Sólo es cuestión de tiempo |OREGAIRU

Capítulo 16: Una cita deliciosa

Cuando abrí la puerta y salí de mi habitación, Komachi aplaudió y chilló de alegría.

"¡Te ves increíble, Onii-chan! ¡Podrías pasar por un verdadero asesino de mujeres!" Ella exclamo.

Mirando hacia abajo a lo que estaba usando, hice una pequeña sonrisa y negué con la cabeza. No me veía mal de ninguna manera, pero al mismo tiempo no estaba usando nada que normalmente no usaría. Era solo una camiseta, unos jeans y un par de tenis Y una de las viejas chaquetas bomber de mi papá que Komachi sacó de su guardarropa. Con toda honestidad, la chaqueta era bastante bonita. A pesar de lo viejo que era, todavía olía a cuero auténtico y me quedó sorprendentemente bien. También hacía calor, lo que definitivamente sería una ventaja más tarde en la noche.

Mientras Komachi zumbaba a mi alrededor, revisando todos y cada uno de los ángulos de la chaqueta para ver si me quedaba bien, revisé los bolsillos.

Teléfono, llaves, billetera... Muy bien, estamos listos. Pensé para mí mismo, comprobando la hora antes de deslizar mi teléfono de nuevo en mi bolsillo.

2 PM en punto. Una hora hasta que se suponía que nos encontráramos. Parece que lo estamos haciendo bien a tiempo.

Komachi me miró emocionado.

"Entonces, ¿adónde van Yukino-chan y tú?" preguntó con curiosidad.

Rascándome la cabeza, respondí.

"Ella nunca me dijo el nombre del lugar, pero es un restaurante cerca de su apartamento". Respondí con un labio levantado y un encogimiento de hombros. "De todos modos, no creo que a ella le importe mucho si no llego a tiempo, pero probablemente debería salir de todos modos".

Komachi hizo un puchero por un breve segundo y luego me palmeó la espalda.

"Aww, está bien entonces. ¡Será mejor que me cuentes todo cuando regreses!" Dijo, caminando conmigo mientras me dirigía a la puerta principal.

Sonreí y le di unas palmaditas en la cabeza.

"Servirá." Dije, paseando casualmente afuera.

El viaje en bicicleta a Yukino's fue relajado y tranquilo. Aunque me encontré con un viento en contra moderado, mi resistencia había aumentado sustancialmente y pedalear a través de él se sentía como nada. La charla y la sesión de estudio de ayer por la tarde también me ayudaron a tranquilizarme. Mientras cabalgaba, me di cuenta de que no estaba en mi cabeza como de costumbre; una sensación agradable por decir lo menos. Después de un viaje aparentemente corto, dejé mi bicicleta en el portabicicletas junto al apartamento de Yukino y le envié un mensaje de texto diciéndole que estaba allí. Por un momento, Yukino bajó y me saludó con un cálido abrazo.

"Wow, Hachi-kun. Hoy llegas a tiempo". Dijo con una sonrisa, tocándome la mejilla.

"Por supuesto que lo estoy. ¿Por qué no lo estaría?" Respondí, devolviendo el gesto.

Poco después, me reí entre dientes y negué con la cabeza.

"Entonces, ¿adónde?" Yo pregunté.

Yukino señaló calle abajo con la mano.

"El restaurante está a un par de cuadras al norte de aquí". Ella respondio.

Mientras caminábamos en la dirección que señaló Yukino, nos tomamos de la mano y charlamos sobre asuntos triviales. Durante las últimas dos semanas, Yukino y yo nos habíamos acostumbrado a burlarnos y hacer cosas lindas. Era casi gracioso, considerando que ninguno de nosotros era realmente del tipo que me hubiera imaginado haciendo ese tipo de cosas. Mi pasado de hace un par de años me habría mirado con desdén y habría hecho algún tipo de comentario sarcástico sobre "estar cegado por la juventud" o algo similar. Sin embargo, aquí estaba yo, disfrutando de algunas actividades típicas de pareja con Yukino y pasándola muy bien.