Sueños húmedos:parte 2 [Renkaza🔥]

〰Perspectiva caliente

Las perspectivas de cada persona son diferentes y varían según su personalidad...no todo es lo mismo, y cuando se trata sueños...todo es posible.

-¡Oh por Dios!...Rengoku~...papi~...eres tan bueno~...¡Ahh~!-

Y ahí estaba otra vez ese sueño húmedo que había estado teniendo desde hacía ya varios días...donde el pelirosa estaba sobre una cama en cuatro y recibía con mucho gusto la mejor cogida de su vida, ¿y quién era Rengoku?; pues él era el maravilloso hombre que lo tomaba de las caderas con una inmensa fuerza y lo follaba como si no hubiera un mañana. Sentía a la perfección como ese pene se enterraba en su interior sin compasión haciéndole sentir los mil y un placeres.

-¡AHH~!...¡M-más!...¡Rengoku~...más~-

Gemía con los volúmenes agudizados todo aquello que le hacía sentir aquél chico. Un supuesto nombre era lo único que conocía Akaza de aquél chico, aparte de eso también podía ver un poco de su cabello, parecía el fuego totalmente y jamás podría confundirlo, pero nada más de eso...no podía ver su cara...era como si un fondo negro lo cubriera. Aunque todo eso no le importaba en realidad, ya que solo era un sueño húmedo, ya había tenido muchos en toda su pubertad así que no era la gran cosa. Pero...¿que pasaría si esos sueños se prolongaban más de lo debido?...una semana...a cada segundo que el sueño lo vencía esas fantasías retornaban y cada vez más excitantes, empezaban a gustarle más que la primera vez...y los demás podrían decir que estaba loco, pero en realidad se había enamorado locamente de ese hombre tan salvaje que lo cogía tan delicioso, y el hecho de que solo en sueños pudiera verle le hacía sentir tan mal...tab frustrado...tan enamorado de él...tanto que su amigo Douma ya le había llamado la atención muchas veces por eatar mirando a la nada con las mejillas hechas unos tomates, todo eso por estar recordando su último y mejor sueño con el rubio...el sueño del Domingo...ese que arrojó todos los anteriores por la borda y quedó como el mejor sueño húmedo de toda su vida.

El lunes, en todo el camino hacia el colegio no dejo de pensar en ese último sueño...recordaba todo a la perfección...de principio a fin...con todos los detalles que lamentablemente nunca fueron el rostro de su amor fantasioso. Por eso, ese domingo se fue a dormir temprano, para que la acción con su amante se prolongara tanto como para disfrutarle en todos los sentidos, y mucho mas, con la esperanza de por fin verle el rostro.

                                                         ♡~🌸~♡~🌸~♡🌸

El sueño empezó con el pelirosa esperando en la habitación de su hombre...la sabía ya que todos sus anteriores sueños fueron allí, nunca lo olvidaría ni aunque quisiera. Llevaba tan solo unos minutos allí, pero eso bastó para desesperarlo e ir en busca del rubio. Cuando cruzó la puerta lo encontró de espaldas, como siempre...con mucha desesperación corrió hacia él, abrazó su espalda y con delicadeza tocó su abdomen musculoso haciendo un delicioso masaje para eo contrario, lo estaba incitando a una buena cogida nocturna.

-Rengoku~... vamos a hacerlo ¿si?-habló el pelirosa usando su tono de encanto mientras besaba la espalda del contrario y este soltó una sonora risa.

-Akaza...sabes cómo debes pedirlo-dijo al mismo tiempo que guiaba su mano hacia atrás acariciando el muslo de él pelirosa.

-Mmm~...por favor papi...vamos a hacerlo~-endulzo su voz suavemente y recorrió con sus uñas pecho y abdomen del las alto.

Y sin hacerlo esperar más el rubio se dio la vuelta...aún sin su rostro visible y cargó al pelirosa como un saco de papas llevándoselo consigo a si habitación y soltándole una ardiente nalgada. Al llegar al interior de él cuarto lo dejó caer en la cama colocándolo en cuatro, el pelirosa sólo rio y se dejó hacer por su amante que rápidamente se colocó encima de él mas bajo y subió su camisa con lentitud hasta llegar a uno de los rosados pezones de él chico y con suavidad lo rozó con su dedo índice sacándole un dulce gemido al pelirosa.