Capítulo 6

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JaeBum había entrado ya a su habitación de hotel, la verdad al llegar se quedó impresionado de lo grande y lujoso que era para ser tan barato. La habitación con cama de matrimonio tenía una vista hermosa de la ciudad en la que se encontraba, junto con un pequeño balcón con una silla y una mesa donde poder sentarse a disfrutar del buen clima.

Para su fortuna, había logrado recuperar un poco de su seguridad cuando se separó de Mark y Jackson, ya que su mente se calmó al no escuchar hablar a los dos chicos de todos los planes que tenían pensados.

Sentándose en la cama, agarró su celular y fue a buscar el nombre de YoungJae en la pantalla, al pulsar la llamada y escuchar el tono de espera, se sintió algo nervioso, no estaba seguro si el menor se había enterado ya de su llegada a Los Ángeles, pero su corazón le pedía tener contacto con él.

A los pocos pitidos, escucho cómo atendía la llamada, al escuchar la voz del menor sintió una breve oleada de calor recorrer su cuerpo, era la voz de la persona a la que amaba, aquella voz que llevaba tanto sin escuchar.

"¿YoungJae? Soy JaeBum... Esto.... Estoy en Los Ángeles, imagino que ya lo sabrás por Mark y Jackson, tenemos que hablar." La voz de JB se dejó escuchar por el altavoz, haciendo que la sangre de YoungJae se congelara.

Su voz sonó seca, grave, tensa... E insegura, lo que logró que este maldijera inaudiblemente.

El silencio siguió después de las palabras del mayor, quién no sabía si seguir hablando o esperar a que el menor le dijera algo, al no recibir respuesta se creó un nudo en su garganta, enseguida el pensamiento de que YoungJae  no querría verle le invadió.

"¿Hola?" JaeBum hablo de nuevo, carraspeando la garganta para calmar su voz y tragando el nudo de su garganta mientras esperaba con ansias que el menor respondiera.

"Hola... JaeBum." Se escuchó hablar a YoungJae unos minutos después, seguía sin creerse que el mayor estuviera allí, y aunque estuviera... No esperaba tener que enfrentarlo tan pronto, no sabía qué hacer, no sabía que decir. "¿Quieres hablar ahora?" Preguntó seguidamente, conociendo ya la respuesta.

"Bueno, creo que hemos esperado ya mucho tiempo para hablar... ¿No?" Otro momento de silencio apareció. "Me gustaría poder verte... Hay una cafetería que nos queda a medio camino a los dos, ¿podría ser allí?"

"Claro... Mándame dirección, nos vemos" YoungJae colgó el teléfono rápidamente, dándose cuenta a los pocos segundos que acababa de quedar con JaeBum para hablar de su relación.

Golpeó su cara con su mano, dejando escapar el aire que no sabía que estaba conteniendo y corrió a su habitación, debía preparase y sobretodo debía pensar en lo que le diría al mayor.

Por otro lado JaeBum se quedó mirando la pantalla del celular cuando el menor le colgó, no estaba seguro de si había sido buena idea llamarle tan pronto, aunque ya no había marcha atrás, y tenía que prepararse.

Pasada una hora, ambos chicos se encontraba de camino a la cafetería donde habían quedado. El primero en llegar fue YoungJae, el cual había salido con demasiado tiempo de antelación debido a los nervios de reencontrarse con su 'novio', se había pasado todo el rato pensando en que le iba a decir, y no había llegado a ninguna conclusión.

Un poco más tarde, llegó JaeBum, el cuál fue todo el camino dudando si dar la vuelta o no. Al llegar a la cafetería, busco con la mirada al menor, al cual localizo al fondo, con la mirada perdida mientras observaba a la gente pasar por la vidriera.

El mayor se sorprendió de lo cambiado que se veía YoungJae, con su cabello rubio se veía bien, bastante bien, llevaba una camiseta blanca de cuello abierto con un estampado en el centro y unos pantalones cortos que dejaban ver sus piernas. A pesar de haber pasado tanto tiempo allí, no parecía haber salido mucho, puesto que no se veía nada moreno en su tono piel.

Cuando YoungJae movió su mirada y se encontró con la del mayor, se le cortó la respiración, JaeBum estaba parado en la puerta del local, mirándole fijamente, y no iba a negarlo, se le veía extremadamente sexy, incluso más de lo que lograba recordar.

Ninguno apartó la mirada mientras el mayor se acercaba a la mesa y se sentaba, ambos analizaron al otro minuciosamente tratando de encontrar todas las diferencias que notaban en el contrario después de tanto tiempo.

"Me alegro de verte." JaeBum fue el primero en hablar, su voz sonaba más relajada que al teléfono. "Te ves muy bien." Ante las palabras del mayor, un fuerte sonrojo invadió las mejillas del menor, el cual no lograba que su boca se abriera para decir algo, solo observaba a JaeBum como queriendo averiguar si de verdad le tenía enfrente.

Pasado un rato, ambos se encontraban en silencio tomando el café que habían pedido, ninguno estaba seguro de que decir o por donde debían empezar, había tantas cosas de las que hablar y tantas cosas que decir.

"JaeBum yo..." Empezó a hablar YoungJae, logrando que el mayor centrará toda su atención en él, lo que hizo que sus palabras se quedaran atrapadas en su garganta, mordió su labio inferior, una acción que hizo que al mayor se le subiera el calor corporal, y trato de continuar. "No se qué decir... Yo.. verás... Lo siento."

YoungJae hundió su rostro en sus manos, sintiéndose un idiota por no poder decirle nada a JaeBum, había pensado tanto en sus palabras que al querer decirlas su cabeza se volvió un revoltoso cúmulo de frases e ideas.

"No tienes que disculparte Jae... Solo... Solo quiero saber qué sucede, porque no has vuelto... Sé que hace mucho no hablamos, y mucho menos nos hemos visto en todo este tiempo, pero necesito una explicación.." JaeBum esta vez sonó firme, a pesar de que su corazón se había derretido al ver el sonrojo del menor, su nerviosismo y actuar tierno que le caracterizaba.

Al final ... JaeBum seguía locamente enamorado de aquel joven que tenía enfrente.

Libro 2: AtrevidoWhere stories live. Discover now