Sweet Stalker

Capítulo 2 - Yo seré tu fan número 1

Habían pasado un par de días de ese incidente. Hoyoung como siempre se encontraba con una sudadera con capucha y cubrebocas puesto. Estaba sentado en un parque con el clima primaveral, a decir verdad, era un buen clima nocturno durante esa madrugada. Embelesado contemplaba la pulsera que su mano sostenía la cual pertenecía a ese chico. Durante el forcejeo la arrancó de su muñeca y al momento de salir huyendo sin darse cuenta la llevó consigo.

Le producía una extraña "felicidad" y todo lo que quería era poder verlo una vez más, el solo pensarlo le producía una gran "dicha". Por un momento, su imaginación voló y en su mente la escena de él entregando a la mano del chico la pulsera e imaginarlo sonriendo le causó sentirse en las nubes. Hasta que de golpe volvió a la realidad, llevó su dedo índice hacia su cicatriz y recorriéndola sus ojos se llenaron de lágrimas y coraje. Sentía una enorme impotencia al saber que jamás podría si quiera intentar acercarse.

Acto seguido limpió el par de lágrimas que habían brotado de sus ojos y solo se dijo a sí mismo "Da igual, jamás lo volveré a ver" y levantándose de la banca empezó a caminar por el solitario y oscuro parque para dirigirse a su casa.

Cuando llegó a su habitación simplemente se tiró en su cama, estaba tan aburrido y cansado de todo. Simplemente no había nada interesante, tenía un enorme televisor de 80 pulgadas frente a él y sin embargo podía pasar horas navegando por el catálogo de Netflix y jamás veía algo. A su lado había una estantería llena de libros y nunca lograba pasar más allá de la página 3 de alguno de ellos, tenía un ordenador y ni si quiera lo encendía y en cuanto a su móvil estaba harto de ver gente haciendo estupideces por un par de me gustas. Sin duda, no encontraba sentido a absolutamente nada, todo le parecía aburrido, sin sentido y un fastidio.

Recorría con la vista el techo de su solitaria habitación y se sentía tan patético vivir así, a estas alturas estaba hasta cansado y harto de dormir. Pero ¿Qué más podía hacer? Gran parte del tiempo se obligaba así mismo a dormir, aunque eso le produjera dolores de cabeza y sentirse peor al despertar, pero si dormía al menos sentía lo que creía era la sensación estar muerto. Simplemente no pensar en nada, desconectarse del mundo y dejar de existir y de que todo existiera para él.

Por lo que colocó sus audífonos y tomó su teléfono, se había acostumbrado a dormir con música de fondo porque sentía que lo relajaba y desconectaba de todo incluso estando despierto. Por lo que, entró a YouTube y empezó a buscar algo para escuchar. A decir verdad, siempre estaba buscando algo nuevo por oír porque las canciones populares en los rankings simplemente le parecían sosas y alegres como para soportarlas.

Empezó a deslizar y deslizar buscando algo y repentinamente una recomendación saltó ante sus ojos, no lo podía creer. Simplemente no lo podía creer, allí estaba él, allí estaba ese chico justo frente a sus ojos y al alcance de un "tap" en su pantalla.

Tocando su pantalla ingresó al vídeo y este presentaba un cover de una canción que no conocía y poco le importaba conocer, simplemente contemplaba extasiado cada movimiento que hacia el chico y fue así que entró rápidamente a su canal el cual a penas y tenía un par de vídeos y parecía algo abandonado.

Además de eso, encontró enlazado un perfil de Instagram al cual rápidamente accedió para toparse con un par de fotos del chico y en historias destacadas screenshot a sus cover. Hoyoung estaba cautivado por las fotos del chico las cuales rápidamente guardo y pasó horas y horas contemplándolas con una mirada penetrante y con un placer muy singular el cuál no podía describir, pero era algo nuevo y extasiante.

Tanto que ni si quiera se dio cuenta que las horas habían pasado y que ya había amanecido, por lo que cuando vio el reloj en lugar de dormir como lo hubiera hecho habitualmente cerró su galería de fotos y entró a KakaoTalk.