Luisa Madrigal x Female Reader One shots

Conociendo a los suegros

[advertencias] ninguna

[tipo] tierno

Dedicado a NatzukyWolft Espero q te guste uwu
Deberías decirle.— Dijo Mirabel mientras se encargaba de rayar el queso que le había entregado.—

¿Y qué tal si no se siente lista?, es decir, mis padres y mis hermanos mayores suelen ser algo... Celosos.— Suspiré.— Aún así, quiero que ella los conozca.

Cariño, estoy completamente segura de que Luisa amará dar ese siguiente paso y conocer a tus padres, ¡No te desanimes!, estoy segura de que ella estará feliz.—

Bueno, sí, tienes razón, le diré en la merienda.—

Bien, entonces sigamos preparando esto, antes de que lleguen y la merienda aún no esté lista.—

Ya tengo preparada la masa, los jugos están en la nevera, al igual que la tarta.—

Eres demasiado rápida.— Mirabel me entregó el queso ya rayado y sonreí, empezando a preparar las arepas.—

***

¿Puedo probar una?.— Mirabel me miró con ojos de cachorrito.—

No.—

Por fa.—

Más tarde, cuando lleguen todos.—

Es que, sabes que Camilo se tragará todo.— Suspiré y le entregué una arepa.— Te adoro.

Seguimos preparando la merienda hasta que poco a poco los miembros de la familia fueron llegando a la casa.

Camilo, si quieres ser el primero en comer, deberías ayudar y poner la mesa.— Dije.— ¿Viste a Luisa por ahí?.

¡Ahg!, está bien... y sí, la vi, estaba haciendo sus tareas muy rápido, se veía apresurada, dijo que era para venir a merendar temprano.— Asentí y ayudé a Mirabel a poner las cosas en la mesa después de que Camilo terminara.

Estuve mirándolo atentamente mientras se servía comida, aún faltaba doña Julieta, Agustín y Luisa, y quería que comieran bien, en especial mi fortachona.

Estaba sirviendo mi plato cuando sentí unos grandes y musculosos brazos envolverse al rededor de mi cintura.

Hola.— Sentí como Luisa besaba mi mejilla y sonreí.—

Luluboo, llegaste, ven, ven, tienes que comer antes de que Camilo acabe con todo.— Ella soltó una risita y le entregué un plato, sonreí al verla servirse su merienda.—

Amm... ¿P-puedo...—

Sí, hice una especialmente para ti.— Saqué la tarta de la nevera, Luisa quería saber si podía tomar un trozo extra, sabía que amaba esa tarta, así que decidí hacer una más pequeña aparte para ella.—

Eres la mejor, ¿alguna vez lo dije?.—

Sí, siempre lo haces mi amor.—

Creo que tendré que decirlo más seguido entonces.—

Eres adorable luluboo.— La miré y recordé lo que había dicho mirabel.—

¿Estás bien?, tú sonrisa cambió de repente.—

E-es que quiero preguntarte algo.—

¿Qué es?, sabes que puedes decirme lo que sea linda.—

Es que... ¿Quisieras ir a cenar con mi familia esta noche?... Y-yo, quisiera que los conozcas al fin.—

Luisa, quien estaba comiendo un trozo de mango que había picado, empezó a toser así que rápidamente di golpecitos en su espalda preocupada.

¿Estás bien?, ay como lo siento.— Ella asintió y sonrió.—