𝚂𝚎𝚝 𝚍𝚎 𝚐𝚛𝚊𝚋𝚊𝚌𝚒𝚘𝚗 "𝚈𝙾𝚄"
— ¿Que le pasa a tu familia? —pregunte, mientras tomaba un sorbo de el milkshake que me compró Love, estábamos en un lugar alejado de la ciudad, íbamos camino a un retiro espiritual, algo muy raro de explicar.
— Tengo un hermano drogadicto, mi madre es una psicópata y papá un infiel, todos muy superficiales —dijo, mientras hacia una mueca, un joven chico, como de mi edad se acercó.
— ¿Desean alguna cosa más? —dijo mientras me observaba, fui amable y sonreí.
— La cuenta —Love hablo de una forma extraña, el chico se alejó...
— ¿Como es que tu hermana te dejó venir?
— Digamos que cree que estoy en casa de una amiga —Love abrió los ojos como platos.
— ¿Porqué dijiste eso? —dijo frunciendo el seño en señal de que mi idea no le agradaba.
— Delilah me prohibió acercarme a ustedes, no podía decirle.
— Podrías haberle dicho que ibas a ir con una amiga a un retiro espiritual, no es tan difícil de pensar.
— Es lo mismo, no hagas drama por una cosa insignificante —me lanzo una mirada asesina, ella solía hacer drama por cosas insignificantes que terminan en peleas gigantescas.
— enserio?, esta bien, cuando te llamé preguntando en que casa estas no me haré pasar por tu amiga, por que sonaría muy dramática —dijo con sarcasmo, a veces no la soporto, pero son más las veces que pasamos buenos momentos.
No respondí, volvió el mismo chico sin dejar de mirarme, love pago la cuenta pero
— ¿Podrías dejar de mirarla así?, le incomoda —ella se levantó de su asiento y me llevo con ella al auto.
— ¿Puedes soltarme?,me duele— ella soltó su agarré, pero seguía enojada aún.
— este auto es una puta mierda —dijo golpeando el volante, ya que no prendía.
— ¿puedo ayudarte en algo? —pregunte, me enoja su actitud, pero mientras evite que no rompa nada todo estaría bien.
— No creo que sepas algo de mecánica, carajo.
— ¿Llamo a un taxi?
— ¡Dejame pensar! —la mire confundida, mi paciencia se acabo así que baje del auto y azote la puerta.
— ¿A donde vas? —no conteste a su pregunta, segui mi camino hacia el baño del lugar donde estuvimos y revisé los mensajes de Delilah, odio decirlo pero ella tenía razón, no sabía a quien recurrir así que el mesero fue mi primera opción, le conté mi plan y llamé a Delilah.