Te Reconquistare con un Ramito de Narcisos

Capítulo 16 Seré Tuya el Resto de mis Días

Un mes después, llegaban a su casa nueva

-Por fin en casa  -dijo el castaño dirigiéndose a la nevera y sacando una botella de Champagne, tomo dos copas, abrió la botella y sirvió la bebida espumosa, le dio una a Candy y esta a su vez se la bebió de un sorbo

-¡Ey! pecosa tranquila, esto no es refresco y se te puede subir  -Candy le dio su copa y el castaño le volvió a servir, de nuevo al pecosa de un sorbo se la termino, de repente Candy lanzo una carcajada y Terry la ve incrédulo

-¡Ay no! ya se te subió  -dijo el castaño un tanto divertido, pues al ver los gestos de la pecosa que eran muy graciosos.  Candy se le acerca y le dice

-No, mi amorsh, estoy bien  hip  -Candy empezó a hipear y Terry no aguantaba la risa

-Pecosa, si andas tomada, mirate como estas    -Que no ando borracha, estoy bien, mirrame -Candy se reía de todo, de repente Candy quiso caminar y se enredo en su vestido y quedo al descubierto sus senos

-¡Ups! me caí   -el castaño corrió a levantarla y no pudo evitar ver sus hermosos senos, Candy lo toma por la cara y le dice

-Hazme tuia mi amorsh, quiero ser tuia  

-No pecosa, se dice tuya    -lo que sea tuia o tuia, pero eso quiero   -Terry al verla que no le paso nada, sonrió

El castaño la levanta, se veía hermosa con ese vestido rojo a punto de caer, su cabello suelto y su espalda desnuda, que ya no pudo controlarse

-Pecosa andas borracha, pero se que lo que me pides lo deseas tanto tu como yo, y esto no significa que vaya a abusar de ti

-Mi amorsh, ya callate y hazme tuia  -Terry lanzo una carcajada

-Ay pecosa, mañana que te cuente no me lo vas a creer  -el castaño la tomo en sus brazos y poco apoco fue bajando el vestido, hasta dejarla desnuda,  la recostó en el suelo, ya no tuvo tiempo de llevarla a la cama y ahí la hizo suya una vez mas, se veía hermosa con su cabello esparcido en el suelo, parecía toda una diosa, terminaron de hacer el amor y la pecosa toma una silla que estaba en el taburete y se sube en ella, empezó a bailar, Terry todo asustado, tenía miedo que se cayera

-Pecosa te vas a caer  -Candy reía y se movía muy sensual

-Dios mío, esta pecosa me va a matar de un infarto  -de repente Candy en uno de sus bailes no piso bien y se cae, el castaño no supo ni como pero ya la tenía sobre el

-¡Hola mi amor!  -dice la rubia riendo

-Pecosa ya no sigas, sabes, mejor yo te bailo  -Terry la sentó en la silla y empezó su baile, la pecosa empezó a gritar

-Muchia ropa, muchia ropa  -el castaño lanzo una carcajada y dijo

-¡Mucha ropa! pues ni traigo, hasta eso por como anda no ve que estoy desnudo, si no ya se hubiera sonrojado   - le empezó a bailar muy sensual, Candy lo quiso tocar y el no se dejo, así estuvo por un rato

-Anda Terry ya deja que te toque, porque me haces sufrir  -Terry riendo se le acerca y de repente la rubia como si fuera un tigre se lanza sobre el y lo tumba y caen al suelo

-¡Te atrape!  -dice la rubia riendo

-Si pecosa soy todo tuyo  -al escuchar eso y sentir el cuerpo de Terry desnudo, Candy sintió algo extraño y hasta la borrachera se le paso

-¡Terry!  -gimió la rubia   -si dime pecosa   -dijo el castaño sin despegar los labios, la rubia ya no dijo nada y el castaño siguió besando su cuerpo

-Pecosa, ya se te paso la borrachera  -la rubia solo sonrío pero no dijo nada, estaba tan excitada que no quiso hablar, volvieron a hacer el amor hasta que quedaron sin fuerzas, pues toda la noche se amaron

A la mañana siguiente, el castaño se despierta y ve que su pecosa no esta y se asusta, la busca en el baño y no esta, en el balcón y tampoco esta ahí, el castaño ya asustado comienza a gritar

-¡CANDICE!   -de repente una vocecita se escucha a lo lejos

-Aquí estoy baja   -Terry solo rodó los ojos, al bajar la pecosa estaba muy cómoda en el sofá comiendo chocolates

-¿Y esos chocolates?

-Mira mi amor, me llegaron junto con un ramo de narcisos, ¿Quien habrá sido?  Candy lo veía divertida

-La tarjeta dice : para mi dulce pecosa  De su amor secreto  -el castaño esboza una sonrisa

-Mi vida, seguirás con la tradición de nuestros tíos   -Terry esbozo una sonrisa

-¡Anda Terry! se que eres tu ¿verdad?  -el castaño esbozo una sonrisa

-Si pecosa soy yo, cada día tratare de reconquistarte con un ramo de narcisos

-Lo sabía, sabía que eras tu  mi amor secreto, te amo Terence  -Candy lo besa, el castaño le quita los chocolates la carga y se la lleva a la habitación

-¡Terry, que haces!

-Señora Grandchester, de aquí no sale hasta que me ruegue que deje de hacerle el amor  -la pecosa le responde

-Mmm, pues no saldré nunca  -La rubia rodea con sus brazos el cuello del castaño y lo besa

-Te amo Richard Terence Granchester       -Y yo a usted Señora Pecas

Esa noche hicieron el amor como cada noche y Terry cumplió su palabra de reconquistarla todos los días con un ramito de narcisos .

Fin

Créditos a la carita de Candy
Go Eun San
Edición Noelia Graham

chicas llegue al final de este mini fic, espero y les haya gustado

el Epílogo sera la próxima semana si dios quiere, nos leemos el próximo jueves, cuídense

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