Madre - Izana Kurokawa y Lectora

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-"Disfrutaron la película mis pequeños?" preguntaste en una sonrisa saliendo del cine, con ambos tomando tus manos

-"Si! Estuvo increíble!" Izana respondió

-"Me gustó mucho!" Kakucho agregó y tocó su pancita "Mamá, vamos a cenar algo ahora?"

-"Así es mis niños, vamos a comer algo a un restaurante~ les parece bien?"

Ese día estaban celebrando que los pequeños habían pasado de año, como todos los años hacían, cada cosa que te parecía que había que celebrar, lo hacías.

Los llevabas a algún parque de diversiones o acuático cuando habían, al zoológico, algún acuario, a ver películas, obras de teatro, a algún comediante, a algún arcade, feria, etc, y al final cenaban algo en algún lugar fuera de casa, o dónde ellos preferían.

Fueron directamente a un resturante que conocían y a los niños les encanta la comida de aquel sitio, cenaron con tranquilidad, había sido un día maravilloso.

Hasta que...

-"(T/n), tenemos que hablar"

Otra vez esa voz.

-"Niños... Suban al auto" dijiste suave

Los dos te quedaron mirando y te hicieron caso enseguida, incluso cerraron la puerta con seguro desde dentro.

-"Ya basta con esto, sólo haces las cosas peores!" le dijiste "Qué más quieres?! Te he dado oportunidades! Pero siempre arruinas todo! Fuiste a prisión y no por mi culpa! Tú solo eres él que se mete en problemas! No estás capacitado para ver a tu hijo! Ni siquiera realmente te interesa! Solo quieres manipularme de alguna manera como siempre lo hiciste! Ya estoy harta! No quiero verte más! Ni siquiera deberíamos estar hablando! Tienes una orden de alejamiento! Y no es la primera vez que la violas!"

-"Oh? Ahora eres muy valiente para decirme todas esas cosas, eh? Por qué no entiendes?! Solo quiero estar con ustedes!"

-"No! No quieres eso! Quieres tener a alguien a quien poder controlar! Solo lárgate! Quiero acabar bien este día!"

Estabas a punto de entrar a tu auto cuando él tomó tu brazo con fuerza.

-"Ni se te ocurra, no te me vas a volver a escapar"

-"No! Suéltame!"

Te quejaste y empezaste a forcejear contra él, unos chicos vieron la situación y fueron a ayudarte a separarte de aquel sujeto.

Pero algo ocurrió.

-"Te dije que me sueltes!" dijiste de golpe colocando tu pie en su estómago y empujándolo con todas tus fuerzas a la vez que quienes te ayudaban te jalaron para separarte del tipo

En ese instante ese hombre cayó en el asfalto, y cuando estaba a punto de levantarse para ir contra ti, un camión de carga lo pasó por encima.

Todos se quedaron impactados ante aquel suceso, volteaste a ver preocupada a tus niños en el auto.

Izana miraba atento la situación, mientras abrazaba a Kakucho y le cubría los ojos, se los había cubierto para que no tuviera que ver la pelea, así que el menor no tuvo que ver nada al respecto.

Agradeciste a los dos muchachos que te ayudaron, uno de cabellos blancos y otro bastante alto de tez morena.

Ellos fueron tus testigos cuando la policía llegó, por lo que no tuviste mayores problemas.

-"Vamos a dormir juntos hoy, si?" dijiste una vez llegaron a su casa

-"Mamá... El hombre malo va a volver?" Kakucho preguntó

Ni siquiera él lo consideraba su padre, solo un hombre que te molestaba.

-"No... Ya no va a molestar más... La policía se llevó al hombre malo lejos, y no lo vamos a ver más"

No podías decirle a esta edad que ese tipo había muerto.

Pero Izana lo sabía.

Vio como el camión lo pasó por encima, y cada una de las ruedas de este le rompió cada hueso de su cuerpo.

Pero no sentía nada al respecto, solo alivio de que se haya ido para siempre.

Te recostaste en la cama, con los dos niños a tu lado, abrazandose entre ustedes.

-"Las cosas malas a veces ocurren por algo..." mencionaste "Si esto hoy no hubiera ocurrido... Quizás más adelante ibamos a tener problemas con ese tipo malo... Pero ahora, ya nos va a dejar en paz" dijiste suave besando la frente de ambos "Descansen mis amores, de lo merecen"