Capítulo 21

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Sasuke ingresó con unos papeles que Naruto le había mandado dos días antes. Caminaba a pasos firmes y fuertes, como si en cada pisara reflejara su ira tan deliberadamente que incluso cuando estuvo frente a su padre este notó que algo andaba mal.

—Sasuke, ¿Porqué no me dijiste que encerrarías a Sarada?

—Mi hija está bajo mis responsabilidad y tú no tienes derecho a nada que tenga que ver con ella —siseó Sasuke con evidente frialdad.

Fugaku frunció el ceño, Sasuke nunca le había hablado en ese tono.

—¿Por qué me hablas así?

—¿Por qué? —sonrió —¿Cómo debería hablarle a un imbécil manipulador al que no le importa si pasa sobre su propia familia con tal de obtener o mantener su poder?

—¡Sasuke!

Sasuke abrió la carpeta y la lanzó sobre la mesita de cristal que adornaba aquella sala. Las horrorosas fotografías de experimentos que se realizaban en aquél centro donde enviaba a su nieta quedaron expuestas y Fugaku se quedó sin habla. Por supuesto que sabía lo que hacían pero había pagado una buena cantidad de dinero para que Sarada solo recibiera la medicina que le habían prometido y que no la tocaran de más.

—Tu reacción me dice que lo sabías —apretó los dientes —Eres un desalmado ¿Cómo pude desear la aprobación de alguien como tú? A partir de ahora, yo estoy a cargo de la empresa, eso si no quieres perder a tu único heredero o por mí puedes dejársela a un desconocido no me importa, pero a mí y a tu neta no nos vuelves a ver.

Mikoto, quien había estado escuchando todo se llevó las manos a la boca.

—Madre, si te decides a dejar a mi padre, yo te voy a apoyar.

—¡Sasuke! ¡No puedes hacerme esto!

—Maltrataste a mi hija! —le cortó y de inmediato extendió la mano —el collar que le quitaste, dámelo ahora.

—Sasuke, debes calmarte ahora —amenazó el mayor.

—¡Quiero el collar!

Mikoto se acercó —Hijo… toma…

—¡Mikoto! ¡Te dije que te deshicieras de él! ¿es esto de lo que se trata todo? ¿Vas a apoyar las locuras de tu hija?

—¡Mi hija nunca estuvo loca y  no vuelvas a dirigirte a ella de esa forma!

A Sasuke estaba doliéndole la cabeza.

—¡¿A caso te has vuelto loco también?!

Sasuke iba agritar nuevamente pero decidió contenerse. Miró a su madre —Madre, ya sabes, tienes mi apoyo.

Dicho eso, Sasuke salió de la casa rápidamente. Ya no estaba dispuesto a perder tiempo, no después de lo que había visto y mucho menos con la sospecha de que Itachi probablemente había hecho algo prohibido.

Entró a su auto y condujo hasta la oficina de Naruto.

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Naruto lo recibió con una sonrisa amable, él podía intuir que finalmente había hecho lo correcto.

—Encontré algunas cosas pero también hay otras que me parecen incomprensibles.

Dijo Sasuke mientras le mostraba la libreta de Itachi y los pocos papeles que había encontrado. Naruto se colocó sus gafas y revisó por completo la libreta.

—Estas coordenadas…

A medida que revisaba las pequeñas anotaciones se sorprendió más y más y aquellos escasos papeles le estaban diciendo mucho.
—¿Entiendes lo que buscaba?

《Tú, my salvación》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora