| Haces Mi Corazón Latir | Kyojuro Rengoku

Trabajo.

—creo que debería irme, muchas gracias por el Té Elle—Kyojuro se levantó y extendió la taza a la chica.

—te gustó?—

—así es, muchas gracias—

—bueno, gracias a ti por acompañarme hasta aquí—

Elle se levantó y tomó las calcetas del chico ya estaban secas y calientes, se volteo a ver al chico quien estaba sentado en el piso desatando sus zapatos.

Elle se puso de cuclillas a un lado de él y le estrago el par. Kyojuro sonrió tomándolas y después se las puso, rápidamente se puso sus zapatos y se levantó. Bajo su mirada a la chica que aun estaba en cuclillas al parecer no dejaba de ver sus zapatos. Sonrió y movió sus manos para sacar del trance a la chica.

—Que tengas una linda Noche Elle—

—Oh!—Rápidamente se levantó quedando un poco más alta—lo siento... Soy distraída—

—tranquila, descansa y hasta luego!—

Rengoku terminó de atar sus zapatos y abrió la puerta, después se puso su capa y salió corriendo de la casa.

Elle lo miró perderse entre la calle.
Cerro de nuevo la puerta y se recargo en ella.

Podría decir que había quedado encantada con el.
Era tan atractivo físicamente, amable, sonriente y pasifico.

Sonrió de nuevo viendo la capa que le había prestado, tenía la imagen una flama de fuego bordada a mano.
La puso a secar pues estaba casi empapada.

Después apago la chimenea y se puso su camisón para dormir. La lluvia al menos se había calmado así que podría dormir tranquila.

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—buenos días chicas—

—buenos días Elle—las cuatro saludaron al unison.

—en que ayudó?—preguntó poniendose su mandil y atando su cabello.

—pica el pimiento por favor—

Aoi ordenó apuntando los pimientos con su cuchillo y despues se siguió con su tarea.

—necesito que vayan a arreglar todo para le entrenamiento de Tanjiro, Zenitsu e Inosuke—Aoi de nuevo ordeno—solo que coman y comenzaremos—

Las tres chicas acientieron y salieron de la cocina.
Aoi y Elle comenzaron a cocinar silenciosamente, ya que Aoi no era mucho de platicar.

—esta listo, gracias Elle—

Se limpio sus manos y se quito su mandil. Comenzó a limpiar los muebles de la sala, después aspiró las alfombras y por último limpio los pisos.

Después miró como Aoi llevaba una charola con comida, rápidamente se levantó a ayudarla y llevo la segunda. Entró con ella en manos y se la entrego a Zenitsu.

—muchas gracias linda Elle—El rubio tomo la charola.

—como van tus brazos y piernas?—

—bien! El medicamento que me dio la  señorita Kocho me esta funcionando... Poco a poco regresan a la normalidad—

—eso es bueno Zenitsu! Ahora comienza a comer que su entrenamiento será esta tarde, o bueno... Solo el de Inosuke y Tanjiro, tu debes de regresar a la normalidad—

—así es, Zenitsu no podrá entrar al entrenamiento hasta que sus extremidades regresen a la normalidad—Aoi mencionó dándole la charola a Inosuke—y no manches las sábanas! La última vez tuve que tallas de unas una porque dereamasye salsa de tomate!!—