My Parasyte guardian

Prologo: Parásitos

En la Tierra, alguien tuvo un pensamiento repentino.

"La vida debe ser protegida"

Contrapuesto a ese pensamiento, yo ponía un pie delante de otro mas no podía mantenerme recta verticalmente, en el espacio pequeño de una viga donde me tambaleó sin cesar...

Yo...ya no quería seguir viviendo. Ya no más.

¿Por qué?

Múltiples razones. 

Una de ellas era...que ya no tenia a nadie más a quien aferrarme en el mundo.

Fui la única sobreviviente al accidente que me dejo huérfana... 

No lo tolerar esa horrible verdad debe ser la respuesta normal al principio, ¿no? 

Luego secas tus lagrimas, tomas valor y reconoces que tu vida depende de ti misma y te pones de pie para seguir viviendo, ¿no? 

"Re-hacer tu vida", es la respuesta lógica, pero ¿Qué pasa si no quieres eso?

Si, así es. De hecho yo aborrecía la idea de estar viva... y prefería desperdiciar lo que me quedaba de vida. Así de cobarde soy, no me queda nada... No quiero nada. Solo morir y tal vez... volver a ver a mi familia. 

Llego al final de la viga, en esta construcción a medio hacer estoy en piso 20. Doy un último vistazo al Sol agonizante, vi ese crepúsculo caer por ultima vez según yo. 

La brisa continuó golpeando mi rostro, tentando a la suerte de que yo tal vez... me arrepienta.

Pero la decisión, esta tomada para mi. Este es solo el epitafio alargado en provecho mío.  

Cierro los ojos. Un paso, tal solo un paso para volverlos a ver...

¡No lo hagas!

No le hago caso y doy él último paso, arrojando mí cuerpo al vacío. Pero aquel pequeño ser, un parásito que había caído desde el mismo cielo.... Aterrizo, en la cercanía de la construcción en la que planee quitarme la vida. 

Se abalanza sobre mí al verme en peligro. En un salto precipitado, va a introducirse en mi mano. Manipulando su forma, en una masa irregular y luego buscando la proximidad de una viga. 

Enrollando y enredando la forma de mi mano que ahora volvió su cuerpo. Va sosteniendo todo mi masa corpórea hasta dejarme con suavidad en el suelo. 

Yo continuó inconsistente en todo el proceso, descanso sobre el asalto con la vista cerrada hacia arriba. Sin saber que aquel Parásito me había salvado la vida, a pesar de que su meta principal fuera... Matarme. 

Asesinarme al devorar mí cerebro, manipularme a su antojo y NO, tener un huésped del que depender.

• ────── ✾ ────── •

.[Unas horas transcurren].

Despierta...

Llama una voz, pero tras la acción brusca que me había dejado inconsciente y dormida a penas y lograba escuchar sus murmullos, a unos cuantos centímetros de mi rostro. 

¡Oye! ¡Despierta rápido, Humana!

El reclamo autoritario y similar al de una madre regañándome, me saca de mi sueño y comienzo a despertar con flojera. Si quiera articulada una o varias de mis facciones para reaccionar.

—Mmmh -murmuró al sobarme un ojo con la mano derecha. Aunque distinguía a una sombra difusa contra mi rostro, de un lado.

Deprisa, Humana. No tenemos tiempo...

Abro los ojos entonces encontrándome con una figura extraña.  Una boca, varios ojos en el lugar que tenían que estar él dedo anular e índice. Básicamente ese monstruo era o provenía de.. de ¡mi mano!

— ¡Ahh! -grito horrorizada al encontrarlo junto a mi

Retrocedo espantada, apegando parte de mi espalda contra el poste. Pataleando varias veces, tratando de que esa cosa se salga de mí.

— ¡Un Monstruo! ... Un.... -pronuncio rechinando parte de mis dientes.

Haga lo que haga esa cosa, sigue mirándome... Y yo no puedo apartar la mirada, por temor, temor de que me atacará.

No.

Me contradice con naturaleza fría y distante pero extrañamente más serena y madura de lo que yo me yo jamás seria... ¿es una voz desconocida saliendo de mí misma mano?

Yo soy un órgano qué se aprovecha de otro, 

Parasitando el cuerpo para poder sobrevivir...

Aquél ojo en la cara de mi mano, va pestañeando un par de veces. Haciendo una charla. Enfocando más su visión para detectar cualquier indicio de amenaza en mi rostro.

Parásito. Es una conclusión mucho más acertada

Me corrige con tanta autoridad. Como si supiera qué no seria capaz de contradecirle. 

Pero había dicho ¡Parásito!

Me voy poniendo de pie, algo confusa.

....Era de esos parásitos, de los que devoraban el cerebro de los seres humanos. 

De esos... Parásitos de los que se tenia que extraer a un cabello de la cabeza, de una persona pata estar segura que no eran... unos monstruos. 

Esos que busca la policía por los homicidios más atroces, desmembramientos, canibalismo y despedazamiento de seres humanos.

Las pupilas de mis iris se dilatan viéndolo con miedo. 

Esta cosa era un Parásito...sin duda.

Lo que tenia ahora en mi mano, era un Parásito.

Soy un Parásito... -me vuelve a hablar-...y tu también...

—¿Yo? -balbuceó algo perdida, encontrado mí voz otra vez —¿Pa-parasyte?

¿Qué significaba eso? ¿Seria un monstruo ahora? 

...Convertirme en una bestia devora humanos, era el castigo qué había recibido por querer acabar con mi vida... 

Parecía que si, esa era la respuesta para mi del universo mismo o de dios, pero...

 ....La pregunta más importante, aquí y ahora era...

¿Podría Siquiera confiar en el Parásito que ahora habitaba en mí mano izquierda?