𝑃𝑟𝑜𝑙𝑜𝑔𝑜.

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Kook, ¿vamos por algo de comer?

Asentí sin siquiera voltearlo a ver, Jimin paso una mano por mis hombros, empinándose un poco para lograrlo y me sonrió nostálgico.

Nos giramos para caminar al árbol dónde estaba recostado Namjoon y Yoongi, fumándose los aburridos cigarros de siempre, Seok Jin se veía demasiado bien con la ropa que llevaba, aunque tuviera los ojos tremendamente rojos.

Taehyung sujeto mi mano cuando llegué a ellos, me mostró la mejor sonrisa que tenía en el momento, acarició mi mejilla con ternura y con los ojos llenos de lágrimas juntó nuestras frentes, se despidió con un dulce beso en mis labios y terminó por alejarse lentamente de nosotros.

No podía acompañarnos debido a su padre, quien era de carácter estricto y cuadriculado, se montó en su impala negro mate, ese que tanto trabajo le costó conseguir y que tanto trabajo me costó reparar y avanzó por la avenida luego de que espero que su madre se subiera al auto.

No lo volvería a ver, eso era seguro.
Todo debía dejarlo atrás.

Lo vi partir en silencio, como el carro desaparecía con la distancia, desde que me enteré de la noticia hace 3 días no había llorado nada, sujete mi pecho con una mano, arrugando la solapa que mi madre había planchado con tanto esfuerzo, el aire me faltaba por el nudo en mi garganta que me causaba un dolor tremendo y cuando ya no tuve la fuerza para seguir soportando el dolor, caí de rodillas en el pavimento, mientras Jimin me sujetaba con fuerza, mis ojos se empañetaron completamente cegando mi vista, los brazos de mi amigo, que antes no solía serlo me abrazaron con fuerza mientras yo sufría tirado en el suelo, nadie se atrevió a decirme nada.

Jin aparto la vista de mí rápidamente y miro el cielo que descaradamente brillaba con un sol perfecto y la brisa ideal para un paseo en auto, Namjoon lo sujeto del cuello y lo abrazo.

Al final todos pasaban por el mismo dolor, ninguno volvería a ver a Taehyung dentro de mucho tiempo.

J-hope tomó mi mano y me levanto del suelo con ayuda de los demás, limpio mi pantalón y sonrió con los lagrimales llenos de sentimientos.

Fuimos a casa de Jimin por la cena.

Todos comimos en silencio, la tensión del momento no permitía que ninguno pronunciara palabra, la despedida de Taehyung había sido tan simple como un "Adiós, no veremos pronto", que nos dejó un mal sabor de boca. Revoloteaba la comida en mi plato de un lado a otro con mi tenedor, no tenía mucho apetito, quería un lugar privado para poder calmar la marea picada de mi corazón, así que me excuse con los padres de Jimin y con su permiso subí a la habitación de su hijo.

Me tiré a la cama en silencio, pero mi vista cayó justo en los ojos de Taehyung, de aquella fotografía que tenía Park en su cómoda, dónde estaban esquiando en la montaña, Park se abrazaba a Kim con fuerza, cerré mis ojos y esperé a que mi cansancio mental hiciera efecto, hasta caer en un sueño profundo.

Los días siguientes fueron una tortura para todos nosotros, todos preguntaban por él en la Universidad, la cara de YoonGi era un lío, tenía moretones por todo el rostro, debido a que inicio una pelea con algunas personas cuando se acercaban a preguntarle a Jimin por su compañero, Jimin solo sonreía y les explicaba decentemente, que se tuvo que ir por una injusticia a causa del imbécil de su padre.

Burlas por todos lados era lo que escuchábamos, y aunque no éramos muy amigos entre nosotros nos manteníamos unidos, al final todos terminamos involucrados en una pelea que causo nuestra suspensión por unos cuantos días de la Universidad.

Los días en casa eran peor, me sentía como cuando Edward abandonó a Bella en Luna Nueva, no había nada que me ayudara a sentir mejor, ni dormir, ni comer, ni salir con amigos, al final siempre terminaba borracho llamándolo, le gritaba que me había abandonado y que era un cobarde por no haber luchado por quedarse conmigo.

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