Ya habían pasado 5 años desde el incidente de la escuela de héroes U.A y son los mismos 5 años del reinado de los villanos Haruchiro Syoske y Midoriya Izuku, mejor conocidos como Kayaku y Deku.
La cara de la chica de mechas azules aparecía en todos los noticieros; no había día que se hablara de Kayaku "titiritera de pólvora". Siempre había nuevos asesinatos de héroes y estudiantes de estos, su objetivo Dynamaight. Tenía la costumbre de siempre dejar pistas para el y en conjunto con Deku ,quien no dejaba de qué hablar, pues el si llego a ser un héroe profesional, sin embargo las cosas se prestaron para otros rumbos.
"La pareja de villanos ataca nuevo", "Un nuevo asesinato", "Amor entre sangre", "Nuevamente es hallado un estudiante de héroe muerto", "Dynamaight deja de qué hablar respecto a Deku y Kayaku". Siempre se habla de ellos, no hay lugar donde no sean conocidos, en algunos incluso son hasta aclamados; sembraron un miedo incontrolable en el país, "el exterminio", una nueva era para los villanos. Pero... que pasaría si te contará que todo lo que es hoy, sucedió ya hace 5 años en una preparatoria para preparar a los héroes.
Año 2034. Los alumnos de la clase 1A tendrían una clase un poco particular con los alumnos tercer año, específicamente hablando con los cuatro grandes, los mejores alumnos que la escuela podía ofrecer y que eran propensos a unos geniales y respetables futuros héroes.
El profesor de la clase había presentado a los cuatro alumnos que estaban frente a ellos. Nejire Hado, Mirio Togata, Tamaki Amajiki y Shinju Sasaki.
En cuanto el chico de pecas vio a la de anteojos su corazón comenzó a palpitar tan rápido y sus mejillas se sonrojaron, sus nervios aumentaron cuando sus ojos se posaron en el, escondiéndose detrás de su libreta.
Para la clase o demostración bajaron al campo de entrenamiento; la clase de primer año se dividió en dos, quirks de ataque a larga distancia y quirks de ataque cercano.
Syoske se paró frente a todos ellos con una mirada fría y sería que los había paralizado, había un silencio que inundó el lugar, se rompió en cuanto la burbuja de la goma de mascar de Haruchiro se rompió.
- Será sencillo - habló con una voz un poco profunda - traten de vencerme, ¿fácil no?
Estaban confundidos, se vieron unos a los otros preguntándose si hablaba en serio.
- ¿Todos nosotros contra ti? - pregunto el chico de cabello bicolor.
- Eso fue lo que dije.
- ¿Es arrogante no? - le pregunto Aizawa a la joven de cabellera celeste.
- Para nada, es solo que es muy seria y directa pero yo no diría que arrogante - contesto la joven de cabello azulado.
- Ella es simplemente increíble y su quirk es único - el rubio habló con entusiasmo.
Hubo una pequeña pausa que un particular sonido de pequeñas explosiones lo pararon.
- En ese caso preparada para ser aplastada - Bakugo se lanzó con todo a ella.
- Bakugo espera no sabemos su... - las palabras del pelirrojo se interrumpieron cuando Syoske soltó un ligero movimiento de manos y Bakugo cayó directamente al suelo.
- ¡¿Pero qué demonios?! - Bakugo se vio delimitado al no poder mover ninguna parte de su cuerpo.
- Eres pésimo.
Todos habían quedado un poco sorprendidos por la repentina acción, aunque era algo de esperarse de alguien a quien llaman "grande".
- ¿Qué esperan? - una sonrisa divertida se formó en su rostro - crei que querían ata... - su frase fue inconclusa cuando una ráfaga de hielo se aproximaba a ella, un moviendo de muñeca basto para que aquellas pilas de hielo se convirtieran en cubitos para limonadas.
Quedaron perplejos, pues lo único que hacia era mover las manos y dedos ligeramente para que todos los ataques dirigidos a ella quedaran en intentos vagos por detenerla.
Los demás no se habían quedado atrás, aunque habían sufrido el mismo destino que Bakugo o Todoroki.
El último que había quedado aún en pie había sido Deku, ignorando el hecho de que su belleza y destreza le habían hecho sentir algún tipo de especie de mariposas en el estómago, estaba decidido a tratar de vencer a Shinju, lo cual había sido solo un intento.
- Eres bueno - le hablo teniéndolo en las redes de su quirk - pero no lo suficiente.
Izuku quedó perplejo, aquel comentario le pareció algo pasivo-agresivo y le había causado un vuelco en el estómago, no pudiendo evitar su sonrojo.
Y ahí estaban, toda la clase 1A estaba tirada en el suelo sujetados por algo que ninguno podía ver, pero lo sentian. Una especie de alambre delgado les rodeaba el cuerpo, Shinju chasqueo los dedos y enseguida todos recuperaron la movilidad.
- Shinju, creo que t-te excediste un.. un poco - Tamaki le había hablado a Shinju aunque hubiera parecido que se lo había dicho a la pared.
- Yo creo que estuvo perfecto - Mirio la aludo, Shinju le regreso una media sonrisa para posteriormente reventar nuevamente su bomba de mascar.
Después de la práctica en la cabeza de Izuku solo se repetían una y otra vez como CD rayado sus palabras, no sabía cómo considerarlo, a los demás salvo Bakugo les dijo algo, y eso le había hecho volar su imaginación dejando de prestar atención a lo demás.
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Nuevamente se había encontrado a otro cuerpo sin vida en un barranco a las afueras de la ciudad, esta vez la desafortunada fue una joven de aproximadamente unos 17 años, según los informes iba de regreso de su escuela, de héroes, otra vez.
Un estruendo se escuchó en la parte baja del almacén, la joven quien se encontraba leyendo las noticias en su celular rodó los ojos apagando su aparato y levantándose de la silla donde estaba sentada, caminó hasta llegar a una gran montaña de cajas y tubos de metal, retiro todo lo que estaba tapando una puerta algo reducida de un tamaño promedio. Abrió la pesada puerta de acero y bajó por unas oscuras escaleras y un poco incómodas de bajar, al finalizar el recorrido tiro de una pequeña cadena que encendió un foco que iluminó una parte del oscuro cuarto.
- Te dije que no hicieras ruido, ¿acaso no entiendes? - se acarició las sienes, mientras que el chico no dejaba de balbucear y hacer movimientos bruscos para poder librarse de las ataduras de la gruesa cuerda - ¡Callate! - le grito de manera histérica haciendo que el joven se quedara quieto - vuelves a hacer algún mínimo intento de escape, ¡uno mínimo!, y te haré trizas ¿me oiste? - el pobre chico tenía una cara de espanto y no podía evitar temblar un poco por la expresión de su captor.
Kayaku había capturado a uno de los héroes que trabajaba en la agencia de Shoto, otro gran héroe que era objetivo de los villanos. Sólo estaba esperando una visita para poder realizar su cometido.
Escucho desde abajo un fuerte golpe y alguien diciendo "policía manos arriba", a Kayaku se le dibujo una retorcida sonrisa.
- Ya llegaron - susurro para ella misma, los pasos de varias personas resonaban en el techo del sótano, se acercaban cada vez a la entrada del cuarto subterráneo. El joven comenzó a hacer ruidos para ser escuchado y tener la posibilidad de ser ssalvado
- El héroe número dos está aquí - Syoske habló con emoción - que honor - se tocó las mejillas y sonrió con alegría - es hora de la función.
Tomo una navaja y con destreza corto los cordones de las manos y pies de quien secuestro, sin embargo se vio inmovilizado nuevamente por el quirk de Kayaku.
Subieron las escaleras y salieron del sótano estando frente a frente con la policía y los héroes.
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༒︎ 𝐿𝑜𝑣𝑒 𝐺𝑟𝑒𝑒𝑛༒︎
أدب الهواةHay una delgada línea entre ser un héroe y ser un villano, la venganza, esa es la línea más fina que hay en la vida; solo basta cometerlo una vez pata que se vuelva tu adicción y te lleve a ser de los mejores villanos que pueden aver existido... Per...