Me encuentro en el hotel, ya tengo 6 días en República Dominicana y mi tiempo ha pasado prácticamente, entre conferencias y entrenamientos con los nuevos aliados para nuestro proyecto de expansión y conocer cada lugar que puedo. Las imágenes y las referencias cultuales sobre Santo Domingo no mentían, es una ciudad hermosa, creo que en serio juzgué mal el país en un inicio; las personas son encantadoras, amables y muy alegres, en cada esquina se respira esa vibra contagiosa propia de un país caribeño, los lugares turísticos son una verdadera obra de arte, por lo tanto no pierdo el tiempo y me dispongo a buscar un nuevo destino para visitar la tarde de hoy, ya que la tengo libre.
Estoy parado en la habitación que ocupo, -con tan solo una toalla que me cubre de la cintura hacia abajo-, una suite ejecutiva del Hotel Holiday In, es la cadena hotelera donde los ejecutivos de Iron Code se hospedan en cada país que van, - me paseo por la habitación pensativo observando un folleto con los principales puntos turísticos de Santo Domingo que me han ofrecido e recepción- de repente mis ojos se detienen en un lugar que llama mi atención, por la imponente arquitectura que lo conforma: "Catedral Primada de América en la Zona Colonial", voy hasta la cama donde se encuentra mi portátil y busco más referencias del lugar, es una edificación hermosa que emplea la arquitectura gótica en su máximo esplendor, ubicada en el corazón de la antigua Ciudad Colonial y que es muy visitada por turistas de todos los países, además, la misma se encuentra ubicada en el Parque Cristóbal Colón, un espacio lleno de alegría, colores, cultura e historia que definitivamente llama a mi atención.
¡Tengo que ir! – digo en voz alta emocionado- seguro allá tomaré muy buenas fotos para mi fan page de Facebook, como ya he dicho, soy un amante del arte y la fotografía es algo que me gusta mucho, así que tengo una página donde comparto tomas de diferentes lugares alrededor del mundo a los que viajo, las hago desde mi iPhone, claro, pues solo soy un amateur en eso, pero tengo buen ojo.
Me cambio emocionado, coloco una camiseta blanca , unos jeans y tenis converse, algo casual, pues iré después de comer y en esta ciudad hace un chingo de calor, me dirijo al restaurante del hotel. Almuerzo, hago unas llamadas y le pido al chofer que tengo asignado que me lleve al lugar.
Llegamos alrededor de las 4:00 pm. Las fotos no le hacen justicia al lugar, es todo risas, música, alegría, y colores, camino recorriendo el lugar y tomando varias fotos para mi página, de repente, mis ojos se queda estáticos en un punto fijo, más bien, en una persona fija, -ella-
Me es imposible dejar de observarla: está agachada a pocos metros de mi, muy concentrada tomando fotos a unas palomas que revoloteaban en el parque, de aquí, y por la postura que tiene, solo puedo distinguir su abundante y rebelde cabello café oscuro, es largo, y a pesar de estar a medio hacer le queda bien, su piel es color caramelo - sin duda una verdadera tentación-trae camiseta blanca también, jeans desgastados y tenis converse, a juzgar por el color noto algo, ¡no mames güey! Parece que tienen una eternidad sin lavar- jóvenes y sus modas- río, y no es que sea yo viejo, tengo 36 años, pero sin dudas a la hermosa chica de la cámara debo llevarle algunos inviernos.
La sigo observando, ella no se ha dado cuenta, está muy concentrada en lo que que hace, esto me llama más a la atención, a unos cuantos pasos, está un banco con algunas cosas que asumo son de ella, hay una mochila rosada de Hello Kitty, un bolso más pequeño, y una carpeta de dibujos, supongo, así que la chamaca esta es toda una artista y además fresita- río otra vez.
Sin pensarlo mucho dirijo mi iPhone hacia ella, quizá esto no esté bien pero debo tener una imagen de ella, no se que tiene esa chica pero no puedo dejar de mirarla, - le tomo la primera foto- sigue agachada junto a un poste con una bobilla arriba, me dispongo a tomarle otra foto cuando de repente se pone de pie, se levante y con ella se me cae la baba, ¡no mames! Es mucho más impresionante ahora que puedo verla completa, baja la cámara, y parece observar la foto que hizo, hace algunos gestos como quien analiza algo y sigue viendo, no es alta, ni muy robusta, pero definitivamente su cuerpo llama por completo mi atención: tienes unas curvas muy marcadas, que dan paso a unas piernas que parecen esculpidas por los mimos dioses, está de perfil, por lo que mis ojos inmediatamente viajan a su trasero bien puesto, firme, redondo, sin poder controlarme observo sus pechos, tienen el tamaño perfecto para su estatura y complexión, su cabellera alborotada bajas un poco más de los hombros, llegando sus puntas hasta donde terminan sus senos, desde aquí puedo ver que no trae maquillaje, lo que le da un aspecto natural bastante relajado.
En mi distracción, no he notado que mi teléfono sigue apuntando hacia ella, a penas y puedo procesar ver toda su figura cuando de repente siento que mi respiración se detiene y me quedo completamente helado cuando ella levanta la cabeza y me mira, no puedo explicar lo que sentí al ver sus ojos: son unos grandes y expresivos ojos cafés oscuros, del mismo color que su pelo, con una mirada hipnotizante, que parece qué te escudriñara y develara hasta tus deseos más profundos, y les juro que mi corazón casi se detiene cuando de repente me dice: ¿Me estás espiando?
Y cuando creo que no puedo estar más envuelto en aquella mirada que parece estudiarme, hizo algo y juro que en ese mismo instante me movió hasta el piso: de repente sonrió y se le marcaron los hoyuelos del demonio, uno, del lado izquierdo, el toque perfecto para completar la sonrisa más genuina y bella que mis ojos jamás han visto.
