| Haces Mi Corazón Latir | Kyojuro Rengoku

Maestro

Cuatro horas después de la cirugía de Kyojuro al parecer todo había salido bien, pues había perdido mucha sangre y eso había traído con sigo anemia.

Los pasajeros del tren habían sido atendidos por el grupo de exterminio y había sido alimentados.

Kyojuro se encontraba en recuperación con ayuda de un respirador y estaba completamente vendado.

—salió bien...estén tranquilos—Kocho quitó sus guantes después de aplicar una inyección en el brazo al rubio.

Estaba completamente dormido y sedado.

—Eso es bueno....mi conciencia no estaría tranquila sabiendo que el señor Rengoku hubiera muerto—Kamado mencionó en un susurro.

—tranquilo Tanjiro él está bien....solo perdió su ojo....no pude salvarlo y esta muy débil...tal vez lo más conveniente después de esto será su retiro—

—¿retiró?—Tanjiro preguntó—¿Retiró total?—

—así es....retiro total, su cuerpo no será el mismo—

Tanjiro miró a Kyojuro, tenía una respiración tan lenta que apenas y se notaba.

—Shinobu—

La voz de Mitsuri se escuchó entrando a la carpa donde habían llevado a cabo la cirugía del pilar de la llama.

—¿Mitsuri? ¿Qué haces aquí?—

—me enteré de lo sucedido, cuando el cuervo de Rengoku avisó lo sucedido me encontraba en la finca del patrón...escuché todo y al intante pensé en venir—

—Estamos a dos dias de aya a aquí—Tanjiro hizo cuentas, la distancia que había recorrido el tren durante la noche de la pelea había sido larga.

—nada que yo no hubiera recorrido en ocho horas—

Mitsuri sonrió y abrazó a Tanjiro, estaba tan feliz que todos estuvieran bien y nadie hubiera muerto.
Al intante Tanjiro se sonrojó hasta la coronilla al sentir los pechos de la chica en sus mejillas.

—están bien....necesita mucho tiempo de reposo y descanso total—

—entiendo—Mitsuri fue separándose de Tanjiro mirando a Kocho.

Tanjiro cayó desmayado de los nervios de tal abrazó con la pelirosa de puntas verdes.

~

—me escape de papá....¿hay alguna noticia de mi hermano?—

Senjuro llegó agitado al punto de tener sus mejillas rojas, al parecer había corrido desde la finca Rengoku hasta la finca mariposa.

—Senjuro! ¿Estas bien?—

—¿sabes algo de....de mi hermano?—

El pobre Senjuro estaba muy agotado que hasta le faltaba el aire para hablar.

—si....está bien Senjuro, kyojuro está muy bien—

Quiso omitir el tema de su cirugía, sería después.

—gracias al cielo....mi hermano está bien—

Elle se acercó al chico y llevó una toalla para secar su cabello y abrazarlo con ella.

—está lloviendo muy fuerte y tú corriste hasta acá—Elle se abrazo a Senjuro después de retirar la toalla de su cuerpo.

—joven Rengoku—Sumí, Kiyo, Naho hicieron una pequeña reverencia al ver al chico.

—buenas noches señoritas— el chico sonrojado también reverenció a ellas.

—chicas pueden prepara un té Senjuro se quedará un rato en lo que lo acompañó a su casa—

—claro Elley—

Las tres pequeñas se fueron a la cocina a preparar rápido unas galletas y chocolate con leche a parte del té..

—Senjuro si tu padre sabe que te escapaste....se molestara mucho—

—no me importa...el cuervo de la señorita Mitsuri me llegó diciéndome lo ocurrido—

Mitsuri? Ella como sabe lo que paso?

—¿porque Mitsuri?—

—ohhh ella está con mi hermano, al igual que la señorita Shinobu y los chicos—

Mitsuri estaba con Rengoku y ella estaba en la finca....

¿Como es que había llegado tan rápido para aya?

—entiendo...vayamos a tomar el té mientras te calientas un poco—

Elle se acercó a Senjuro y caminó junto a él hasta la cocina donde los recibieron con unas deliciosas galletas hechas por Aoi.

~

Al día siguiente todos estaba fuera de la carpa donde había pasado la noche Kiojuro, había estado vigilado por varios del exterminio junto a Mitsuri y Shinobu.

—¿como es que despertó?—Mitsuri se acercó cuando Kocho salió de la carpa.

—está bien...la herida está bien cerrada, pero la anestesia aún no pasa....creo que su cuerpo estaba de más agotado, tal vez dure unas horas más si no es que el día completo—

—¿crees que pueda pasar a verlo?—

—claro adelante—

Mitsuri dejo la catana afuera de la carpa y la mochila que llevaba en su espalda para adentrarse.

Olía tremendamente a alcohol y el sonido del monitor de signos vitales sonaba cada 15 segundos.

—Kiojuro....—apenas susurro cuando lo miró en la cama, sus brazos estaban todos lastimados, su ojo vendado y varios rasguños en su rostro.

Tenía vendado todo el pecho y contaba con una manta de la cintura para abajo.

Estaba muy lastimado.

Se acercó a tomar su mano y la tomó.

—Kiojuro....tienes que despertar, todos te esperamos y te queremos ver sano y fuerte, mirar esa sonrisa que siempre nos regalas, el mundo no está preparado para que un ser tan increíble como tu, lo abandone—

Sus ojos se llenaron de lágrimas, su maestro estaba entre la vida y la muerte.

~

—buenos días Senjuro, quieres que te acompañe a tu casa?—

—no, no Elle...mi papá debe de estar muy molesto y no puedo permitir que te grite o te golpe—

—crees que me dejaría? No sabe con quien trata Senjuro—

Sonrió mirando al pequeño chico mientras embozaba una sonrisa.

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