One- short. AL GATO Y AL RATÓN

Parte 2.

Me di cuenta que mi única salvación era llegar al otro extremo de la tratadora de agua donde se encontraba la otra cabina donde mi otro compañero debería estar pues somos dos guardias nocturnos.

Entonces pensé la manera de llegar hasta ya sin ser atrapado por ese loco, tenia miedo mucho miedo, pero aun así esa era mi única salida; pedir ayuda.

Después de analizar la situación decidí irme por los conductos subterráneos, sé que suena más aterrador, pero considere que era la opción mas viable ya que el calor que hay ahí podría servirme para no ser encontrado.

No sé en qué rayos estaba pensado, pero supuse que mi juicio no estaba del todo bien.

Sinceramente ya no se en que idear, pero en estos momentos no estoy pensando centradamente, estoy aterrorizado, no quiero morir en sus manos.

Además, por más que yo intentara estar tranquilo y concentrado me era muy difícil pues de solo pensar que había un loco que se creía vampiro y que encima me quería violar no era como para estar muy calmado del todo.

Deje de divagar y me concentre lo mas que pude en escapar, pero entonces se escucharon pasos; que, al parecer, se oían en la entrada del lugar en donde yo me encontraba.

Eso hizo que mi pulso se acelerara.

X- Vaya humanito ¿Quieres jugar al gato y al ratón verdad?

Tú te escondes y yo te busco.

Sabes, me encontraba enojado por lo que me hiciste, pero solo pensar en lo que te haré cuando te agarre, ¡Mmm! Me pone muy feliz.

¡Ay no! Escucharlo hizo que se me erizara la piel, y temblara aún más y no solo por el frio que estaba haciendo, si me atrapa este loco; me torturara de seguro, ¡demonios! tengo que huir.

Seguí corriendo lo mas rápido que pude, temía que el me lograra atrapar, así que me esforcé aun mas para correr lo mas rápido posible y llegar donde mi compañero.

Logre salir al ultimo puente que tenia que cruzar para poder llegar a la cabina; intente gritar, pero por mi agitada respiración no me salían los gritos de auxilio.

Entonces dejé de intentar gritar y corrí lo más que pude para llegar allá.

Pero al llegar a la cabina me encontré con una escena que jamás me hubiera imaginado ver. Mi compañero, mi única salvación, mi esperanza de poder salvarme; se encontraba muerto con el cuerpo drenado; pálido; no tenía sangre, ni sus órganos.

Me aterrorizo mucho más que antes, pero no podía quedarme a llorar por lo perdido ya que aún tenía que escapar de él o yo sería el próximo.

Salí de la cabina y retome el camino del puente, pero él se encontraba ahí y al verlo mi cuerpo se erizo, el miedo me recorrió por todo mi ser, mis latidos aumentaron, no tuve más opción que correr para el lado contrario y me escondí detrás de las cisternas del agua.

X- ¡Mmm! ¿Dónde estará ese ratoncillo escurridizo? ¡Mmm! ¿¡dónde, dónde estará!?

El oírlo decir eso, me hizo imaginarlo con una sonrisa maquiavélica y el rostro de un lunático de manicomio, yo solo quería dejar de oírlo y que me dejara en paz.

Mi corazón latía más a prisa y aunque intentaba tranquilizarme, el oír sus pasos cerca de donde yo estaba escondido, no ayudaba mucho, pues mi pulso se aceleraba inundándome más de miedo.

Entonces dejo de oírse ruido, me asomé para ver donde se encontraba, pero de repente sentí una presencia detrás de mí y un escalofrió me recorrió cada célula de mi ser.

X- Te atrape ratoncito escurridizo.

Me giré para verlo y vi que tenia una sonrisa en el rostro, al parecer esto para el era un juego y creo que se estaba divirtiendo demasiado, mientras yo me moría del miedo.

X- Muy bien ratoncito es hora del juego final.

Intente escapar, pero el con una patada me mando a volar, haciendo que mi espalda chocara con otra de las cisternas dándome con ello un terrible dolor.

Caí al piso de golpe, tosi sangre e intenté levantarme, pero el puso su pie en mi espalda baja y me hizo ceder y quedarme en el suelo. Él entonces me quito la bata que cargaba y se puso detrás de mi otra vez.

X- Muy bien es hora del final.

Daniel- No, por favor detente, no lo hagas.

Sentí como coloco su miembro entre mis glúteos y posicionó la punta de esa cosa en mi entrada.

No por favor no lo hagas, snif, snif no. _llorando de miedo_

X- ¡Ha, ha, ha! ahora resulta que vas a llorar.

Daniel- Por favor no lo hagas.

Entonces me penetro de golpe haciéndome soltar un grito aturdidor, el dolor que me provoco al entrar en mi de esa manera fue un dolor inesperado e incomparable, sentía yo como mi interior era rasgado por dentro, me ardía y me dolía demasiado, era un dolor que jamás había sentido, de mis ojos salieron lágrimas y de mi boca gemidos de dolor.

Daniel- Por favor no, ¡snif! me duele mucho sácalo por favor. _llorando y suplicando_

El me ignoro y prosiguió a moverse dentro de mí de una manera salvaje y sin consideración. Esto ocasionaba que el dolor y el ardor que ya sentía aumentaran más, al grado de hacerme gritar de una manera que sentía que mi garganta quemaba.

Daniel- Que alguien me ayude, por favor ya no sigas; por piedad ya no, ayuda.

Pero no conforme con estar martirizándome así, el enterró sus colmillos en mi espalda, lo hacia de manera que quedara marca en mi piel pues prosiguió a morderme todo el cuerpo.

Cuando estaba a punto de terminar; el me mordió el cuello y succiono mi sangre, esa acción provocaba que mi cuerpo se estremeciera de una manera extraña, además; podía oír como mi sangre bajaba por su garganta.

Luego de todo eso yo me desmayé, ni siquiera sentí cuando el salió de mi o dejo de morderme.

Yo solo deje que mi cuerpo y mi mente cayeran en la inconciencia, ya había sufrido demasiado y no quería seguir.

Cuando desperté me encontraba en un hospital, me dijeron que estuve inconsciente durante dos semanas, que los doctores catalogaron eso como una especie de coma. Al despertar pregunte que me había pasado.

Ellos solo me miraron con ojos de lástima y compasión lo que hizo que a mi mente llegaran las horribles imágenes de todo lo que había vivido esa terrible noche, al recordar lo que me paso me puse a temblar solo por orgullo no llore, pero ganas no me faltaron.

Al ver mi estado el medico en jefe junto con una psicóloga me confirmaron lo que yo ya sabía, pero me negaba a creer; aun sentía las garras de ese ser recorriendo mi cuerpo y el dolor que me había causado, pero con fuerzas me negaba a creer, pero ellos solo me reconfirmaron lo que mi cuerpo les decía.

Después de eso la policía me interrogo y dije todo lo que paso, sin dar detalles específicos. Pues para mí el que la gente me oyera contando el como había sido ultrajado; me llenaba de vergüenza y miedo.

Les conté todo a los policías que se encargaron de llevar mi caso, pero omití el detalle de que ese ser se creía vampiro o era uno la verdad no quiero ya ni pensar en ello.

Pasaron los días; me dieron de alta y nunca mas volví a trabajar en ese lugar pues los recuerdos de lo ocurrido me atormentarían siempre.

Solo me dedique a intentar seguir con mi vida. Aun me pregunto el por qué me dejo con vida y el por que me hizo todo aquello, tal vez no obtenga las respuestas a mis preguntas jamás.