capítulo veintidós.

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Cuando la mañana llegó, Felix fue el primero en despertarse. No había logrado dormir mucho, casi nada en realidad. Su noche fue agotadora y triste, ni siquiera pudo cerrar los ojos sin que las imagines de Bang Chan y él besándose llegaran a su mente.

Él se lo había dicho aquel día. Nadie tenía que enterarse de su beso.

Además, eso ya no era importante para él.

Caminó tranquilamente por la recepción del hotel. No sabía nada de Bang Chan desde ayer en la noche, ni siquiera había visto a YeonJun y NamJoon era el único que accedió en echarle una mano a Bang Chan. Por lo tanto, ahora él era el único solo, además de sus hijos.

No faltaba mucho tiempo para que se fueran, solamente estaba esperando la hora. Tampoco quería encontrarse con el omega porque entonces él le diría algo acerca de la boda, y Felix no sabría como mentir para no ir.

Pero al parecer sus planes se arruinaron, cuando a la mitad de su camino se encontró con YeonJun.

—¡Felix! ah, que bueno que te encuentro, había estado buscándote desde hace rato—YeonJun dijo, obligando así a que el otro omega sonriera falsamente.

—¿En serio? Lo siento, es que... estuve dando vueltas y yo, sólo estaba algo distraído, ¿en qué puedo ayudarte?— le preguntó.

—Felix, yo necesitaba verte para hablar contigo sobre Bang Chan— le dijo, el omega suspiró profundamente, sabía que evitar eso no haría ninguna diferencia, tal vez solamente necesitaba dejarlo ir.

—Ah, si, si. ¿Qué sucede?— volvió a preguntar.

—Sé que Bang Chan y tú han estado juntos durante muchos años— habló, dándole una sutil sonrisa pero con algo de nervios —, en este poco tiempo he visto la manera tan única en la que se llevan, se complementan muy bien... el caso es que, Felix. ¿Realmente tú ya no sientes algo por Bang Chan?

—¿Sentir algo por él?— repitió su pregunta, soltó una ligera risita y negó lentamente —. YeonJun, Bang Chan es feliz contigo, creó que eso es todo lo que debe de importar, mi relación con él ya no es nada, es como si nunca hubiera existido.

Y estaba siendo sincero, porque realmente nunca había existido alguna clase de relación entre ellos dos. No al menos una amorosa, o tal vez la había pero ellos nunca fueron capaces de asimilar que era algo más que amistad.

Su cariño, la manera en la que solían llevarse, compartiendo risas y bromas, a veces malos tratos y otras veces pláticas largas durante la noche. Eso era lo que hacía especial su amor, porque nunca necesitaron fingir delante de ellos, siempre fueron sinceros, sin mentiras. Felix se reía de las desgracias de Bang Chan y Bang Chan de las de Felix.

Tal vez esa fue la primer razón por la que realmente nunca dejaron de sentirse atraídos, porque en el fondo se habían conocido como su verdadero ser.

—Entonces... ¿realmente esto está bien para ti?

No, no lo está.

—Sí, solamente deseo que sean felices.

YeonJun no podía adivinar ni ver a través de sus sentimientos, él no sabía lo que realmente estaba pasando. Y se creyó las palabras del pelirrosa, creyó que todo estaría bien si solamente Bang Chan y él se amaban.

YeonJun se despidió de él y Felix inmediatamente recurrió a correr como tonto, alejándose de aquel lugar. Ahora mismo le apetecía alcoholizarse hasta perder la razón, necesitaba eso en su organismo para dejar de pensar en su mala suerte en el amor.

Se sentó sobre el banco en un bar, la barra estaba vacía y había pocas personas ese día. No le había preguntado nada a Bang Chan sobre su compromiso, pero hoy cuando vio a YeonJun vestido no tan elegante pero si muy atractivo, supuso que lo harían ahí y ahora.

¡no es mi alfa! › chanlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora