Relatos de una pareja provisional.

Quiero abrazarte tanto.

Con mis sentidos, con tanto amor, que no haya más sonido que nuestra voz, mi cuerpo en el tuyo a continuación...

Disclaimer. Este relato comienza con un fragmento la entrevista que Ana Belén, Víctor Manuel, Miguel Ríos y Joan Manuel Serrat dieron para La biblia y el calefón, en 1997, como parte de la gira "El gusto es nuestro". Los recursos están abajo :)

—Les agradezco mucho que hayan estado acá... Y no quería dejar pasar esta oportunidad, a voluntad, digamos... Como es la primera vez que nos vemos, yo tenía un programa hacía un tiempo, que el reportaje terminaba con una pregunta que era por la primera vez. Yo imagino que todos van a tener deseos de contarla, ¿no es cierto?

La expresión en los cuatro fue idéntica. En sus ojos empezó a refulgir el nerviosismo, buscándose entre sí para confirmar que habían escuchado lo mismo, que habían entendido lo mismo. ¿Iban a responder cómo habían perdido la virginidad?

Ana notó cómo las cámaras grababan sus expresiones. Ella no había podido evitar reírse de la insólita situación. ¡Por favor! ¿Qué clase de encerrona había sido esa? Ya se habían comprometido demasiado a lo largo de la noche, y aunque resultó un tanto incómodo, creía haberlo sobrellevado bien. Pero aquello ya sobrepasaba todos los límites. ¿De verdad iban a responder?

Miró a sus compañeros. Miguel, a su lado, sólo sonreía. Víctor, entrecruzado, también, aunque un poco más tenso. Frente a ella, el más nervioso era Joan Manuel, que hasta había empezado a toser.

—La primera vez en el amor, Miguel —siguió Guinzburg, dándoles a entender que aquello no había sido ninguna broma, y que iba a seguir tan implacable como lo había sido toda la noche.

—¿La primera vez en el amor? Joder, creí que era otra cosa —El rey del twist empezó a hacer ademanes con las manos, señalándolos a ellos. Realmente parecía aliviado, tal vez había relacionado la pregunta con sus pasados excesos —. Es que yo los vi tan tensos...

Jorge carcajeó, junto a la tribuna. Tras repetir la pregunta, Miguel comenzó a relatar su primera experiencia sexual, al lado de una mujer casada que vivía un par de casas más adelante a la suya. No le sorprendía, tampoco. Miguel siempre presumía de haber sido precoz, eso sí que lo sabía. Incluso le sonrió con complicidad cuando dijo cómo su vecina lo había invitado a "jugar" a su casa. El presentador quedó satisfecho con la respuesta, así que se dirigió a su próxima víctima.

—Eh, ¿Víctor Manuel?

Ana le vio suspirar, sin saber qué decir, tampoco. Empezó a reírse y sus miradas se encontraron un momento. La sonrisa de Víctor provocó la suya. Después, el asturiano volteó a ver a Miguel, y allí hubo una mirada compartida que ella no supo comprender; asumió que su amigo debía conocer la anécdota, y entonces decidió picar un poco a su marido. Ana quería conocer cómo había sido la primera vez de Víctor en el sexo.

—Me ha mirado, ¡imagínate! —dijo aparentemente escandalizada, en plan "¡cómo habrá sido!". Si ya estaban entrados en el juego, y Ríos había hecho la primera confesión, pues...

—Lo importante no es ser la primera, lo importante es ser la última — respondió Jorge, como si tratara de convencerle de que no tuviera celos.

Ana se encogió de hombros. ¡Bah! Lo que realmente tenía, era curiosidad. Así que tras recuperar la compostura en el foro, se dispuso a escuchar atentamente lo que Víctor estaba por contar.

—No, no... Yo he vivido en... Soy de Mieres, de Asturias, y he vivido muy cerca del monte. Es más, he nacido en una casa que estaba en un monte, ¿no? Entonces... Es un recuerdo maravilloso, porque está mezclado ese momento con el olor a hierba, a pasto recién cortado y eso es... Único...