⸻𝗨𝗡𝗢.

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𝐌 𝐀 𝐓 𝐑 𝐈 𝐌 𝐎 𝐍 𝐈 𝐎.

La mala suerte era tu acompañante el día de hoy, eso lo tenias claro. Maldecías internamente tus pensamientos por seguir sobrepensando la situación, ¿Realmente tenias miedo? ¡Claro que sí! Aquel emperador llegó a la casa de jade sin aviso previo, cosa que  es de extrañarse y a la vez no. Conocías  la actitud impulsiva que este mantenía, mostrándose despreocupado e impaciente; Una cosa que realmente te sacaba de quicio.

Tu padre y el emperador charlaban plácidamente de reuniones pasadas y cosas políticas, tu solo podías quedarte sentada observando como ambos hombres hablaban. Tu cara no demostraba ninguna emoción, no querías delatar tu nerviosismo y miedo frente al hombre loco que gobernaba tus pesadillas. Necesitabas saber la razón de su visita lo más rápido posible, deseabas saciar aquella duda que te atormentaba desde la noticia de que vendría, estabas sumida en tus pensamientos hasta que una voz te llama por ti nombre.

⸻Mi hija estaría encantada de acompañarlo, ¿No es así?⸻.

Levantaste la vista, algo confundida por las palabras de tu padre el cual te obsevaba esperando una respuesta, claramente quería un si y eso no era de sorprenderse, después de todo el emperador estaba en su casa. Pestañeas una vez más intentando comprender la situación y decidiste hablar.

⸻Así es padre, es un gran honor poderlo acompañar, mi rey⸻.

⸻Oh, mi bellísima Flor de Loto, es espléndido oír tu aprobación. Bien, no hay tiempo que perder, ¡Acompañadme!⸻. Un paso adelante dió, demostrando nuevamente el aura voraz e indomable del azabache.

¿Cómo se atreve a llamarte de aquella maneraDecidiste solo ignorar aquel tonto apodo. Segundos después de que el emperador desapareciera levantó, proseguiste tú. La servidumbre los acompañó en todo momento, hasta cierto momento en donde el Rey levando su mano izquierda, con esta daba señal de que los dejaran solos.

No sabías donde se dirigían, y menos la razón, divagabas entre pensamientos hostiles, donde la mayoría terminaban con la muerte. Aun así preferias mantener tu orgullo intacto antes que preguntarle a ese emperador loco. Los minutos pasaron y junto a eso un gran silencio, te mantenias atrás de él muchacho, este continuaba su camino a paso firme, al parecer se dirigían al jardín que rodeaba la casa de jade.

𝐃 𝐄 𝐒 𝐅 𝐎 𝐑 𝐓 𝐔 𝐍 𝐀.                                   Qin Shi ✧ HuangDonde viven las historias. Descúbrelo ahora