AMOR EN LAS SOMBRAS... (Love in the Shadows). Rubirena

Capítulo 5

Maca

Llegamos en la noche a Lyon, Francia, es un lugar muy hermoso, la gente con la que hago el tour es muy agradable, me trato de reír con ellos, y lo logro por momentos, el tema es cuando estoy sola o sin distracciones, me invaden los pensamientos con la Rubí, no me la puedo sacar de la cabeza. 

Es impresionante el efecto que produce sobre mí, y yo que creía que la había superado..... claramente no es así... ya como que tendré que asumir que no va a pasar, el alejarme y no verla, sólo me hace no pensar en ella.... Nada más, están intactas mis emociones y lo que me hace sentir, intactas.

Es muy extraña esta sensación, estoy en Europa, en Francia, ella debería estar en España, estamos a kilometros de distancia en países distintos, mucho, mucho mas lejos que en Santiago y la siento al lado mío, al lado.

Nos levantamos temprano, caminamos por la ciudad, el centro era lindo, todo era lindo, pero me daba rabia a mí misma, porque en todos lados veía los ojitos de la Rubí.... 

Por momentos sentía que me volvía loca con su imagen, que se me repetía y repetía.

Llegamos al hotel, busqué mi maleta y no la encontré, me avisaron que estaba en el bus. 

Busqué el bus 611 y no estaba en ninguna parte, me anduve asustando un poco, hasta que ví a Guillermo quien me dijo que nos cambiábamos de bus, a uno más grande, en verdad no le dí mucha importancia a eso, y era muy relevante, ese cambio de bus le dio un nuevo giro a mi vida.

********

Maca sigue la dinámica previa, se sube al bus y se sienta en el primer asiento, en el lado de la ventana para ir mirando el paisaje, se pone sus audífonos y se acomoda para dormir, el viaje a París es largo, será por varias horas.

Maca se despreocupa del ingreso de gente al bus, escucha música con los ojos cerrados tratando de evitar los recuerdos de Rubí, de pronto alguien se sienta a su lado, pero Maca se mantiene en su postura.

Pasan unos 30 minutos y siente que la persona del asiento contiguo le ofrece algo, mira de reojo y ve una palma extendida ofreciéndole un chocolate.

Acepta el chocolate, se gira para agradecer a la persona que se le ofrece y se encuentra directamente con una mirada fija y conocida. 

 El encuentro con esos ojos que no la dejan tranquila desde que los vio nuevamente en la ciudad de Toledo.

Rubí le sonríe sin dejar de mirarla fijamente.

- ¿Rubí?... ¿que?, ¿como?... no entiendo.

- Maca, .....hola....te juro, pero te juro,  que no tengo nada que ver con esto, nos cambiaron el bus en Lyon, me dijeron que nos juntábamos con otras personas, jamás, en serio, jamás pensé que el destino me tenia esta sorpresa, ... me subo al bus y lo primero que veo es a tí, sentada y mirando por la ventana, perdón Maca, pero yo no voy a perder la oportunidad de hablar contigo, no, me tendrás que tolerar, al menos, hasta París.