Capitulo 4

9 1 0
                                    

Patrick

Este será posiblemente el peor recuerdo, el peor momento de mi vida.

Esa mañana estaba preocupado por un caso que se me salía de las manos, me había consumido más tiempo del esperado. El llanto de Assane no ayudaba mucho tampoco, y a pesar de que Elena hacía todo por calmarla, la niña no dejaba de llorar. Me repitió que la niña tal vez estaba enferma pues ni siquiera biberón quería recibir. No entendí que en ese momento mi mujer y mi nena eran mi prioridad se acercó a hablarme con Ass en brazos aun llorando y en medio de mi rabia le dije "resuélvelo para eso eres la madre, deja de joderme", jamás le había hablado una manera tan brusca, me miró con rabia y se encerró en el cuarto de Ass, al rato dejé de escuchar el llanto fue entonces que me levanté y me acerque al cuarto, toque un par de veces y cuando abrió la bebé estaba en su cuna, dormida y con su cara rojita.

Elena trato de salir por un lado y podía notar que había llorado un poco, la tome del brazo y me disculpe por cómo la trate, solo me respondió que la niña tenía un poco de fiebre pero que según su madre no era nada grave que tan solo le diera un antibiótico especial para ella y que se iba a sentir mejor en cuestión de minutos. Nuevamente intentó zafarse de mi agarre y la atraje hacia mí la abracé fuerte y empezó a llorar. No podía parar de pedirle perdón, pues ella no tenía la culpa de lo que estaba pasando con mi trabajo, me perdono, dijo "estas estresado lo entiendo, pero que no se repita y menos frente a la niña" le prometí que jamás pasaría de nuevo y decidí parar un poco ese día con el trabajo para dedicarle tiempo a mi esposa y estar al pendiente de mi hija, todo estuvo bien un par de meses, hasta que finalmente había perdido el caso, me sentía defraudado era un caso que afectaría demasiado mi imagen como abogado, era un caso importante para el despacho y me lo habían encargado pues ya tenía una excelente fama como abogado.

Llegue con un humor de perros a casa, mi mujer y mi bebé estaban comiendo fresas mientras veían caricaturas, Elena cuidaba que los trozos fueran chicos para que mi niña pudiera comerlos, al verme llegar Ass quiso soltarse de los brazos de su madre para ir a los míos, ya sabía caminar aunque a veces se tropezaba, había cumplido su primer año dos meses atrás. Mi humor estaba tan de la mierda que las pase de largo cuando Elena se acercó a mí con la niña. Me miró extrañada y procuró distraer a la niña con los muñecos que se veían en el televisor sentándose en el piso.

"¿te pasa algo, amor?"

"perdí el maldito caso, eso me pasa" empecé a alzar la voz y Ass me miró intrigada y algo inquieta.

"acompáñame al cuarto" ella detestaba que gritara frente a la niña.

Empezamos a discutir y se subió de tono, la grite y le dije que estaba harto de la rutina, de Assane, e incluso de ella, que perder ese caso me dejaría por el suelo y que la quería lejos de mí que no quería verla. No era lo que sentía, fue una estupidez lo que dije, ella procuro mantener la calma y relajarme, trato de acercarme y de abrazarme y mi nivel de cólera fue tan alto que la empujé provocando que se estrellara contra la pared. No me reconocí, quise levantarla pero entonces ella me empujo alejándome, con lágrimas empapándole la cara, lágrimas que había contenido desde hacía rato con todo lo que ya le había dicho. En un impulso salió corriendo pidiéndome que la dejara sola, tomó su auto y salió a toda marcha aun llorando.

Me quedé un rato pasmado en la puerta de nuestra casa y 10 minutos después tomé a mi bebé, le bese la carita pues se veía asustada, la puse en su sillita dentro de la camioneta y salí a buscar a mi mujer. Me dirigí a un campo no muy lejos de la ciudad para buscarla es un lugar apartado al que solíamos ir cuando nos casamos e incluso llevamos a Ass, tenía una vista preciosa y era su lugar favorito. Pero bastó solo conducir unos 15 minutos cuando vi el auto de mi mujer impactado contra un camión. Habían patrullas y una ambulancia alrededor además de muchas personas mirando, salí corriendo y cuando quise cruzar la cinta amarilla un policía me detuvo, le dije que mi esposa estaba en ese auto y entonces se quedó inmóvil, me soltó y susurro "lo lamento" cuando cruce vi un cuerpo cubierto por una manta blanca y cuando me acerque un paramédico se agacho hasta el cuerpo y cuando bajo la manta vi el rostro de mi mujer con vidrios incrustados y llena de sangre, me desplome de inmediato y las lágrimas me inundaron mientras gritaba y lloraba abrazándola, el paramédico puso su mano en mi hombro y dijo "lo lamentamos, no pudimos hacer nada, fue inminente".

Fue entonces cuando mi mundo se fue a la mierda, mi mujer había muerto, el amor de mi vida había muerto y yo lo había provocado. Unos días después fue su sepelio. Mi bebé sin saberlo se despedía de su madre y mis deseos de continuar se iban con ella pero no podía dejarme caer, nuestra hija debía ser mi motor y con su muerte vino mi demencia.

La castaña frente a mí permanecía estática, me miraba fijamente mientras lágrimas caían por su rostro. Puse una foto de mi mujer en sus manos y se sorprendió por el parecido irrefutable.

-Por eso estoy aquí – dijo casi en un susurro

-Así es, Selena, la vida te trajo a mí, porque hasta tu nombre es similar

Se quedó quieta un tiempo más y finalmente puso la foto en mis manos y sin decir nada fue al cuarto de mi bebé y allí pasó la noche.

Me quedé mirando la foto un momento

– Mi Elena, jamás te fuiste, mi amor.

°°°

Lento pero seguro 

Cada día me siento mas segura de lo que escribo y me digo a mi misma que mientras lo haga con todo el amor que guardo por esto, esta bien. 

Viene otro cap ya ya ya 


Reencuentro en su miradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora