Segunda Oportunidad(Alastor x Tu)

Capítulo I ....Cómo llegué a morir....

Narra _____

- Lady sonrisas! - me gritó un policía que traía un megáfono en sus manos - Ríndase! Usted y su cómplice no tienen a dónde ir - me asomé desde el techo del edificio y los miré a todos los policías que estaban ahí presentes - Haga el favor de soltar al señor Marcus! ¡ES UNA ORDEN, Y SI NO LO HACE, USTED Y SU CÓMPLICE PUEDEN PERDER LA VIDA!

-Ahhhh - dije mientras Hacía un puchero y miré bien a mi linda compañera que se cubría el rostro con una máscara de gato, quien me observaba dispuesta a hacer cualquier cosa - Qué aburridos son - dije sonríendo, aunque nadie lo notaba - ¡Claro, oficial, ahora mismo le voy a entregar a este desgraciado violador para que haga lo que usted quiera con el!

Tomé del cuello a ese maldito hombre y lo coloqué en el borde del edificio, para luego tomar mi cuchillo y dibujarle una bonita sonrisa. Mientras veía las caras de terror en los policías y en las personas que estaban en los alrededores. Después arrojé el cadáver de aquel hombre el cual terminó con todos los huesos rotos.

-¡AHÍ TIENE, SEÑOR POLICÍA! Después de todo, ya está muerto - empecé a reír como una psicópata mientras veía las caras de terror que había en los oficiales y en las personas

-Maldición - decía el oficial molesto por no haber impedido que ese hombre muriese - ¡ATRAPADLAS! - le gritó a los oficiales que estaban cerca de mi y de mi compañera de asesinato

Los oficiales se fueron acercando a nosotras, sentía que ya mi fin se acercaba. Miré a mi compañera de asesinato, mi linda gatita, la iba a echar de menos. Ella me mira y me dice:

-Supongo que este es nuestro fin - pude notar que debajo de esa máscara, ella sonreía - digamos que fue divertido matar a tu lado, además de que podremos cumplir nuestra promesa de suisidarnos juntas.

-Qué bueno que sigas conmigo hasta el final, mi linda y dulce gatita

-Lo mismo digo, Lady Sonrisas, nos despedimos de este mundo que dejó de tener algo de sentido para ti y puede que también para mí, aunque me rompe el corazón tener que dejarla sola

-Sabes que no te estoy obligado a hacer esto, verdad?

-Si, lo sé, - me miró con cara de tristeza, o eso pensé yo, ya que no podía ver su rostro - pero desde que la perdí a ella no me quedó nada más a excepción de mi sobrina. Supongo que ella no tiene la culpa, pero, si me quedo es casi lo mismo que si me voy, al menos estoy segura que la veré estando muerta

-Si, supongo que sí, aunque dudo que termine en el infierno al igual que nosotras

-¡Entréguense de una buena vez!

-Ya cállese oficial escandaloso!-le grité irritada- vámonos mi linda gatita

-Si, vámonos antes de que ese oficial forme más escándalo

-Claro, querida, pero antes, tengo que decirle algo a nuestro amigo el oficial Luck

-Quiéres despedirte de él ,verdad?

-Supongo que sí, después de todo fue a la única persona que llegué a amar después de aquel día repugnante, vamos -tomé la mano de mi linda Susi y nos paramos en el borde del edificio, aclaré un poco mi garganta y comencé a dar mis últimas palabras antes de morir -¡Oye oficial!-él me miró sin entender, admito que voy a extrañar ese tiempo que pasé con el - si tú mismo, acaso piensas que mato a estas personas porque sí

-De qué hablas ?

-Hablo de por qué los oficiales no se ponen nunca a pensar, ¿cuál es el motivo por el cual las personas matan?, tal vez lo hacen por venganza.¿Por qué los ladrones roban?, tal vez sea porque necesitan el dinero para poder mantenerse o mantener a sus familias. -miré a todos los demás policías con odio excepto a él- ¿Acaso todos aquí piensan igual?,-me mordí el labio inferior con mucha fuerza, provocando que de mi labio saliera sangre- todos aquí piensan tener la razón, pero nunca la tienen.¡Espero que recuerden estas palabras, sobre todo tú-dije señalando a mi querido Luck-espero que aprendas a no juzgar a las personas por lo que aparentan ser por fuera y que mejor las juzgues por dentro!-dejé resbalar varias lágrimas por mis ojos, esas palabras habían salido de mi boca sin siquiera haberlas pensado.De un momento a otro siento que alguien me toma de la mano y cuando veo era mi linda Susel, nunca quise meterla en esto, pero, de un momento para otro ya lo estaba metida en este embrollo.