Le dije que sí porque evidentemente estaba interesado en que terminemos la charla, y otra vez me volvió a preguntar si me acordaba de lo que habia pasado en la despedida, esta vez le respondí que sí, ya no me podia seguir haciendo la superada. Él en un tono canchero me dijo -ah, se ve que lo que pasó con Gonzalo te refresco la memoria!
Yo no tenía idea de como se había enterado de eso y tampoco me importaba, ya que no tenia porque darle explicaciones a Pablo. Y le dije -que tiene que ver Gonzalo en todo esto? Y él me retruco con un -no sé, decime vos...
Yo le respondí -supongo que nada, nosotros somos buenos amigos, y Gonzalo es un chico que conocí con el que pegué buena onda, no entiendo porque mezclas todo Pablo...
Él se levantó, me dijo -buenos amigos, ok .Me dio un beso en la mejilla y se fue a su habitación.
Yo quedé sentada en los sillones que había en el hall, sin entender mucho lo que acababa de pasar.
Fui a buscar casi corriendo a Paula para contarle lo que me había pasado, yo estaba muy confundida pero estaba segura que no iba a dejar que Pablo ni nadie me arruine mi viaje de egresados.
Al día siguiente íbamos a ir a esquiar por primera vez, y a la noche teníamos una fiesta libre, sin temática.
Nos levantaron temprano, yo alcancé a dormir 3 horas como mucho. Desayunamos y nos fuimos al centro de esquí. Llegamos y estabamos todos tan fascinados con la nieve que antes de que nos pudieran decir algo se armó una guerra de nieve tremenda, éramos todos contra todos, en un momento de la guerra viene alguien de atrás y me revuelca por toda la nieve, sí era Pablo yo le seguí el juego como para desmostrarle que más alla de lo que había pasado la noche anterior, de mi parte estaba todo bien, y aparentemente de su parte también.
Terminó la guerra y empezamos a aprender lo básico sobre el esquí. Pablo estuvo prácticamente toda la excursión haciendome bromas, tirandome nieve, en fin jugando conmigo.
Volvimos al hotel, cenamos, y empezamos a preparar la previa, esa noche tocaba hacerla en nuestra habitación.
Con las chicas ya teníamos todo listo, así que fuimos a avisarle al resto que cuando quisieran ya podían ir, a cada una le tocaba avisar en un piso.
Cuando terminé de avisarles a los chicos me subí sola al ascensor para volver a mi habitación y antes de que se cierre la puerta entró Pablo corriendo.
-Cualquiera diría que me estas persiguiendo, hoy en la nieve ahora acá, que onda? Le dije.
-Quiero hacer esto antes de que empecemos a tomar y nos digamos cosas que no sentimos.Respondió
-No me vengas con histeriqueos por favor, que quiero disfrutar del viaje de egresados. Le respondí con un tono bastante serio, ya me estaba cansando de sus idas y vueltas.
Él se puso serio y me dijo -Yo también quiero disfrutar del viaje Lu, y no lo voy a hacer del todo si no te digo esto que me vengo guardando hace tanto tiempo.
-Que cosa? Decime por favor, le contesté ansiosa.
-Me gustas, y mucho, quiero estar con vos, sé que con esto corro el riesgo de perder tu amistad, pero sinceramente no aguanto más ser solo tu amigo. Si no te lo dije antes fue porque no queria que te sientas incómoda, por que no se lo que sentis por mí...
Yo estaba totalmente paralizada rogando llegar al piso en el que estaba mi habitación.
Y él al ver mi cara continuo -Perdón si arruine todo en la despedida, o anoche haciendote esa escena de celos ridícula por Gonzalo, tenía terror de que por su culpa te olvides de mí.
Yo no decía nada solo lo miraba a los ojos.
Él término de hablar y me preguntó -vos? Que sentis?
Yo no supe que decir, ya había asumido que lo nuestro iba a ser solo una amistad, y su declaración me había descolocado por completo. Y el ascensor seguia subiendo muy pero muy lento.
No había mucho más que decir ni qué pensar, él me gustaba en serio y yo al él también.
Solo me acerqué y lo besé con todo el amor que me había estado guardando desde que lo conocí.
