━ HE LOVES HIM, NO ? [JAEMREN]

Capitulo #3

El paso de los días fue invisible, era difícil notarlos cuando su mente estaba a todas horas mentida en otros asuntos por placer. Se sintieron monótonos y silenciosos, sin nada destacable en ellos, a parte de a ver visto a sus amigos, hablar con Renjun por teléfono y no saber nada de sus padres. Desde ese día que llegó y no estaban, no sabía demasiado de ellos. El rubio no estaba preocupado pues no era la primera vez que desaparecían sin dejar rastro, no contestaban llamadas y sus conocidos no decían nada, estaban bien, lo sabía.

Los padres de Jaemin son las personas más duras que ha conocido, allí donde estuviesen estaban a salvo y volverían por su hijo, como siempre hacían.

Mientras, ese Viernes, Sábado y Domingo el chico tuvo que abrir el local de sus padres como dictaba en los horarios, para una ciudad que nunca duerme que el sitio más conocido estuviese cerrado era una pérdida de dinero, y eso Na no lo iba a permitir, era responsable para llevar el negocio, al fin y al cabo tenia que pagar la comida.
Jeno y Hyuck se pasaron a darle una mano y también a tomar algo, para que mentir, Jisung en cambio estaba de finde semana con su madre y hermana.
También por teléfono, pensó en avisar al chico castaño que paseaba por imaginación de vez en cuando, llegando a la conclusión de que era una tontería debido a que ya estaría dormido a esa hora.

No es como si este esperase un mensaje del Rubio de todas formas.

[...]

— Entonces. . . — La voz de Jeno es calmada, como él, con el ruido del spray adornando de fondo, su brazo se movió haciendo una flecha debajo del nombre de su amigo. — ¿La sorpresa es que Renjun vendrá, no?—

— Vaya, creo que soy muy predecible.—

Jaemin se giró para sonreírle antes de mover su muñeca, haciendo una corona roja encima del par de "JJ" que estaban dibujando en la pared.

— No lo haces, eres jodidamente inesperado, muy genuino, casi como una caja de sorpresas.— El codo del azabache le dio con suavidad al rubio, captando su mirada. — Pero. . . en esto, si.—

La madrugada se estaba yendo, estaban a escasos minutos de que el sol comenzará a salir alumbrando todo. Ambos bostezaron a distintos tiempos, uno de los sprays dejó de funcionar, Jaemin sabe que han gastado el último que tenían haciendo el logotipo de su infancia, cuando él y Jeno querían tener un dúo de raperos.

— ¿Crees que le guste venir?— La voz del rubio sonaba ciertamente cansada, pero solo su mejor amigo de la infancia podía saber que estaba preocupado, este asintió.

— Lo hará, se divertirá con nosotros, no va a ser incómodo.—

Abrazó al azabache, sonriente, dando palmadas en su espalda agradeciendo el apoyo, a pesar de que no solía darle vueltas a este tipo de asuntos, a veces unas palabras así ahorraban horas de angustia. ¿Estaría haciendo lo correcto? no lo sabia hasta que sucediera, era miércoles por la mañana, solo en unas horas podría decirlo.

El sonido de una sirenas pasaron por la calle contraria, los chicos no podían saber si era por ellos, no podían arriesgarse a que los viesen con las manos en la masa, así que tiraron todo lejos en un cubo de basura que estaba rebosante.
Quisieron salir por el callejón disimuladamente cuando un coche de policía derrapó justo en sus narices, abrieron los ojos al borde del ataque al corazón, separándose del vehículo por instinto para luego correr calle abajo. Mala suerte que tenían, para una vez que se iban tan lejos de casa.

Necesitaban controversia la mayoría del tiempo, pero no tan de la nada.

Sus piernas se movían ágiles calle abajo, buscando volver a su zona y cruzar el territorio que les pertenecía, tal vez no debieron irse al barrio de al lado para buscar una pared vacía.
Cada pisada resonaba en el eco de las calles frías en la madrugada, no había casi luz, las farolas que funcionaban ya no alumbraban, giraron esquinas, esquivaron árboles y baches, saltando una valla más rápidos que un gato, ¿Qué tenía el sistema en contra de una pequeña pintada en un sitio que ni si quiera era accesible?