No pude verte crecer. Siempre traté de protegerte de esa familia condenada. Condenada en el pasado, presente y futuro. Siempre serás mi pequeña niña, lo prometo. Prometo cuidarte en el más allá. Ahora mismo, estoy sangrando. Y no entiendo. No entiendo nada, tal como un niño pequeño lleno de preguntas sin respuestas.
No pude detener el tiempo. Te juro que era lo que más quería. Llevarte lejos, lejos de esta pesadilla, tal como yo quería hacerlo. Pero este tonto hombre, tan temeroso, no tuvo el coraje.No tuve coraje.
Y el tiempo no se detuvo.
— Jotaro Kujo.