Los Vulturi

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Los Vulturi son el clan más grande y más poderoso de entre los vampiros. Ellos hacían cumplir las leyes del mundo de los vampiros.

El equivalente de la realeza en el mundo de los vampiros, los Vulturi, se componía de 5 miembros principales: Aro, Cayo, Marco, la esposa de Aro, Sulpicia, y la esposa de Cayo, Athenodora. La esposa de Marcus (y hermana de Aro) Didyme era también un miembro antes de ser asesinada por su hermano. Aparte de estos miembros de cabeza, también se componía de una colección de vampiros talentosos, conocidos como la "guardia de los Vulturi", siendo los más poderosos Chelsea, Jane y Alec.

Propósito:

Los Vulturi actuaban como la imagen oficial en el mundo de los vampiros, y eran un clan increíblemente influyente. También se consideraban "patrones nocturnos de las artes", ya que, a causa de su incapacidad para dormir, estudiaban las artes por la noche. Los Vulturi actuaban como tutores, manteniendo la sociedad secreta de los vampiros oculta al mundo de los humanos, según fuera necesario. A menudo enviaban a sus agentes a viajar desde Volterra a destruir clanes con exceso de exposición a través de la erradicación e todos los vampiros (y cualquier ser humano). El clan ha existido por más de 3000 años, y es el clan más grande en existencia, seguido del clan Olímpico, el Denali, y el mexicano.

Leyes:

A lo largo de los siglos, los Vulturi han establecido y aplicado una serie de leyes que se esperaba que todos los vampiros obedecieran o quedarían condenados a muerte si no lo hacían. No había muchas de ellas, y que se referían principalmente el secreto que rodeaba la existencia de los vampiros. Las leyes no estaban escritas; escribir sobre ellas sería en sí mismo una infracción. En cambio, las leyes se pasaban de boca en boca de vampiro a vampiro.

- La caza debía ser poco visible, las víctimas no podían ser encontradas; sus restos debían ser eliminados y el territorio de caza debía ser cambiados con frecuencia.

- Por ser incapaces de tener autocontrol, y por lo tanto una amenaza de exposición, no se podía crear niños inmortales. Dicha creación era el último tabú y era castigado con la muerte de: del niño, el creador, los que defendieran el niño y los que sabían de su existencia.

- Tratar con los Hijos de la Luna, a excepción de los fines de exterminio, estaba prohibido.

- El falso testimonio, sin importar la intención, era castigado con la muerte.

- La caza estaba prohibida en Volterra, la ciudad de residencia de los Vulturi; su comida era llevada desde fuera, a veces desde muy lejos.

- La atención no debía elaborarse y los vampiros no podía hacerse ver bajo la luz del sol.

- El creador era el responsable de la conducta y la enseñanza de las leyes de su recién nacido antes de que pudiera ser puesto en libertad por su propia cuenta. Al permitir una caza visible por parte de un neófito, la pena sería de muerte tanto para el neófito como para su creador. Incluso si el neófito era ignorante de la ley, sus actos temerarios seguían siendo castigados con la muerte.

- La interacción de los vampiros con los humanos no debía llamar poderosamente la atención. Si un ser humano tomaba conciencia de ellos, el vampiro culpable sería responsable de silenciar a ese humano. Esto conllevaba sobre todo a dos opciones: o bien hacer que el ser humano se uniera a los inmortales o silenciar al humano permanente. Mientras la atención no se mostrara tan abiertamente, los Vulturi no tenían por qué enterarse.

A lo largo de los siglos, muchos vampiros nacieron después de que se establecieron las leyes, y a todos los vampiros se les enseñó las leyes por parte de su creador. Aunque pensaban en las leyes como un hecho aceptado, no sabían que en realidad era el esquema de los Vulturi para mantener el control del mundo de los vampiros. Al día de hoy, muchos vampiros seguían obedecer las leyes. Al igual que los Cullen las obedecían, tanto que se mudaban de lugar aproximadamente cada 6 a 7 años para no levantar sospechas en el mundo humano.

Historia:

Los Vulturi fueron fundados por Aro, Cayo y Marco, junto con la esposa de Cayo, Athenodora. Más tarde se les unieron la esposa de Aro, Sulpicia  y la esposa de Marco, Didyme, que también era la hermana de Aro. El clan se originó en Grecia y procedió a reunir vampiros con talentos útiles para aumentar su poder, y, finalmente, se trasladó a Volterra, Italia. Cuando el clan se convirtió en lo suficientemente fuerte, los Vulturi usurparon el control del mundo de los vampiros del clan rumano, el clan gobernante original, y presentaron las leyes de la prohibición de los vampiros de ser notados por los seres humanos. Después de que los rumanos fueron derrotados en la guerra de un siglo, su próximo objetivo fueron los egipcios, con sólo dos supervivientes de la desaparición Amun y Kebi. Su poder aumentó increíblemente después de la contratación de Jane y Alec; dos gemelos vampiros con dones muy poderosos, y posteriormente hicieron al clan intocable. Presentaron a los gemelos por primera vez cuando el clan rumano trató de recuperar el control y derrotaron al ejército fácilmente con sus poderes.

En un momento, Marco y su esposa Didyme se cansaron del estilo de vida en guerra del clan y planearon abandonarlo. Aro estaba molesto por esto, pero fingió darles su apoyo; Sin embargo, más tarde en secreto Aro mató a Didyme para evitar que Marco se fuera, porque se encontraba a su cuñado mucho más útil que su hermana. Marco pasó la mayoría del tiempo tratando de encontrar al asesino (nunca se dio cuenta de que fue Aro quién lo hizo), cuando no pudo, se convirtió en suicida. En este punto, Aro contrató a Chelsea y se dio cuenta de que tenía el poder de manipular las relaciones y la usó para mantener a Marco leal a los Vulturi. La muerte de Didyme, sin embargo, llevó a Cayo y Aro a garantizar una vigilancia de estricta seguridad a sus compañeras. Como el poder del Chelsea era la clave de su civilización, Aro siempre le daba lo que quería (por ejemplo, su compañero Afton, que era mucho menos hábil que ella), sino que también utilizaba el don de Corin para evitar que se fuera. Con Chelsea de su lado, fueron capaces de reclutar fácilmente a otros vampiros que no querían unirse a ellos (por ejemplo, Demetri, Renata y Heidi).

Los Vulturi habían gobernado el mundo de los vampiros durante 25 siglos en el inicio de la serie. Durante ese tiempo, el clan hizo una serie de cosas para asegurar la estabilidad en el mundo, incluso prohibieron la creación de los niños inmortales, la limpieza después de las guerras del sur en el sur de América y la creación de sus propios vampiros para difundir sus leyes en todo el mundo. En algún momento, Cayo casi fue asesinado en una pelea con un hombre lobo. Al estar aterrorizado de los enemigos mortales de su pueblo, él empujó a los Vulturi a cazarlos hasta casi su extinción en Europa y Asia.

Carlisle Cullen, a su vez, vino a quedarse con el clan. Los líderes disfrutaban de su compañía en gran medida, pero no pudieron persuadirlo para cazar seres humanos en lugar de animales. Carlisle también trató de enseñarles los valores de la vida humana, pero sin éxito tampoco. Los cuatro fueron pintados por el pintor italiano Francesco Solimena, que encontraba sus apariciones divinamente inspiradoras. Carlisle finalmente dejó el clan, después de dos décadas y estableció su propio clan en América. Eleazar también fue una vez parte de la guardia de los Vulturi, teniendo la tarea de detectar cualquier individuo (humano o vampiro) con un don particular que pudiera serle útil al clan, pero finalmente se fue con su compañera Carmen. Los dos más tarde encontraron al Clan Denali y se unieron a ellos.

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La hermana de RenesmeeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora