Capítulo 11

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Chisato: nos vemos.

Tenía en mente seguir su rutina al despedirse de sus amigas y compañeras de trabajo. Ansiaba tomar un trago por parte de su esposo luego de llegar a su apartamento, más llenar su estómago con comida.

Koharu: Jefa -llamó a la mujer rubia que paro su caminata y giro a ver su sonrisa, junto a la compañía de Yui Shiraishi aún lado suyo- ¿vamos a tomar un trago? -preguntó con una sonrisa sin malas intenciones-.

Rápidamente se alteró, formando un color rojo en sus mejillas que resaltaban mucho en su piel blanca. Negó con las manos las palabras de su compañera algo nerviosa.

Chisato: no puedo...

Koharu: conozco un lugar de bebidas sin alcohol y son muy buenas -dijo velozmente para interrumpir el intento de negación de su jefa- además, es camarero es muy buena persona.

Chisato: c-creo que iré -dijo rendida al ver como los ojos de la castaña ganaba estrellas y aumentaba su actitud naturalmente feliz y tranquila al aceptar el salir con ellas-.

Shiraishi sonrió de lado al ver que su amiga logró convencerla.

Koharu: ¡lo logré!.

Time skipe

Koharu: ¡ya llegamos! -cómo si se tratara de un espectáculo presentó el lugar del cual habló en el camino-.

Chisato se impresionó al ver claramente que el lugar era donde su vida cambió radicalmente. Tenía un tinte rojo en sus mejillas al recordar al hombre que actualmente era su esposo en el tiempo pasado, el tiempo donde ni siquiera eran pareja.

Chisato: este sitio es...

Arriba había un letrero con letras negras y decorado con colores anaranjados, como 9 colas de un hermoso animal de naturaleza feroz. Idea que salió de Naruto, cosa que le dijo luego de que le preguntara por curiosidad que significaba esa decoración hace mucho tiempo.

La mujer de cabello negro y ojos rojos volteo a verla. Su expresión era claramente una señal de sorpresa y nostalgia.

Shiraishi: Chisato, ¿conoces el lugar?.

Chisato: si, y muy bien -se acercó a tomar un agradable recuerdo al acariciar el letrero-.

Koharu: hola, señor -dijo al abrir la puerta del bar, sin notar que el hombre mayor de cabello blanco no era quien atendía-.

Naruto: bienvenidas.

La sorpresa no sólo venía por parte de la mujer rubia, era por parte de las otras 2 que se asomaron para ver a la otra persona con el cabello rubio. Lo reconocieron como el esposo de su acompañante en cuestión de nada.

Koharu: es su esposo, jefa.

Chisato: ¿que haces aquí? -pregunto realmente interesada en una respuesta-.

Naruto: el destino me llamó y me dijo que me encontraría con el amor de mi vida aquí -dijo con una sonrisa que adornaba bien en su rostro. El sonrojo de su esposa se expandió notablemente al recibir un cumplido delante de las otras chicas- o eso me gustaría decir -dijo de mal humor en no recibir la señal divina, igual estaba aquí y eso haría que trabajar no sería una carga pesada- el camarero de siempre me pido que lo cubriera debido a un asunto que tenía. Hoy estoy a cargo del local -le guiño a su esposa que parecía más apenada por su actitud coqueta- en especial a ti, Chi-chan.

Koharu: es una sorpresa -dijo mientras no notaba el ambiente de la pareja. Era raro ver públicamente un hombre que le diera muestras de afecto a su esposa delante de otras personas, ya que eso sólo se hacía en la intimidad de los mismos- que una pensé que estaría...

Mientras las chicas hablaban con el esposo de su jefa, esta se perdió en sus recuerdos al ver el rostro atractivo de su pareja. Era maduro y bello, siempre manteniendo su toque de juventud.

Como cuando lo conoció. Los años parecían no quitarle su toque característico.

Flashback

Ella caminaba acariciando con un dedo el peluche pequeño con forma de limón, teniendo brazos delgados y piernas del mismo largo. Tenía una enorme sonrisa con ojos grandes y también se podía usar de llavero, en su caso lo usaba más para relajarse al acariciar la tela suave y esponjosa.

Su momento de paz se arruinó al caer al duro suelo. Su portafolio en forma de cartera se abrió durante su caída, los papeles salieron volando en diferentes lugares pero no lo suficientemente lejos para perder uno. Se levantó rápidamente y con algo de vergüenza camino rápidamente a su trabajo.

Se escucho un grito en su dirección que no escucho al doblar en una esquina.

Su día no pudo ser peor.

En su mayoría se basó en un cúmulo de estrés. Primero disculpándose por teléfono con uno de sus clientes. Después fue lo mismo solo que físicamente con un compañero de la empresa con un problema de distribución. Lo pero fue en una reunión importante al derramar té sobre unos papeles, por fortuna no llegó a más al estar en presencia de un hombre que no le dio importancia.

Ya en la noche camino a su casa sin ningún consuelo. Al intentar usar el peluche blando de limón descubrió que lo había perdido, no lo encontró por ningún lado de su traje negro formal de trabajo y portafolio.

El cielo le regalo de mala manera agua en forma de lluvia. Hoy no era su día en lo absoluto.

Se movió hasta quedar abajo de un edificio pequeño que la cubría de la lluvia. Esperaría que no dudará mucho porque no tenía paraguas y no quería enfermarse.

El timbre sonó a la puerta abrirse, la que tenía a escasos centímetros. Atrajo su atención comúnmente como cualquier otro sonido.

Un hombre rubio con 3 marcas de lo que parecía un gato en cada mejilla y ella, con lentes que dejaban ver sus ojos azules a través del cristal, se vieron inmediatamente.

Naruto: oh, bienvenida -le dio una pequeña sonrisa amigable a la linda mujer de ojos azules que mostraban señales de estar nerviosa- hoy no está el cantinero pero la atenderé con gusto.

Chisato: s-solo espero que deje de llover -por alguna razón se puso nerviosa ante los ojos del hombre delante de ella. Como si la hubiera encontrado haciendo algo malo-.

Naruto: ohh -después de ver el rostro con un pequeño rubor de la mujer se percató de algo- ¿esto es tuyo? -de su bolsillo sacó el peluche que encontró luego de ver como al mujer se levantaba del suelo-.

Los ojos zafiro de la mujer brillaron con una felicidad enorme, algo de su estado de ánimo al apretar el blando peluche regresó a su ser entero. Después de un largo día esto era lo único bueno.

Chisato: pero, ¿por qué? -el rubio levantó una ceja confundido al escuchar su pregunta-.

Naruto: me pareció que era tuyo después de verlo en la mañana. Pensé que sería bueno devolvérselo -explicó de forma obvia al ser algo que no le pertenece-.

Chisato: gracias -dio una reverencia como agradecimiento-.

Naruto: no te preocupes. No fue nada.

Chisato: esto... -estrujo el peluche con sus dedos- me tranquiliza.

Naruto se preocupo mucho al ver como lágrimas salían de la linda mujer. No necesitaba escuchar su tono de voz apagado al mencionar algo más que le gustara para notar que estaba con un estado de ánimo pésimo.

Naruto: hey, tranquila -dio un paso más para estar cerca de ella. La mujer levantó la cabeza aún con las lágrimas recorriendo sus mejillas-.

Aquel hombre le dio una sonrisa y le ofreció una de sus manos para que la acompañará. Tímidamente la aceptó al no percibir malas intenciones de su parte. Verlo con esa sonrisa en sus labios casi la contagio para imitarlo sin razones fundamentadas.

Naruto: ¿que te parece un trago?.

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.-×-.

Fin.
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Chau.🖖

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⏰ Última actualización: May 08, 2022 ⏰

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Naruto Osake wa Fuufu ni Natte KaraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora