Mariposa Blanca

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¡Oh, mariposa blanca! ¡No sabes cuánto me duele la cabeza!
He escuchado al perro ladrar toda la noche y las luces se encienden solas.
Tú, mi mariposa, has venido a mi balcón... ¡a nuestro balcón! Para decirme que me levante de la cama y te vea,
Me levante y te escriba.
Por ti, me acercaré mientras mi cabeza cuelga de un hilo,
Seré tu títere por amor aun sintiendo que cada bombeo de sangre en las cienes fuese un disparo.
Tambaleando observo tu ala derecha rota,
Tal pareciera que estuviera comida por hormigas, por muchas hormigas.

Yo no quería escribir pero tú querías leerme.
Yo quería escucharte pero tú no podías hablar.
¿Por qué si te ves tan hermosa, mi bella mariposa, me dan tantas ganas de pisarte como poca cosa?
Tan blanca pero no más blanca que mis labios.
Te enseñaría mis alas pero las tiré hace tiempo.
¿Me darías una de las tuyas?
Yo me quedaré con la que está rota.
La diferencia es que tú vuelas buscando el suelo y yo sólo caigo.

Envidio tu libertad aún cuando estás atrapada entre las ramas,
Porque quisiera estar contigo,
Enredado, pero enredado contigo.
Dejaría cualquier color si fuera por ese blanco de tus alas.
Mis miedos favoritos son los que se reflejan en tus ojos rojos,
Rojos ojos que alivian mi migraña.
Con tu aleteo eres capaz de causar tornados en mis sentimientos,
Todo giraría en torno a ti.
Enséñame a volar, mi amada alada,
Porque he perdido el color del cielo y el sabor de las nubes.

Pintas tal y como brillas,
Pintas mis versiones oscuras.
Me haces pensar tan blanco aun vistiendo de negro.
Porque sólo tú ves como lucho todo el día con mi "ayer".
Conviertes mis problemas en tulipanes.
Me amas aún sin besarme.
Podría pasar toda la noche escribiéndote,
Y tú pasar toda la noche sin moverte.
Me seguirás cautivando sólo con verte,
Porque sé que sólo con verte ya puedo tenerte.
Y si pudiera tocarte...
Sin duda te lastimaría, ¡pero no resisto en hacerlo! ¡Tengo que hacerlo!

Oh, mi mariposa blanca, será mejor que vueles, porque te amo, pero voy a lastimarte.
La mejor forma de amarte es protegiéndote aunque sea de mí.
Mariposa blanca, si lloras veré la lluvia más hermosa de todas.
Que caiga una cascada sobre mí, que yo seguiré seco a tus alas.
¿Cómo te explico, hada de mi balcón, que quien te ama también te va a lastimar un poco?
Una gota de dolor por mares de felicidad.
No hay mejor amor que el que te da paz.
Aun cuando mi cabeza está por apagarse, tú me das paz.
Te daría de mi propia piel para que armes tu ala,
Porque nada me importa más que verte entera.
Y jamás cambiaría nada de mi balcón por si decides quedarte ahí una eternidad.

Si te vas, seguirás siendo mi mariposa.
Si te lastimo al amarte,
seguirás siendo mi mariposa.
Si te llevas mis ojos contigo, seguirás siendo mi mariposa.
Y aunque me has dado nuevas alas, y a pesar de que me acerco y me doy cuenta que solamente has sido una hoja seca y mojada,
aún así, seguirás siendo mi mariposa.

- Montes de Oca

4 Historias De Amor (Y Un Instrumento Roto) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora