había asistido una cantidad de personas de la clase alta, y él se encontraba ahí. Con las piernas abiertas y un hermoso y excepcional hombre entre ellas, saciandole el hambre entre roncos y excitantes gruñidos mientras le lamía, chupaba y masturbaba el ansioso miembro. Siempre daba con el punto exacto, sabía cómo conseguirlo, sabía cómo complacerlo en todos los sentidos, como si le conociera desde antes. Sus actitudes orales eran alucinantes e iban más allá de solo disfrutarlas. Aquello era devastador y adictivo. ¿Cómo sería tenerlo entre las piernas mientras le follaba sin control?

—Dios…estoy por correrme. –musitó entre dientes.

Beomgyu frotaba su lengua y toda su boca a lo largo de la palpitante polla, tentándolo, haciendo que Taehyun se clavara en aquella cavidad en funcionamiento, con necesidad y sin ningún remordimiento, solo pensando en la deliciosa calidez de aquel lugar. Las manos de Beomgyu viajaron al culo del pelirrojo, le apretó las nalgas sin vergüenza, amasando al mismo ritmo en el que su boca sacaba y metía su miembro. Tenía una forma tan carnal en cada movimiento oral, una adoración a su cuerpo, la manera equitativa en que los dos recibían placer, tan esencial como la sangre que le corría por las venas.

—Si…si.–Se dejó caer. Sintiendo como estaba a punto de obtener uno de los orgasmos más intensos de toda su vida. El calor y sudor en su cuerpo le achispaba de una manera increíble, acompañado del exquisito aroma que desprendía el cuerpo de Beomgyu. Su boca se hizo más ávida y eso impulsó a que las tetillas se le tensaran y arremetieron contra la tela de su camisa negra. El cuerpo se le estremecía a punto de llegar al tan ansiado y necesitado orgasmo.