Subo las escaleras para llegar al segundo piso del gimnasio, son cortas, asi que no tardo mucho. Llego a la parte de arriba y por un momento olvido que ella ya no viene en este horario. Este piso del gimnasio esta divido en 4 zonas; las maquinas, la zona de barras y pesas, un área para los estiramientos y un salón. Samara siempre rota por las 2 primeras áreas, así que volteo disimuladamente para buscarla mientras me dirijo a los vestidores, que están al final de la zona de máquinas, cerca de las escaleras.
No logro encontrarla y es ahí cuando recuerdo que ahora viene en la mañana. Se me borra la sonrisa y me meto a los vestidores.Mientras me cambio, escucho a un tipo hablar de algo, algo acerca de las vacaciones de Semana santa, me quedo con los tenis a medio poner y comienzo a pensar en lo poco que la veía antes de la pandemia, prácticamente nunca.
Recuerdo que la última vez que la vi antes del confinamiento fue una tarde en la que salía a pasear a Mara, la perrita Husky que su familia nos regaló. Nos encontramos mientras yo me dirigia al parque, ella venia acompañada de su mama y su hermana, y también estaban paseando a uno de sus perros, Mara se acerco a ellas cuando las reconoció, las olfateo un poco y luego seguimos con nuestros caminos.
Vuelvo a la realidad, y termino de ponerme los tenis, pero no me levanto, en lugar de eso, apoyo los codos sobre las piernas y me quedo mirando al piso.
Durante la semana he oído rumores de que después de Semana santa todos los alumnos regresan a las clases presenciales. Si eso es cierto, puede significar dos cosas; si sus clases son por la mañana puede ser que regrese al horario de la tarde en el gimnasio, si no, seguirá viniendo mas temprano que yo y puede ser que no la vuelva a ver, ni siquiera en la tienda.Suena tonto teniendo en cuenta que antes de que se cambiara de horario estuve compartiendo maquinas con ella por al menos dos meses y nunca hice mas por hablarle, pero ahora que el riesgo es real ya no siento que quiera hacerlo... tengo que hacerlo.
Por fin logro calmar la ola de pensamientos y me doy cuenta que llevo mas de 20 minutos aqui sentado. Tomo mi teléfono, me pongo los audífonos, agarro la botella de agua y salgo de los vestidores.
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Diario de un tipo enamorado
Novela JuvenilLa historia de un imbecil tratando de hablarle a la chica que le gusta despues de 7 años de reclusion social.