Capítulo 29: Rupturas y averías

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(T/n) estaba en el Gran Comedor desayunando con Hermione, Ron y Harry cuando llegó el correo.

"¿Cualquier cosa buena?" (T/n) preguntó Hermione preguntó ella alisó el Diario El Profeta.

Ella dejó escapar un fuerte jadeo. "¿Qué pasa Hermione?" Ron le preguntó a través de un bocado de comida.

"Sí, ¿qué pasa, 'Mione?" (T/n) le preguntó. "¿Alguien se escapó de la prisión?" Preguntó en broma. Hermione no respondió.

(T/n) se inclinó y miró el papel, y su sangre se congeló. Allí, en la primera plana, mirándolo fijamente, estaban los ojos vacíos y sin alegría de Antonin Dolohov.

(T/n) golpeó su tenedor tan fuerte contra la mesa que se incrustó en la madera. Se levantó de su asiento y salió corriendo hacia la puerta, donde se encontró con Malfoy y sus matones que llevaban una copia del Profeta.

"Ah, qué vergüenza (A/p), deberías cuidar tu espalda, con suerte vendrá por ti-" comenzó Malfoy, pero (T/n) lo interrumpió golpeando su puño en la mandíbula de Malfoy y tirándolo al suelo.

Crabbe luego se movió hacia adelante intentando parecer amenazador, pero (T/n) echó hacia atrás su puño y lo arrojó a su estómago, causando que cayera al suelo.

Goyle luego comenzó a moverse hacia adelante y (T/n) sacó su varita y la apuntó directamente entre sus ojos. Goyle miró asustado la varita por un segundo y luego comenzó a retroceder, antes de darse la vuelta y salir corriendo.

(T/n) agarró a Malfoy por el cuello, lo levantó en el aire y lo arrojó fuera del Gran Comedor antes de irrumpir en un salón de clases vacío.

Se hundió en un rincón de la habitación y colocó su cabeza entre sus manos. Estaba furioso, su sangre hirviendo.

Ese hombre, ese hombre malvado había matado a su madre. Él la había matado; la mató y se rió.

"Lo mataré" (T/n) murmuró entre sus manos.

"¡Lo mataré!" Dijo más fuerte poniéndose de pie.

"¡LO MATARÉ!" Gritó mientras tomaba uno de los escritorios y lo arrojaba a la pizarra, causando que se rompiera en pedazos.

Una pila de papeles estalló en llamas sobre un escritorio en el fondo de la habitación.

Golpeó con el puño el escritorio del profesor, rompiendo un gran trozo de madera.

En la parte de atrás del salón de clases había algunos calderos. (T/n) corrió hacia ellos, recogió uno y lo arrojó al otro lado de la habitación, y se partió cuando golpeó la pared opuesta.

Luego tomó otro y lo arrojó contra la ventana, haciéndolo añicos.

La rabia hervía en su cuerpo, lo quería muerto; quería matarlo; quería que sintiera el dolor que él sentía.

Un escritorio en la parte trasera de la habitación se incendió y (T/n) arrojó su puño protésico contra la pared y escuchó un fuerte crujido.

No es que le importara. En este momento, su único pensamiento era cuánto odiaba a Dolohov y cuánto dolor quería causarle.

Cogió otro escritorio y lo arrojó por la puerta abierta y lo escuchó romperse en el pasillo exterior.

"¿Qué crees que estás haciendo?" Una dulce voz enfermiza vino del pasillo.

En respuesta, (T/n) tomó un caldero y lo arrojó tan fuerte como pudo a la cabeza de Umbridge, tomándose solo un momento para patearse mentalmente por fallar, y le cerró la puerta en la cara.

Pasó un rato más en el salón de clases, no estaba exactamente seguro de cuánto tiempo fue, y finalmente se hundió en un rincón, con lágrimas corriendo por su rostro.

Miró su mano protésica y vio que los dedos estaban todos doblados y pegados en la dirección equivocada. Su mano protésica estaba claramente rota.

Miró alrededor del salón de clases para ver el daño. En este punto, todo el salón de clases estaba destruido, había pedazos de madera por todo el piso, junto con pedazos de papel quemados, algunos calderos rotos y un par de incendios en todo el salón.

"¿(T/n)? ¿Estás bien?" Una voz tímida vino de la puerta. Estaba a punto de recoger una silla rota y tirarla a la puerta cuando se dio cuenta de quién era.

Hermione entró en la habitación y se sorprendió por un segundo por el estado de la habitación, y luego se acercó a (T/n), se sentó a su lado y lo rodeó con el brazo.

"¿Estás bien (T/n)?" Ella le preguntó.

(T/n) abrió la boca para decir que estaba bien, pero sabía que sería inútil. "No" dijo débilmente, limpiándose un chorro de lágrimas de su mejilla.

"Umbridge está furiosa" dijo Hermione después de un rato de estar sentada en silencio, sabiendo que (T/n) no quería hablar de Dolohov.

(T/n) dejó escapar una risa débil "bien, apuesto a que lo es".

"Ella ha estado patrullando los pasillos por un tiempo, tratando de entrar en la habitación, gritando sobre cómo va a tener orden". dijo Hermione, pasando sus dedos por el cabello de (T/n) suavemente.
"Pero cada vez que intentaba meterse, algún mueble se le arrojaba a la cabeza".

"Lástima que ninguno de ellos la golpeó" dijo (T/n), apoyando su cabeza en el hombro de Hermione.

"Yo no dije eso" dijo sonriendo con picardía. "Así fue como llegué aquí, un trozo de madera la golpeó en la cabeza y salió corriendo para la enfermería"

(T/n) estalló en carcajadas como un loco ante esto. Se rió como si no se hubiera reído en una eternidad.

Se sentaron allí por un rato en silencio, (T/n) estaba feliz de tener su compañía y eventualmente rompió el silencio.

"(T/n). Te amo, ¿lo sabes verdad?"

"Por supuesto que sí amor"

"Y si alguna vez necesitas hablar de esto, aquí estoy" dijo Hermione apretando su mano.

"Gracias Hermione" fue todo lo que (T/n) pudo reunir. 

"(T/n) (A/p) al director le gustaría verte" dijo una voz que hizo que ambos saltaran.

"Lo siento profesora" (T/n) le dijo a McGonagall.

"Está... está bien (T/n)" dijo McGonagall en un tono tranquilizador. "Escuché lo que pasó. Y debo decir, buen lanzamiento" y (T/n) podría haber jurado que le sonrió.

Libro 5: Harry Potter Male ReaderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora