101

13 3 7
                                    

Narra tony

tony: ¿Yo?

Lore: No, mi abuela.

Sam: cómo le jode no narrar.

Lore: Sam, Finn está tranquilito en su cuarto, ve a molestarle.

Sam: ¿Me estás dando permiso?

Lore: haz lo que quieras, pero que sepas que no me hago responsable si él luego te suelta un leñazo.

Sam: ¡Adios! *Corre a joder a finn*

tony: Nunca me había tocado narrar a mi, que guay.

Lore: Pues si empiezas igual acabamos hoy, ¿Que nos vas a contar? Me muero de ganas de saberlo.

Fabio: Huelo el sarcarmo desde aquí.

Marcel: Esque hace tiempo que no narra, por eso es que... - Se calla al ver la mala mirada de lore - Mejor me callo.

Lore: Bien.

gala: Callaos ya, dejadle narrar.

tony: calladitos y escuchando que voy a empezar.

Lore: Súper.

horas antes de que pasara lo que pasó en el capitulo anterior, cuando nos hechasteis de allí, Cali tomó mi mano y me llevó a rastras hacia su coche, ella solamente sonreía, y yo sonreia como un tonto solo de pensar que estaba tramando algo, estaba tan mona.

- ¿Me vas a decir a donde vamos?

- ¿Tiene alguna gracia si te lo digo?

- Pues no -

- Pues ya está -

- ¿Me das una pista?

- No puedo, no se que decirte -

- Cali -

- tony, cielo - Cali acarició mi cara, desvió hacia un terreno donde no había nada, cosa que me extrañó - Te lo explicaré cuando lleguemos.

- ¿Qué hacemos aquí? - Cali me tomó de la mano y me bajó de allí, ambos nos apoyamos en el coche.

- ¿Te acuerdas que te dije que te iba a demostrar que me importabas y que confiaba en ti?

- Eso fué una tontería Cali, por lo de la diabetes, no tienes nada que demostrar, ¿lo entiendes?

En ese momento Cali me besó, sentía como sus uñas semi largas acariciaban mi cuello mientras nuestros labios se movian, así que yo llevé una de mis manos a su mejilla, sentí cómo mi piel se erizaba cuando me tocaba.

Dios...me gustaba tanto cuando me besaba, nunca me había pasado estar tan enganchado a alguien. Es una electricidad muy intensa.

- ¿Hacemos una locura? - me preguntó mientras juntaba mi frente con la suya. Yo me separé, la miré con una sonrisa.

- ¿Más que drogarnos solo para sentir más placer?

- Si, creo que más -

- Sorpréndeme - llevé mis manos a su cadera, la abracé por la cadera mientras me colocaba a centímetros de sus labios.

-¿Nos escapamos? Todo el fin de semana, que nadie sepa donde narices estamos.

- Me gusta la idea - besé su cuello provocando una pequeña risa - Será la cita más larga que he tenido jamás.

- ¿Nos vamos a cancún?

-¿A cancún?

- Te dije que era una Locura, si no quieres pues...no, claro que no - Cali bajó la mirada, lo que hizo que automaticamente la besara.

Quédate Conmigo. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora