[•Alternative•] [1]

3._ ¿qué haces aquí?

Tasha 

Era de noche,¿la hora? Ni idea. Estaba acostada en mi habitación escuchando música, y viendo mi celular. Dios, que hermoso es estar lejos de la humanidad, bueno, ni tan lejos, ya que en el piso de abajo estaban Dem y Honey, pero eso no importa, lo que importa es que ninguno de ellos está aquí molestandome. Aveces es divertido estar con ellos, pero aja, no es que me guste mucho estar con seres humanos, prefiero estar con mis audífonos escuchando música, leer, o cualquier otra cosa que no implique a otra persona que no sea yo.

Tenía tanta paz, que era demasiado bueno para ser cierto, a 10 segundos escuche a alguien subiendo las escaleras, y supe quien era, Dem, y venía hacia mi habitación. Palabra cierta, en segundos ya Dem había abierto la puerta de mi habitación.

-¡Hola, Tasha! -dijo, cerrando la puerta por detrás de el.

Se acercó a mi cama y se sentó, yo me senté de inmediato y me quite los audífonos.

-¿Qué quieres, Dem? - le dije mirándolo con cara de querer asesinarlo.

El esbozó una gran sonrisa y se acercó a mi para acostarse en mi regazo, ¿por qué siempre hacia eso? No es que le molestará mucho, pero estaba invadiendo mi espacio personal.

-Dem, sólo lo diré una vez, Y lo diré lentamente para que me entiendas - le informé con voz amenazadora, y bajando la cabeza para mirarlo a los ojos. -. Quítate... de encima... de mi... o te daré un puñetazo... que te acordaras de el día en que naciste - finalice con una falsa sonrisa, señalando la puerta para que se fuera.

-Oh vamos, Tasha. se que me quieres, y que no serías capaz de golpearme - dijo sonriendo, calmado, el muy idiota.

-Eso dijo Honey hace una semana, ¿y que paso? Le partí la nariz, así que, largo de aquí. - murmure levantandolo para que se fuera.

El se levantó y se sentó a mi lado jugado con mi sabana.

-Esta bien, ya me voy, sólo venía a decirte que, abajo está un chico que dice conocerte. Debe tener como unos 26, Que se yo. - finalizó colocándose de pie para ir hacia la puerta e irse.

-¿Un... chico? Pero yo no eh invitado a nadie a casa, no que yo recuerde.

-Si, un chico. Bueno, yo me voy, si quieres baja.

Y con eso se fue. Pero... ¿que chico me estaba buscando? Sólo había alguien que podría estar buscándola, Pero, ¿para qué?

Luego de pensarlo un poco baje, cuando llegue a abajo lo vi. Estaba sentado en uno de los muebles viendo su celular, llevaba pantalones negros, una sudadera azul celeste, botas converse negras y, como siempre, el cabello bien arreglado. Y ahí estaba el, mi buen amigo Y a la vez mi pesadilla.

Harbec.

Terminé de bajas las escaleras y me senté al frente de el, esperando que dejará su celular para preguntarle que demonios hacia en mi casa.

-Ah, Hola, Tasha. Tiempo sin verte -el me sonrió mientras guardaba su celular en su bolsillo.

-¿qué demonios haces aquí, Harbec?

-Bueno, quiero mi dinero. Pero ya - dijo en un tono serio.

-¿Y por que me lo pides a mi? Se supone que la que te lo debe es Ivie, no yo.

-Ivie no sé donde demonios está, tu eres su amiga, así que me pagas tu. - hablo con una sonrisita.

-¿Y si no que? Yo no te compre esa mierda, no es mi culpa que Ivie no aparezca.

El dirigió su mano a la cintura de su pantalón y saco un arma, apuntó hacia el pasillo detrás de mi y luego hablo:

-O me pagas el dinero o me lo cobro con la vida de tus amiguitos. Tu decides.

Se me tensaron los hombros, y en ese preciso instante supe que, o le daba el dinero o mataría a los chicos. No es como que me importe mucho pero ellos son como mis hermanos y tampoco quiero que se vallan con San pedro.

-Dios mio, ¿sabes que te odio, Harbec? -dije sacando mi dinero de mi bolsillo y entregandoselo.

-Muchas gracias, cariño, y si, sé que me odias. Todos me odian.  - el se acercó a mi para tomar el dinero y guardarlo en su bolsillo.

Luego de eso, se levantó del mueble y yo hice lo mismo, luego de dirigió a la puerta y me dedico una sonrisa.

-Adios, tash, nos vemos luego.

-Ahora si soy 'tash', ¿cierto? Jodete, Harbec. -procedí a abrirle la puerta para que  se marchará, pero antes de irse volvió a hablar.

-Claro, ya me pagaste, ya estamos bien.  -y luego de eso se marchó.

Cerré la puerta detrás de mi, y a los dos segundos vi como Dem y Honey salían del pasillo y se acercaban mi, probablemente para que les cuente que pasó.

-¿Y quien era ese? ¿y por que nos quería mandar con San pedro? -Honey fue el primero en hablar.

-Si, eso, lo que dijo Honey.

-Es... Un viejo amigo, y no importa por que los quería mandar al otro mundo.

Nadie dijo más nada así que opte por subir a mi habitación de nuevo, esperando que nadie viniera a molestarme está vez. Al llegar a mi habitación me  acuesto en mi cama. ¿Por qué Harbec vino a mi casa? El no se tomaría la molestia de visitarme sólo por dinero, como si no tuviera de sobra, ¿Qué planeas ahora, Harbec? Y ¿Por qué presiento que eso que planeas implica hacerle daño a mis amigos, y probablemente, a mi también?

☆☆☆☆☆☆

¡Holaa, burbujitas!

Esto es todo por hoy, no es muy largo el capítulo ni muy interesante, pero les prometo que pronto será mucho más interesante.

Bueno, hasta aquí mi reporte. ¡Besos en el Anastasio!

C.Y 

                                  <3