Mi Verdadero Amor

Capítulo #05

Apenas pasaron dos asquerosos días desde que perdió al amor de su vida por no haber leído una carta a tiempo, se sentía morir ese azabache se llevó todo su amor, su alegría y demás emociones cuando lo insulto y le pidió que se muriera...¡¿¡Y SI REALMENTE PLANEABA MORIR POR SUS MALDITAS PALABRAS!?! No no no, eso no lo podría soportar jamás...

Seguía visitando la finca del agua, con la sola esperanza de ver al dueño de su corazón sano y salvo pero nada, mandó a uno de sus ratones a buscar alguna señal de él pero solo recibió una nota que rompía más su corazón.

Señor Uzui Tengen

Le pido que jamás me busque otra vez
creo que ya dejó muy en claro que solo sirvo
para satisfacer a alguien y soy una misera rata no?
Le dije, cuando se enteré de la verdad que no se arrepienta de nada de lo que dijo, puede tener todos los omegas que quiera por mi parte el ser destinados ya no importa.

Manténgase lejos de mí por favor.

Tomioka Giyuu.

Eso último dicho lo destruyó por completo, perdió a su destinado, su omega...su amor...Ya no desea ser cazador, pero seguirá en su puesto, tal vez él desee que no estén juntos nunca más pero lo protegerá con su vida y no dejará que nadie lo usé otra vez...

Talvez y solo tal vez podrían ser amigos pero eso lo ve muy difícil, así que irá poco a poco, como cuando inició su cortejó, cuando con una simple flor dada con cariño ese hermoso omega le daba las más bellas sonrisas del mundo, esas sonrisas que él mató por no saber confiar en plenitud.

Ya había pasado más de una semana, ¿dónde estaba? Y si realmente murió...? No!! No podía pensar así, su chico es alguien fuerte y no se dejaría matar...eso esperaba...

Los nervios lo estaban traicionando y de la peor manera, ponerle escenarios de un Giyuu siendo cruelmente torturado y asesinado fue lo peor que pudo soñar en años. Ya no podía más, fue directo con el patrón para que le diera información de dónde estaba el azabache, necesitaba verlo vivo sin ninguna herida. Al llegar a la finca del patrón su corazón se tranquilizó, vio al ojiazul darle su informe de la misión pero por unos instantes sus miradas se encontraron, una suplicaba perdón a gritos y la otra parecía muerta como si hubieran quitado todo sentimiento de su ser.

Al ver marcharse al omega se apresuró a ir tras él, necesitaban hablar por muy asustado que esté de cómo pueda ser rechazado por su amor, esto lo mataba pero haría lo que fuera por pelear por él. Logró alcanzarlo y abrazarlo con toda su fuerza, sentía el forcejeo del menor pero no lo quería perder otra vez y menos una oportunidad de hablar.

Giyuu: Señor Uzui le pido que me suelte de inmediato, no quiero estar cerca de usted...-Se podía escuchar enojo y tristeza en su voz, aún anhela estar como antes pero el doloroso recuerdo no se lo permite-