III.INEFABLE (Unai Simón)

5.Dame Un Beso,Dos Y Tres

NARRA UNAI

Caminaba por los pasillos del hotel totalmente sumergido en mis pensamientos,era idiota pero idiota con ganas.¿Cómo podía haberle dicho todo eso a Maya?Había dejado que el miedo y el enfado por aquel momento me consumiera y ahora tenía que arreglarlo.
Sabía de sobra que Maya estaba en su habitación,no había querido salir en todo el día y según le había dicho a Pedri no tenía pensado salir hasta que nos fuéramos hacia el aeropuerto esta tarde-noche así que tras pasarme media hora convenciendo a Mar para que me dejase la tarjeta de la habitación por fin me dirigía a ver a Maya,a mí chica.

Abrí la puerta del cuarto cerrándola con cuidado tras de mí,caminé despacio pero con paso decidido hasta la habitación y en cuanto entré se me paró el corazón.Maya estaba de espaldas a mí,sin camiseta y sin sujetador con sus manos acariciando su vientre,su pelo estaba recogido en una pequeña trenza.Tenía la intención de acercarme a ella,abrazarla y decirle que lo sentía,que había sido un capullo,pero la cosa no me salió muy bien

-¿Qué haces aquí?-Maya se tapó los pechos cuando se giró a mirarme por el ruido que había hecho-¿Cómo has entrado?Vete-Se volvió a girar buscando una camiseta

-Mi niña...-

-Unai vete,no quiero hablar ahora-

-Maya escúchame por favor-

-¿Qué te escuche?Mira,¿Sabes qué?Que sí que te voy a escuchar,quiero saber que tienes que decirme para justificarte esta vez-

Maya volvió a girarse ya con una camiseta puesta,su trenza se había desecho un poco y su rostro no estaba tan relajado como antes,de echo todo lo contrario.
Ella me miraba cruzada de brazos y yo no sabía que decir,¿justificarme?No,ni iba a intentarlo porque no tenía justificación

-¿Vas a hablar o se supone que te tengo que leer los pensamientos?-

-Maya yo...-

«Díselo Unai,dile todo lo que me has dicho a mí y deja que te entienda,por favor»

-¿Tú no estás asustada?-Pude ver como todo ese semblante serio que tenía se desmoronaba al escuchar mi pregunta

-¿Asustada?-

-Sí Maya,asustada porque eso es lo que me pasa a mí,que estoy acojonado-Me senté en la que supuse que era la cama de Mar y me pasé las manos por el pelo con algo de frustración mientras Maya no apartaba su vista de mí-Todo esto...me costó demasiado entender que íbamos a ser padres y cuando pasó lo del accidente me cerré en banda a esa idea-

La morena caminó con tranquilidad hasta sentarse a mi lado,sentí su mano acariciar mi hombro mientras yo seguía sin atreverme a mirarla

-¿No te hace ilusión?-

-Claro que me hace ilusión mi niña...tener un hijo contigo es lo mejor que me podría pasar en este mundo-Me atreví a mirarla para ver como se mordía el labio nerviosa

-Pero...-Me incitó a seguir y así lo hice

-Pero,¿y si el accidente fue una señal?Una señal de que estábamos yendo demasiado deprisa-

-¿Tú crees que vamos demasiado deprisa?-Maya me miró algo más preocupada

-A ver mi niña...no me refiero a eso-

-¡Joder Unai!Haz el favor de explicarte bien,no te voy a comer,¿sabes?Ya lo dijimos en su momento y parece que se nos ha olvidado,se supone que hay confianza entre nosotros-Ella resopló frustrada apartando sus manos de mis hombros

-Lo digo por tí,creo que te estoy quitando tu juventud...-Ahora mismo la cara de Maya era un poema,pero vaya que no me extrañaba-Ayer los chicos estuvieron hablando en la habitación sobre la maternidad y esas cosas...la mayoría no quiere tener hijos hasta casi los treinta y tú con veinte...ya vas a llevar casi dos-