One shots donde cumples tus deseos más oscuros y pecaminosos con tus personajes favoritos de kimetsu no yaiba.
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Un grupo de cazadores ya se encontraban desde varios días en la ciudad del distrito rojo para completar una misión al saberse que varias personas habían desaparecido y que en su mayoría han sido mujeres. Para acabar esta misión tendrán que matar al demonio que se encuentra ahí.
Entre ese grupo de cazadores estabas tú y habías sido "vendida" a la casa Tokito junto con Tanjiro, en la casa que se suponía que debía estar Suma, una de las tres esposas del pilar del sonido. Sin embargo, se habían dado cuenta que ella no se encontraba allí y todas las mujeres cortesanas de la casa decían que ella se había fugado, sabían que eso no era cierto.
En la casa Tokito ya habían pasado varios días y todavía no encontraban alguna pista de lo que estaba pasando o de cual demonio se trataba.
A pesar de ser una misión, no se salvaban de lo que realmente pasaba en el distrito rojo, no se salvaban de que los hombres vieran a las mujeres de las peores maneras para ver si se quedaban con ellas y las compraban.
Ese día tú y los demás cazadores no se habían reunido para platicar más sobre la misión como lo hacían siempre.
Ahora te encontrabas junto con Tanjiro en la casa Tokito, el que estuviera él ahí no se te hacia difícil porque al menos tenías la compañía de tu mejor amigo.
Se encontraban junto con la Oiran Koinatsu, quien había averiguado que Tanjiro no era mujer, aunque era obvio, también de que ustedes no estaban allí por ese trabajo. No le habían comentado nada de la misión por que les dijo que no había necesidad, pero a pesar de todo siempre les deseaba buena suerte.
Una de las mujeres de la casa Tokito llego a interrumpir la plática que tenían con ella, llamando así su atención.
—¡Azumi-chan, querida!, Tengo buenas noticias para ti. —exclamó emocionada la mujer al ingresar a la habitación.
Azumi era el nombre que el pilar te había dado para disfrazar tu nombre real, solo por seguridad.
—¿Ocurre algo? —volteaste a ver a la mujer un poco confundida.
—Hace unos momentos acababa de venir un hombre y quiere verte, pidió estrictamente esta noche. —dijo—. Tienes mucha suerte Azumi-chan, no llevas mucho tiempo aquí y ya hay un hombre esperando por poder comprarte.
La miraste un poco asustada y dirigiste tu mirada hacia Tanjiro, quien estaba igual que tú de. Según tú junto con los demás cazadores habían dicho que no debían preocuparse por algo así, pero para más precaución decidieron que ustedes tendrían un precio un poco elevado, pero más tú, ya que tu al ser una mujer de verdad, sería mejor que tuvieras un precio alto para no arriesgarse.
Por eso mismo lo que había dicho esa mujer los sorprendió demasiado y eso lo notó la Oiran.
—Vaya, sí que es una gran noticia Azumi-chan. —habló la suave voz de Koinatsu—. Entonces yo te ayudare a arreglarte ¿Está bien? —te tomó suavemente de los hombros al estar detrás de ti y sonrió con disimulo hacia la mujer que se encontraba en la puerta.
