El Patriarca Yiling.

No puedes huir.

No soy bueno con las historias largas porque no suelo tener mucho tiempo espero que les guste la actualización, y la historia será realmente corta porque tendremos menos muertes, jjaja.

Wei Ying canturreo felizmente deslizando su dizi entre sus dedos con la emoción de un niño de cinco años que había obtenido el mejor regalo de la vida.
Su sonrisa siempre dulce no se vio opacada, pero sí reducida en presencia a la sádica y divertida qué estaba poniendo en el momento que Wen Chao se arrastró por el suelo con las súplicas de perdón.

Wei Ying sonrió tan tranquilamente qué no parecía estar planeando algo, no hasta la mano derrite núcleos se lanzó hacia adelante para intentar tomar el núcleo dorado de Wei Wuxian.
Todos los presentes, (qué solo fueron un grupo selecto de discípulos Jiang, Lan y el mismo Jiang Cheng junto a Lan WangJi), retrocedieron asustados ante los gritos de pánico puro qué salieron de la boca de Wen Chao.
No hizo más que tomar entre sus manos el pequeño e insignificante núcleo dorado de Wen Zhuliu entre sus dedos con algo parecido a la decepción.

—Pensé que para alguien con tan terrible técnica—miro al hombre que estaba siendo sostenido por la energía resentida como sí fuera un simple muñeco de juguete—habría un núcleo dorado sorprendente detrás de ti—suspiros arrepentido, como sí no valiera la pena tenerlos en frente—hasta Taizi Dianxia encontraría esto como patético.

Wen Zhuliu solo miro al antes adolescente enfrente suyo, por más que la energía oscura lo rodeara como un felino adorable qué estaba recibiendo la atención de su dueño favorito. Esta energía parecía dispuesta a matar a cualquiera que se opusiera a la grandeza de su amo. Wei Wuxian era realmente encantador con ese cabello oscuro, la sombra de la muerte deslizandose tentadoramente por sus ojos y los labios rojos brillando con la profundidad de la misma tonalidad de sus ojos al usar la energía oscura.

—Veamos sí eres un buen trofeo para sus altezas—murmuro apretando sus largos dedos alrededor del núcleo dorado brillante, llenó de energía espiritual.

Parecía un agarre delicado, pero la presión puesta en el apretón desmentia lo delicado qué estaba siendo Wei Wuxian en esos momentos, su sonrisa dulce fue tan profunda, labios curvandose hacia arriba en las puntas con una ligera tensión agresiva, un solo apretón de esas delicadas manos y el núcleo dorado se hizo añicos, se rompió tan fácilmente como la seda, pero no parecía ser más que estar creando su mano en una absurda de fuerza anti natural.

El chasqueo de lengua creciente entumecio a todos, el silencio se hizo cada vez más pesado y profundo. La oscuridad se movió por la andrajosa habitación logrando capturar a Wen Chao.
Su sonrisa había desaparecido dejando una mirada triste qué pondría al más sensible realmente decaído, su dulce mirada de desilusión podría poner de rodillas a cualquiera.

—No era digno—negó varias veces con la cabeza, dejando a los espíritus y cadáveres feroces darse un festín con la carne y sangre aún caliente de Wen Zhuliu—y eso que Hua Hua estaba Interesado por mantenerlo como un juguete más de su colección.

Wen Chao se arrastró desesperado a los pies de Wei Wuxian, quien hizo una mueca al ver al antes egocéntrico tipo, lucir destrozado. Mantenía parches de cabello en su cabeza, apenas lo suficientes para cubrir el estado maltratado y dañado de la carne mortal.
Beso los pies de Wei Ying con reverencias profundas, en ese mismo instante qué rogaba por el perdón, Jiang Cheng y Lan WangJi lograron entrar al absurdo refugio del Wen.

Ambos quisieron decir algo medianamente decente, pero ver a Wei Wuxian patear el rostro horrible de Wen Chao sin ningún remordimiento fue extraordinario. El crujido de la nariz fue escalofriante, pero el sonido perfecto de las botas de Wei Ying arrastrándose por el suelo fue lo único suficientemente fuerte para hacerlos mirar de cerca.
Wei Ying qué había desaparecido por tres meses no parecía mal trecho, no había heridas, mucho menos su ropa de veía sucia o llena de polvo, su cabello estaba perfectamente peinado y atado con una cinta rojiza, mientras qué en su cinturón llevaba una borla elegante de tonos dorados y rojos.
Estaba sonriendo contra el viento de la noche oscura mientras sostenía al perro Wen del cuello con una facilidad sorprendente. La luz de la luna dejo ver ojos rojos brillantes y un Dizi de apariencia expectral.

—No eres lo suficientemente bueno—dictó sin problema—por eso Xuè Yǔ Tàn Huā solo te manda saludos—Sonrío dejandolo caer sin esfuerzo.

Eso dejo al hombre gritando más fuerte, Wei Wuxian lo ignoro a favor de mirar con atención a su hermano qué parecía estar muy sorprendido con su presencia. Sonrió con calma mientras escuchaba a los cadáveres feroces morder y desgarrar la carne a su alcance. Los sonidos de la sangre deslizandose y los intestinos siendo regados y mordidos sin discreción alguna. Eran ruidos familiares, ruidos qué le traían una paz enorme.

Jiang Cheng estaba congelado mientras apartaba la mirada de la escena extremadamente grotesca. De wen Chao gritando, ahogándose con su propia sangre mientras era devorado vivo sin clemencia.

—Cheng Cheng—saludo como siempre, intentando traer a él mismo la tranquilidad fuera del asesinato.

La mano de Lan WangJi salio disparada inmediatamente hacia adelante intentando tomar la muñeca de Wei Ying para llevarlo a Gusu de nuevo, de regreso a casa para que su tío pudiera revisarlo y regañarlo por tal imprudencia de irse durante tres meses donde comenzó la campaña para derribar el sol.

—Wei Ying...—llamo con calma.

El contrario corrió detrás de su hermano adoptivo ocultandose a la vista de su primo, sí quería ver a su A-Die, pero no se sentía lo suficientemente listo para decirle a Lan QiRen como había desaparecido durante tres meses, eso no sería bueno para su salud.

—Ahora me llaman Shàngtiān zuì ài de hóng shén—hablo sin darse cuenta, tan acostumbrado a su nuevo apodo qué quiso morderse la lengua, pero no había marcha atrás—otros me dicen Patriarca Yiling. Desde ahora todos se dirigirán hacia mi con estos nombres—se alejo rápidamente sonriendo de lado.

Xie Lian y Hua Cheng estarían orgullosos de su forma de ser. Después de todo ellos lo habían estado cuidando desde hace tres meses.

Gracias por leer y por la paciencia, los adoro.
Shēn hóng zhī sǐ significa muerte carmesí. Jaja