La niña que fue olvidada

¡Loki ha vuelto!

—Loki... Loki... despierta.

Loki gimió y se dio la vuelta.

—Cinco minutos más, mamá.

—Al parecer funcionó.

Loki sintió un ligero golpecito en la frente y volvió a gemir, apartándolo con un manotazo.

—Sí... felicidades majestades y príncipe Thor. El príncipe Loki ha vuelto.

—¿Qué quieres decir con volver? ¿Y no vamos tarde para tu coronación, Thor? —Loki por fin abrió los ojos y luego resopló—. ¿Qué te pasó?

Era una pregunta bastante honesta: el ojo de Thor tenía un tono bastante impresionante de púrpura y amarillo. Thor parecía un poco avergonzado.

—El Señor Oscuro.

Como siempre, Thor parecía esperar que Loki supiera y conociera a todos.

—¿El qué?

Y, por supuesto, no era cierto, por lo que Thor parecía completamente indefenso. Por fortuna, Frigga intervino.

—Loki... no has sido tú mismo...

[***]

Loki estaba sentado en el balcón, alternando entre tomar largos tragos de una jarra de la cerveza más alcohólica que había podido conjurar y sentarse con la cabeza entre las manos. Era una reacción comprensible al enterarse de que había intentado cometer genocidio el año pasado. Y que tenía una brecha de dos años en su memoria. ¿Era en serio un gigante de hielo?

Un borracho Thor estaba sentado junto a él, contándole todo lo que sabía de los últimos dos años. Al parecer, una viuda negra y un mago habían adoptado a una bruja cuyo hermano y padres abusivos abandonaron después de que no sobrevivió al ataque terrorista de una serpiente. Loki sospechó que había un elemento crucial en la historia que se había perdido.

Frigga y Odín se habían retirado con mucho tacto tan pronto como apareció el alcohol, reconociendo que era un momento de hermanos.

—Entonces... entonces, dije...

—Thor, estoy seguro de que tus amigos son en absoluto encantadores, pero, puedes ser mi hermano por un momento, por favor —Loki tuvo cuidado de enunciar sus palabras con claridad, ya que podía sentir que estaba lo bastante borracho como para empezar a arrastrar las palabras.

—Bien... seré tu hermano. Puedo hacerlo. Ya verás.

Thor siendo Thor ya estaba ebrio. Por desgracia, también era un borracho muy alegre.

Loki inclinó la cabeza hacia atrás y tomó otro trago. Se arrepentiría de esto en la mañana, pero solo por ahora, bebería hasta el olvido. Había pasado dos años sin emborracharse con su hermano. Mañana tendría mucho tiempo para jugar al bromista. Después de todo, estaba seguro de que Sif casi lo había olvidado. Fandral y Hogun también. De hecho, de seguro todos, excepto sus padres, lo habían olvidado, así que tendría que recordárselos.

Por desgracia para él, su risa oscura salió como una risita de borracho. Fue muy vergonzoso, incluso cuando Thor se rio de él.

[***]

De vuelta en Midgard, Torre Stark

—Mamá.

—¿Si, Jade? —Natasha esperaba que su hija no estuviera demasiado traumatizada por el Bifröst, ya que hace poco había sido bastante pegajosa y tímida.

—¿Por qué nadie no se dio cuenta de que el señor Loki estaba siendo controdado mentalvente... cantrolado mentalente... controlalo mentalgente... no estaba despierto?

Por supuesto, Natasha no se rio de los problemas de pronunciación de su hija. Aunque era adorable. Debería usar el pensadero para enseñárselo a Siri... ¿cuándo empezó a llamarlo Siri? Ignoró el pensamiento y le prestó mucha atención a la pregunta de su hija.

—Bueno... ellos son de una cultura muy diferente... no están acostumbrados al control mental. Nos tomó a ambas culturas darnos cuenta.

Natasha sintió que había algo más en la pregunta de su hija.

—¿No lo amaban, mamá?

Y allí estaba. Sin duda. Su pequeña joya había sido descuidada y abandonada toda su vida. No era sorprendente que ella considerara que también sucediera en otras familias. Sí existía, pero para que una niña tan pequeña lo considerara como la primera respuesta a por qué no se dieron cuenta...

—Sí lo amaban, cariño. Solo que son muy... directos.

Esta era sin duda una de las preguntas más difíciles que Jade le había hecho.

—Querían hacer lo mejor para él, ayudarlo a darse cuenta de las consecuencias de sus acciones, por lo que lo mandaron a la esquina de los adultos. Lo cual lo habría ayudado mucho si no hubiera sido controlado mentalmente sin que nadie supiera.

¿En serio lo habría ayudado?

—Pero ahora que lo saben, están haciendo todo lo posible para ayudarlo. ¿Entendiste, cariño?

Jade asintió y luego salió corriendo a buscar a Bruce para su clase de ciencias.

Que Jade prefiriera al profesor gentil y de voz suave que a él para sus clases de ciencia ofendía a Tony. Oh, Tony era un gran amigo. ¿Pero un profesor? No tanto. Mucho menos para una niña tan dañada como Jade. Él lo sabía, Natasha lo sabía, pero solo estaba molesto porque Bruce era mejor que él en algo.

Natasha volvió al informe de la misión que estaba archivando y trabajó de manera constante durante bastante tiempo.