Otra piel

-2 imaginación

-“Imaginación” todos pensamos que esa etapa termina cuando entramos a la adolescencia, que equivocados estábamos, pueden creer que miro a una mujer en mi espejo que dice llamarse Esther, pero vive en el año 1999, Tal vez solo sea mi imaginación o tal vez es un problema de la gravedad, cada que hago el amor con la persona más importante de mi vida ella me mira y parece disfrutarlo.

Ustedes se preguntarán por qué les estoy contando Esto, pero la verdad yo tampoco tengo la respuesta, haci que pueden sacar su libro de texto en la página 22- le dije a mis alumnos.

Salí del instituto y quería dirigirme a cualquier lugar en el que pudiera despejar la mente, subí a mí coche y lo primero que hice fue poner mi canción favorita (chachacha) manejaba por una carretera solitaria, -dame de tu vida y de tu tiempo... Suficientes para ver... dentro de tus ojos el momento.... Que me obligué a renacer- cantaba al unísono con la canción, me sentía tan segura con esa canción, solo me hacía recordar a Alejandro. 

llegar a mi destino pude observar un lago con una agua cristalina, me recosté sobre el césped y al mirar al cielo solo podía recordar cómo fue que conocí a Alejandro, con ese uniforme de camarero, cuando derramó toda la champaña en mi vestido blanco, al verlo pide notar su nobleza y su amor por la vida, que hizo que me enamorara a primera vista, y hay sonó la canción -Dame vida y dame aliento.... Que Yo ya perdí el conocimiento- sonaba la canción en el parlante del restaurante, y me dijo ~No puedo cómprate un vestido nuevo, pero puedo enamorarte bailando un chachacha~ me agarró por la cintura y al bailar esa canción sentí mariposas en el estómago, una sensación que no había sentido nunca. Su semblante serio, y sus ojos oscuros, su cabello liso, sus manos recorrían mi espalda sin propasarce, ~No hay motivos, para decirnos adiós tan pronto~ me dijo Alejandro susurrandome al oído, me pegue a su pecho hasta que terminara la canción, y día con día me conquistaba de una manera diferente, serenata, un bote lleno de rosas, gritar en la rueda de la fortuna que hacía conocido a la mujer más increíble del mundo, presumirme en sus redes sociales, hablarle a sus amigos de mi, dedicarme canciones, entre otras cosas. Yo creía que el hombre perfecto no existe, pero lo conocí a el.

Abrí los ojos

Mire la hora que era y ya eran más de las 7 de la noche, me subí al auto y llamé a Alejandro para decirle que me esperara ya que teníamos una cita a las 6, me mandaba a buzón inmediatamente.

Llegue al restaurante pero no estaba, estaba decepcionada de mi misma no le cumplí a Alejandro, al llegar a la casa mire las luces encendidas, y al mirar el pasillo habían rosas tiradas por todos lados, entre a la recámara y hay estaba el, con una tarjeta que decía: “No es la mejor cita de la historia, pero te amo mucho mi amor” y la cama estaba con un chocolate y dos hot dog. Me acerqué a él y lo bese apasionadamente, cuando mire por el espejo, había alguien parado en el balcón y otra persona detrás de ella pegándole con un objeto de metal en la cabeza.

Me asusté demasiado que grite y corrí rápidamente hacia el balcón, pero no había nadie, Alejandro estaba igual de asustado que yo, pero el estaba asustado por mi reacción, el realmente no miro nada. ~Amor, es mejor que te deje sola un momento intenta descansar~ Alejandro salió de la casa y yo me senté sobre la cama, me tomé una pastilla para la ansiedad, y al verme al espejo no era yo, era otra persona, -que paso? Te puedo ayudar? - me preguntó la mujer del espejo, yo sabía que solo era mi imaginación, - tu no estás aquí, solo estás en mi cabeza, no existes - le respondí con lágrimas en los ojos, ella quedó viendo raramente mi teléfono y preguntó que era ese aparato, no puede ser que no sepa que es un Smartphone, me senté en suelo para verla mejor, y toque el espejo, pero no podía pasar a donde estaba ella, ella puso la mano justo donde yo la tenía, me hice para atrás rápidamente, comencé a tener bastante frío, y ella comencé a contarme cosas que pasaban en su casa, no sé si realmente existe, o si estoy viajando en el tiempo, pero hablar con esta extraña me tranquiliza, por lo que me dijo parece que sus padres son muy estrictos, y que no la dejan salir de la casa, me dijo que se llamaba Esther y que tenía 19 años, vive en el centro de Madrid y está en el año 1999. Es raro pero posible, yo la estoy viendo y no estoy imaginandome nada. En eso se abrió la puerta, y Esther desapareció, era Alejandro venía sudado y cansado así que se metió a la ducha, siento que con mis locuras el lo ha pasado mal, entre al baño y me metí a la ducha completamente desnuda, lo bese, y comenzé a tocar todas las extremidades de su cuerpo, me azotó contra la pared, y penetraba poco a poco, se escuchaba el eco de mis gemidos, el aun en el sexo es todo un caballero, me trataba con cariño, y se vino.

Al día siguiente, volví a verla, pero yo quería saber algo de ella, más de lo que ya se, puse nombre en Google, y hay estaba, la noticia.

*noticia* 

Una joven de 19 años fue brutalmente asesinada el 29 de junio de 1999, algunas personas dicen que fue un homicidio y otras que fue un suicidio, pero la víctima parece que tubo una fuerte pelea antes de caer del piso número 12 del apartamento en el que vivía.

No se pudieron localizar a sus padres raramente habían desaparecido hace 3 semanas.

*fin de noticia* 

No puedo creerlo pensé en ese momento, estoy hablando con una persona que murió hace 20 años, ¿Quien la mato? No puedo decirle nada, tal vez si le digo algo alteró el presente, pero si no le digo nada daño el pasado. Tal vez le cuente esto a Alejandro el me entenderá y puede ayudarme a encontrar al asesino de Esther.