La oscuridad inundaba la celda de contención del scp-049, que se encontraba escribiendo sobre la pestilencia en su cuaderno, únicamente iluminado por una pequeña lámpara de mesa. Era tarde por la noche y creía que todos en la fundación se habían retirado a sus hogares, era el momento del día que más le gustaba a 049, silencio y tranquilidad, ¿que más podía pedir?
Aunque esa sensación no duró por mucho tiempo pues todas las luces de su celda se encendieron de repente, dejando al doctor de la plaga ciego por unos cuantos segundos. Ahora estaba enojado, ¿quien diablos lo estaba interrumpiendo? Se levantó de su silla y estaba dispuesto a gritarle a quien sea que hubiera interrumpido su investigación. Al girarse, el enojo de 049 se convirtió en nerviosismo, quedó completamente paralizado, sin habla, sintió como si su cuerpo se hubiera congelado, no era capaz de mover un solo músculo. Frente a él se encontraba el doctor Raymond Hamm, el cual tenía una mueca de asombro y confusión en su rostro debido a la primera reacción de 049.-buenas noches 049... lo siento, no debí encender las luces tan de repente
-n... no se preocupe doctor, discúlpeme a mi por mi agresiva reacción... no imagine que fuera usted...
Por primera vez en mucho tiempo 049 se sentía genuinamente agradecido de la máscara que portaba, ocultaba perfectamente el sonrojo de sus mejillas, no estaba del todo seguro si era por la vergüenza de haberse confundido o... algún otro motivo.
-no te preocupes, yo solo venía a darte esto
Hamm levantó un poco su mano derecha en la cual llevaba una bolsa de plástico blanca, 049 no le había puesto atención a eso hasta ahora, parecía llevar algún tipo de contenedor adentro. 049 inclinó la cabeza un poco a la derecha, confundido.
-¿que es eso?
-es comida, no comiste nada en todo el día, pensé que tal vez tendrías hambre
Un olor delicioso llegó a la nariz de 049, no recordaba haber olido algo así en todos estos siglos. Al ver como gracias a ese olor, 049 de relajaba, Hamm sonrió con ternura, paso junto a 049 y dejó la bolsa en la mesa, la abrió y comenzó a sacar lo que había adentro, el doctor de la plaga se acercó con curiosidad. En algún momento sus ojos dejaron de ver lo que estaba en la mesa y se posaron directamente en el rostro serio y concentrado de Hamm, cada parpadeo, cada ligero movimiento que él hacía era un deleite para 049, había algo en ese doctor humano, algo especial que lo tenía cautivado. Durante toda su existencia 049 se había dedicado a encontrar la cura de la pestilencia y jamás se había permitido experimentar un sentimiento así, pero ahora que lo conocía no podía negar que le gustaba.
-creí que ya estaría en su casa, doctor
‐normalmente a estas horas ya estoy ahí, pero hoy tuvimos una reunión importante que gracias al doctor Bright se terminó convirtiendo en una cena informal entre muchos médicos de la fundación, fue ahí donde me acordé de usted, pregunté a unos guardias si ya le habían servido la cena y él me dijo que no había comido nada desde la mañana
-en realidad no necesito comer
-lo sé, pero al saber eso pensé que sería buena idea traerle un poco de la comida que comimos todos, estaba realmente deliciosa, me gustaría que la probara
049 observó el plato que Hamm se encontraba destapando, al abrirlo el olor se hizo más intenso e inmediatamente lo hizo salivar. Era cierto que su cuerpo no necesitaba alimentos para sobrevivir, pero no podía negar que a veces le daban ganas de comer diferentes cosas que antes le gustaban, solo por el placer del sabor de la comida y no tanto porque la necesitara.
La comida que Hamm le había traído consistía en un corte de carne muy jugoso y unas cuantas verduras al vapor, 049 observó que aún quedaban unas cosas dentro de la bolsa así que se animó a preguntar.
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Historias Random SCP
FanfictionEn este libro habrá varios one shots sobre la fundación SCP, principalmente serán ships ya sea entre los doctores o hasta entre los propios scp's.