《Tú, my salvación》

Capítulo 15

Capítulo dedicado a @Nahomi_Saotome quien cumple años hoy 9 de Mayo del 2022, ¡Feliz cumpleaños!

Capítulo 15

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Boruto detuvo a las chicas para observarlas mejor.

—¿Seguro no están lastimadas? —se agachó para observar a Hana —Hana ¿estás bien?

La pequeña asintió —Estoy bien, hermano.

—Lo siento…

Se escuchó la voz quebrada de Sarada. Boruto la miró.

—Yo… caminaba dormida y… Hana me vio y me siguió… luego Himawari —dijo mientras miraba a la joven con culpa.

Boruto estaba por hablar cuando Himawari se adelantó —No es tu culpa, tu lo has dicho, ibas dormida, y después de lo que pasó —negó— mierda, esas niñas muertas querían lastimarte, no puedo creer que soportes todo esto, no me malinterpretes, eres fuerte y si crees que estoy molesta por esto, no es así, ahora entiendo a Boruto, algo quieren de ti y están dispuestos a todo con tal de conseguirlo —Himawari sonrió— fuiste muy valiente a pesar de que te la pasas llorando, en el último momento ibas a protegernos a mi y a Hana, gracias Sarada.

Hana sonrió y como su manía lo dictaba, la pequeña se lanzó a Sarada en un abrazo efusivo abrazándola por la cintura, justo como lo hacía con Boruto —Gracias Sarada-nee.

Sarada estaba demasiado sorprendida, no se esperaba aquella reacción, sonrió con lágrimas aún saliendo de ella y acarició la cabeza de Hana.

Boruto miraba igual de sorprendido la escena. Estaba a punto de decirle a Sarada que no había sido su culpa pero lo dicho por Himawari, y el efecto en Sarada había sido positivo. Terminó por sonreír.

—Bueno, ¿Lo ves Sarada? ellas lo entienden a la perfección, en todo caso, yo debí estar más al pendiente.

—No, tampoco es tu culpa —Habló Himawari —Yo… olvidé mi protector en casa y… al parecer Hana no lo lleva puesto, así que…

Boruto suspiró —Después de lo que acaba de pasar creo que no volverán a cometer tal imprudencia ¿No?

Ambas hermanas negaron —No!

—Para nada! —dijo la pequeña.

Boruto asintió y llevó su mano a la muñeca izquierda solo para retirarse dos de las seis pulseras de cuero que tenía y colocárselas a sus hermanas.

—Bien, entren ahora, en un rato me aseguraré de que estén en sus habitaciones —dijo el rubio.

Ambas se despidieron y entraron al edificio, por su parte, Boruto volteó a ver a Sarada con el ceño fruncido.

Ella desvió la mirada y trató de huir —Tengo que volver también…

—Estás herida

Aquella afirmación la sorprendió, estaba segura que las hermanas de Boruto no se habían dado cuenta, pero él…

Boruto se acercó y descubrió la mordida en el hombro, era pequeña, pero se podía ver lo afectada que se veía la zona.

—Vamos  a tu habitación.

Ella se sonrojó por aquello — ¿Qué?

—Ve de inmediato, te alcanzaré en segundos, ve —dijo con voz firme.

Sarada no dijo nada más, y con pasos torpes, se encaminó en dirección a su cuarto. Cuando llegó, Boruto estaba ahí y aunque se sorprendió por aquello, no hizo preguntas y tomó asiento en su cama. Boruto sacó de su chaqueta una pequeña bolsa de papel, la cual contenía un pequeño frasco y unas gasas.