Niñera -Creepypastas-

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Capítulo 5

‡‡ DÍA DE JUEGOS ‡‡

POV Narradora

Sentada en uno de los columpios del parque, una pequeña niña observaba con tristeza a los demás niños jugar con sus padres en los demás juegos del parque.

—Mamá, mamá. ¡Quiero subir ahí!

—Más despacio cariño, déjame ayudarte

—¡¡¡¡Buaaaaaa, me duele!!!! ¡¡Papá!!.

—Vamos no llores, solo es un pequeño raspón jaja. Te comprare un helado si dejas de llorar ¿trato?.

—¡Que seas dos!

—Bien, te comprare dos.

De regreso a casa, caminando sola por el barrio de la ciudad, su estómago rugia de hambre. Pero no tenía más remedio que ignorarlo como muchas veces antes.

—Emmy, que alegría verte. He estado esperándote— sonrió una anciana mientras regaba las plantas de su pequeño jardín.

—Hola abuela, ¿necesita ayuda con su despensa?— pregunto la pequeña acercándose a la mujer mayor.

—No cariño, esta vez alguien más ya me ha ayudado a cargar con las bolsas.— respondió con una risita tierna hacia la pequeña. —¿Ya comiste cariño?— se inclino ligeramente hacia ella.

—Ni siquiera he desayunado abuela— respondió con sinceridad la pequeña quien jugueteba con un mechón de su delgado y corto cabello.

—Bueno, mi hijo no ha venido a visitarme últimamente. Me gustaría algo de compañía para no sentirme sola. ¿Quieres pasar? He preparado suficiente comida para ambas— sonrió la anciana abriendo la pequeña puerta de las cercas que protegía su jardín.

—¡Me encantaría!— exclamó feliz como haría cualquier niño pequeño de 4 años.

Aquella anciana era una de sus vecinas, su esposo había muerto debido a una enfermedad terminal y su única familia era su hijo, quien la visitaba seguidamente cada semana. Pero a pesar de eso, no podía evitar sentirse sola en esa casa. Pero la llegada de Esmeralda en su vida había cambiado por completo esa idea, Emmy solía hacerle compañía cuando se le presentaba la oportunidad y ambas podían complementarse mutuamente. Escapar de su soledad al menos por unos minutos al día y pasarla bien como abuela y nieta, aunque no tenían ningún tipo de lazo sanguíneo.

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POV Esmeralda

—Emmy, juguemos a tomar el té— pidió la pequeña castaña con el oso de peluche en brazos.

—Eh... Claro. ¿Tienen algún juego de tazas y tetera?— pregunte colocandome de pie y sacudiendo mi ropa.

—Bueno, solemos jugar utilizando los trastos de la cocina— informó la otra castaña de ojos rojos brillante.

—¡Iré por ellos! No tardaré— sonrió corriendo en dirección a la mansión a unos cuantos metros.

—Bueno, supongo que no habrá problema siempre y cuando regrese todo y como estaba— dije a la pequeña castaña quien esperaba pacientemente conmigo junto a un juego de mesa y sillas de madera en medio del jardín.