1. Buenos días alegría

2.9K 292 84
                                    

Historia dedicada a la preciosa SeisaAltin, gracias por soportar tanto drama, mal humor y tonterías. ¡Te adoro! <3

˖˖˖🖇·˚˖˖˖🖇·˚

¡Un adorable 2x1!

Jiang Cheng suspiró soñadoramente y le dio un distraído sorbo al vaso de cappuccino de caramelo con crema entre sus manos, ignorando olímpicamente los papeles regados en la mesa como si estos no existieran. La tenue música de la pequeña cafetería y las voces de los otros clientes eran un eco vacío a sus oídos, toda su atención centrada completamente en el hermoso hombre al otro lado de la acera.

Lan XiChen rebotaba suavemente al tierno bebé metido en el canguro sujeto a su pecho, una mochila azul con juguetes y otras cosas colgando de uno de sus delicados hombros. Una chispa de anhelo iluminó los ojos encantadoramente azules de Jiang Cheng al ver como el chico besaba la cabecita de su retoño, mirando a ambos lados antes de cruzar la calle en dirección a la cafetería.

¡Mierda! ¡Mierda! ¡Mierda!

Rápidamente dejó el vaso de cartoncillo a un lado y agarró el primer libro que encontró, fingiendo estar sumergido en la lectura cuando la puerta del local fue abierta, la campanilla en lo alto dando algunos tintineos como aviso de su entrada. WanYin resistió el impulso de chocar su cabeza contra la superficie de madera al ver que lindo lucía esa mañana.

—Buenos días MianMian. ¿De casualidad todavía quedan tortitas de nata?

La expresión de la chica detrás del mostrador se entristeció, negando una y otra vez.

—Buenos días XiChen. ¡Hola, A-Shui! Lo siento pero no, llegaron muy tarde. Hoy es lunes y la especialidad de la casa está agotada —explicó abatida.

XiChen abultó sus labios en un puchero de inconformidad. El bebé acurrucado contra su pecho emitió algunos ruiditos y agitó los brazos con impaciencia, casi parecía que también protestaba por la falta de su postre favorito.

—Entiendo. ¿Oíste, baobao*? La próxima semana debemos levantarnos más temprano para alcanzar nuestro antojo —habló a la tierna criatura de grandes e inocentes ojos enfocados en su Die.

—¡Oh, eres tan adorable ShuiShui! —MianMian no pudo resistirse más y acarició la carita redonda del niño, arrullandolo—. ¡Es justo como tú de lindo!

—En eso estoy de acuerdo —interrumpió una tercera voz.

Jiang Cheng empujó su silla hacia atrás y se acercó al par de amigos, dejando su plato con dos tortitas de nata todavía calientes encima del mostrador. Con una inclinación de barbilla hacia la chica le indicó que empaquetara los panes antes de que se enfriaran. MianMian obedeció, dirigiendo un movimiento de cejas sugerente al Lan por encima de su hombro.

XiChen fingió que no la conocía y se giró al más joven con una expresión dulce y una sonrisa resplandeciente. Jiang Cheng casi se derritió allí mismo.

—Es la segunda vez en esta semana y la quinta en el mes que nos da su desayuno, doctor Jiang —se quejó en broma—. No puedes seguir haciéndolo.

—¿Por qué no? —chisto el otro con altivez—. A Shui'er no le molesta. ¡Mira qué feliz es!

Desde el instante en que escuchó al médico, el bebe se retorció y pidió entre gritos emocionados que lo tomara en brazos, extendiendo sus inquietas extremidades a Jiang Cheng, quien hacía ademanes graciosos para hacerlo reír. XiChen volvió a quejarse por semejante traición.

Por ti seré | ChengXiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora